Desastres naturales en los ultimos dias: planto un campo en los ultimos dias

Capítulo 71: Luvia de insectos del cielo

Después de resolver el problema de la sal, la vida en el pueblo se calmó gradualmente.

Los aldeanos salen temprano y regresan tarde, cuidando los cultivos en los campos todos los días, con la esperanza de una buena cosecha.

Esta mañana, Shi Lei planeó llevar a Yang Mu a cazar.

La temporada de reproducción de los animales ha terminado, y esta vez es un buen momento para salir a cazar.

Los dos acababan de empacar sus maletas y estaban listos para partir cuando el cielo de repente se nubló.

Shi Lei miró hacia el cielo y dijo: "Va a llover".

Yang Mu parecía decepcionado: "¡No puedo volver a cazar!"

Shi Lei se pellizcó la mejilla: "Está bien, iremos cuando deje de llover. "

El cielo había más y más nubes negras, y en diez minutos, el cielo estaba tan negro como la noche.

Yang Mu abrazó a An An y se sentó en la puerta de la casa para acariciar al gato, al ver las nubes negras afuera, se sintió un poco incómodo.

Shi Lei estaba pelando melón en la sala de estar, giró la cabeza y le gritó a Yang Mu: "No mires, ven y come melón".

Yang Mu guió a An An y entró lentamente: "Hermano, ¿por qué está tan oscuro? ¿Afuera? ¿No pasará nada?"

"Está bien, probablemente va a llover mucho". Shi Lei le entregó el melón picado.

Yang Mu tomó el melón y se lo dio de comer a An An. De repente, hubo una explosión atronadora, gotas de lluvia cayeron del cielo y el sonido de la lluvia sonó al instante.

Yang Mu miró hacia afuera y estaba lloviendo mucho, como si hubiera una cortina frente a la puerta, lo que dificultaba que las personas vieran la situación exterior.

No sé si el trueno de ahora asustó a los dos mastines tibetanos, y mi y mai seguían gimiendo.

Yang Mu metió el melón en la mano de An An y salió solo para calmar el estado de ánimo de los perros.

Tan pronto como salió por la puerta, Yang Mu se dio cuenta de que algo andaba mal.

Mi y Mai miraron la lluvia con cara de cautela y siguieron retrocediendo, como si la lluvia fuera a matarlos.

Yang Mu dio dos pasos hacia adelante, se agachó y miró en la dirección en la que miraba.

"¡Hermano! ¡Hermano! ¡Hay bichos! ¡Hay bichos en el agua!", Gritó Yang Mu un poco roto.

Shi Lei salió rápidamente y Yang Fenglian, que estaba acostado en el sofá leyendo una novela, respondió en voz alta: "Hay errores, hay errores, ¿por qué gritas tan fuerte?"

La voz de Yang Mu volvió a sonar: "No, hay ¡Son bichos en el cielo!"

Yang Fenglian inmediatamente dejó la novela y salió, y Shi Jianjun, que estaba cocinando sopa de camote en la cocina, también salió.

Yang Mu señaló los gusanos en el suelo y dijo: "¡Mira, hay gusanos en el cielo!"

Varias personas miraron en la dirección de su dedo, y había algunos diminutos gusanos rojos retorciéndose bajo la lluvia que goteaba de las grietas en el cobertizo de plástico.

Yang Fenglian tragó saliva y dijo: "¡Estos deberían ser los insectos en el cobertizo derribados por la lluvia!"

Era inaudito que los insectos cayeran del cielo, y Yang Fenglian sintió que su cuero cabelludo se adormecía solo de pensarlo.

Shi Jianjun tampoco podía creerlo: "¡Sí, es cierto! ¿Cómo puede haber insectos en el cielo?"

"Sal y mira".

Shi Lei estaba a punto de salir, pero Yang Mu lo detuvo: "Hermano, ponte el paraguas. Sal."

El cobertizo que construyeron estaba un poco flojo después del terremoto, y el agua de lluvia podía filtrarse por las grietas. A pesar de que hay un cobertizo de plástico que cubre la entrada de la sala de estar a la puerta del patio, todavía lloverá un poco.

Yang Mu le entregó un paraguas, cuando Shi Lei estaba a punto de salir, Mi de repente mordió los pantalones de Shi Lei y se echó hacia atrás.

