Strangers. (FreenBecky)

Capítulo 40: Historia. (Parte 3)

Disfruten:)

***

"Ángel."

Londres, Inglaterra.

Perdida.

Se sentía tan perdida en el mundo, como si su cuerpo estuviera en automático, sentía como si algo dentro de ella hubiera muerto hacía mucho tiempo, no comprendía cómo es que en solo un año, su vida cambió de un momento a otro, no comprendía porque su cerebro decidió cerrarse a las nuevas cosas; ahora todo era gris a su alrededor, no había más color, no había más alegría o amor. Tenía miedo de abrirse nuevamente al mundo y recibir una bofetada en la cara, tenía miedo de conocer nuevas personas y que estás la traicionarán.

Sentía tanto miedo del mundo.

Sentía miedo de si misma.

La peor sensación que el ser humano podría llegar a sentir es el estar sin rumbo.

Y justamente así se sentía Becky, sentía que su vida ya no tenía ningún sentido, sentía que ya no podría conseguir sus sueños, sentía que ya nada podría ser igual a como era antes.

Todo se le fue arrebatado y ella no pudo siquiera reaccionar.

Charlotte junto con Engfa tardaron un día exacto en dar con Becky, ambas estaban preocupadas de que el señor Mark no respondiera su teléfono, estaban desesperadas por conseguirlos pronto; rastreando el teléfono del difunto hombre, lograron dar con la habitación en la que Becky se encontraba. La primera reaccion de ambas fue de completa sorpresa, no podían creer lo que veían, una mal herida Becky estaba tirada en el suelo, durmiendo junto al cadáver de su padre. Aquella imagen quebró a Charlotte, sin embargo, no se permitió llorar, suficiente había llorado en la cárcel, las lagrimas ya no podían salir de su cuerpo, pero el dolor... El dolor fue insoportable.

Al principio Becky no podía creer que su hermana estaba frente a ella, rápidamente ambas trataron sus heridas, llevándola pronto al hospital más cercano; todo se hizo en completo silencio, el shock estando presente en el rostro de las tres mujeres, Charlotte no quiso hablar mucho de su reciente salida de la cárcel, parecía cerrada a querer hablar sobre el tema, en todo lo que podía pensar era en la situación que tuvo que pasar Becky.

Solamente pensaba en que debían hacer de ahora en adelante.

Becky no comprendía cómo es que la llegada de su hermana no causó ninguna emoción en ella, pensó durante varios días que tal vez fue por el reciente fallecimiento de su padre, pensó que tal vez con los días algo cambiaría dentro de ella, pero no fue así. Se sentia tan vacía, sentia que le habían robado toda su luz, sentía que le habían arrebatado todo el amor que ella podría haber tenido.

Su padre había muerto el mismo día que su hermana regresaba a sus vidas. No sabía que debía de sentir en ese momento.

Le dolía ver la mirada tan cambiada en Charlotte, le dolía ver su cuerpo más delgado, incluso con algunas cicatrices, le dolía ver cómo su hermana ahora parecía temerosa de todos. Sin embargo, aún estaba aquella hermana sobreprotectora, aún estaba aquella hermana que trataba de hacerla reír.

Así era Charlotte, por más jodida que estuviera, siempre trataba de hacer feliz a los demás.

Le molestaba mucho eso, le molestaba que su hermana siempre tratará de verle el lado positivo a las cosas, le molestaba que hiciera bromas cuando estaban en una situación tan delicada.

Le molestaba que todavía la tratará como una niña.

La situación no mejoro mucho, a pesar de que Engfa tenía dinero, ahora eran tres mujeres extranjeras viviendo en un país que no conocían; por supuesto que, Becky había vivido un largo año en Londres junto con su padre, pero lo único que conocía era el restaurante donde trabajaba y algunas pocas tiendas de la cuadra, sin saber aún sobre todas las maravillas de la ciudad donde se encontraban.