Strangers. (FreenBecky)

Capítulo 47: Hermanas.

Disfruten:)

***

No sabía cómo me metía en estas cosas sin buscarlas.

Había bajado completamente la guardia y olvide estar al pendiente de David, justamente lo que quería evitar, estaba ahora en boca de todos; varias fotografías de Angélica junto conmigo ahora circulaban por internet, desde el momento en que salimos del hotel, hasta el momento en que salí del cementerio, todas y cada una tomadas desde una distancia prudente, por supuesto, contando una historia fuera de contexto.

No sabía cómo evitar aquello, pero tendría que acostumbrarme. Así era este juego.

Las fotos a simple vista podrían ser mal interpretadas, despues de todo, no abrazas a una amiga y le sujetas el rostro con cariño, casi como si quisiera besarla.

Suspiro.

Me deje llevar por las emociones, no voy a negar que en ese instante tenía mucho dentro de mi, tenía tantas sensaciones al punto de explotar que no sabía lo que tenía que hacer; y Angélica fue mi zona de confort, fue la persona que necesite abrazar en ese momento, incluso fue la persona a la que me permití querer un poco más simplemente por su amistad tan pura y verdadera.

Pero ahora las personas solo lograban ver una relación.

Genial.

Los titulares eran otro cuento, y los comentarios ni mencionarlos.

La mayoría exigía la "fotografía del beso", pues pareciera como si eso fue lo que pasó.

Pero no paso, ni pasará.

Sin embargo, tenía que mantenerme al margen, justo como me lo sugirió John en cuanto salieron las fotos. Las personas hablarían, y eso sería lo bueno, comenzarían a mencionar mi hotel, y eso sería lo bueno, hablarían de ambas boxeadoras, y si, sería lo bueno. Aún no entendía todo aquello, pero lo mejor sería seguir la corriente.

Mi madre estaba llamando demasiadas veces, no deseaba contestar, pues sabía lo que significaba aquello, prefería enfrentarla al llegar a Tailandia, y escuchar sus tontos sermones; pero mientras estuviera en Londres, había tomado la decisión de no pensar en otra cosa más que la inauguración de mi hotel, junto con el perdón de las hermanas Armstrong, por supuesto. Dos cosas que iba a encontrar de algún modo u otro.

Cueste lo que cueste.

No podia evitar seguir mirando las fotografías, a solas en mi oficina, bajaba por la página web mientras leía los comentarios de las personas, muchas de ellas deseando que verdaderamente existiera una relación entre Angélica y yo.

Sinceramente me preguntaba que papel jugaría Becky en todo esto. Me daba algo de curiosidad.

Aunque tenía entendido que ella se negó en participar.

En el silencio de mi oficina, me deje llevar por mis pensamientos, regresando al momento exacto en el que Becky habló conmigo en el cementerio, suponía que ella estaba teniendo muchos sentimientos encontrados debido a las posibles palabras que escucho, pero no podía evitar sonreír al pensar en que ella me estaba dando una oportunidad.

Poco a poco estaba quitando una capa de su imagen de chica ruda.

Me mantengo así por un largo rato, hasta que escucho tocan la puerta, al mirar la hora compruebo que no podría ser Nam, pues el almuerzo aún no sería servido.

- Señora Sarocha. -Katy, mi recepcionista, entra a través de la puerta, con algo de timidez.- Alguien desea hablar con usted. -Nuevamente miro la hora, no tendría reuniones o encuentros el día de hoy, al menos, esa fue la agenda que Nam me enseñó.-