Shi Lei frunció el ceño y miró al perro a sus pies, Yang Mu vio esta escena y dijo rápidamente: "Hermano, ¿por qué no sales?"

"Los animales tienen la capacidad de evitar cosas malas, estos insectos tienen miedo incluso del arroz, no deben ser simples ".

Shi Lei pensó por un momento, luego se dio la vuelta y sacó una botella de vidrio y unas pinzas. Recogió los gusanos del suelo y los arrojó a una botella de vidrio.

Al ver esto, Yang Fenglian preguntó: "Shitou, ¿quieres estudiar estos insectos?"

Shi Lei asintió: "Bueno, primero veamos qué daño hacen estos insectos"

A medio metro de distancia.

Yang Mu miró a los insectos que se arrastraban por todas partes y se le puso la piel de gallina: "¡Mata a estos insectos primero! De lo contrario, esperaré un rato y probablemente entrarán a la casa".

Shi Jianjun corrió rápidamente a la sala de estar y salió después de un rato.

Tomó el insecticida y lo roció en el suelo dos o tres veces, Yang Mu casi se desmayó por el olor del insecticida y los insectos no respondieron.

"¡Padre Shi, el agua con insecticida no es buena!", Yang Mu levantó la mano y siguió abanicando, tratando de eliminar el olor del agua con insecticida.

Shi Jianjun miró el agua insecticida: "¿Por qué no puede funcionar? ¡Aún no ha caducado!"

Yang Mu vio que los insectos se acercaban cada vez más, y su cuero cabelludo se sintió un poco entumecido: "Estos insectos se arrastran hacia nosotros ".

Yang Fenglian retrocedió un poco: "Usa fuego, usa fuego para quemarlos".

Shi Jianjun se apresuró a entrar en la cocina, sacó un trozo de madera que todavía estaba ardiendo y lo quemó en los insectos en el suelo.

Estos insectos parecen tener especial miedo a las altas temperaturas, antes de que el fuego tocara sus cuerpos, estaban locamente retorcidos por el calor.

Después de un tiempo, los insectos en el suelo fueron quemados vivos por Shi Jianjun.

De repente, Yang Mu vio tres o dos insectos cayendo frente a él, y por reflejo hizo retroceder a sus padres varios pasos.

Yang Mu miró hacia arriba, la luz era demasiado tenue, no podía ver lo que había en el cobertizo.

Levantó el palo de madera en la mano de Shi Jianjun y, con la tenue luz, vio que el cobertizo estaba lleno de insectos.

Yang Fenglian exclamó: "¡Oh, Dios mío! ¡Es horrible!"

No pudo evitar tocarse el cabello y se relajó un poco después de asegurarse de que no hubiera nada extraño en él.

Yang Mu frunció el ceño y dijo: "Papá Shi, consigue más antorchas y quema todos los insectos del cobertizo".

Después de que Shi Jianjun terminó de hablar, se apresuró a la cocina.

Yang Mu le gritó a su espalda: "Papá, cuando hiervas el agua, los insectos se arrastrarán hacia la casa".

Aproximadamente medio minuto después, Shi Jianjun salió con un recipiente, "Está bien, está bien, usa sopa de camote, tú lo viertes, iré a la cocina a hervir agua ".

Yang Mu sostenía la sopa de camote, pero no reaccionó por un tiempo.

Al oler el aroma de la sopa de camote, Yang An, con pantuflas que no le quedaban bien, se acercó a Yang Mu y lo miró.

Yang Mu miró a An'an, luego giró la cabeza para mirar los insectos en el cobertizo, y finalmente sus ojos se posaron en la sopa de camote y luego tragó.

Yang Fenglian lo miró desde un lado y no pudo evitar patearlo suavemente: "¿Por qué te quedas quieto? ¿Por qué no lo salpicas rápidamente?"

Yang Mu solo pudo verter la fragante sopa de camote en el cobertizo bajo los ojos vigilantes de An An. Salpicó.

Yang An no entendía por qué Yang Mu desperdiciaba comida. Cuando vio los trozos de batatas que cayeron al suelo, corrió a recogerlos, pero Yang Mu lo llevó de regreso a la sala de estar.

Yang Mu le dio unas palmaditas en la cabeza: "Siéntate obedientemente y deja que Papa Shi te cocine agua azucarada más tarde".