Desastres naturales en los ultimos dias: planto un campo en los ultimos dias

Capítulo 117: La codicia no es suficiente, la serpiente se traga al elefante

La nueva aldea no podía regresar y la antigua aldea no podía entrar. Shi Dayong y otros temblaban en la puerta trasera de la antigua aldea.

"Shi Shuisheng, te lo ruego, ¡danos una forma de sobrevivir!" 

"Cuando Zhangjia Village vino a rogarte, estabas dispuesto a abrir la puerta. Somos del mismo antepasado, ¿cómo puedes ser tan cruel?"

"¡Por favor abre la puerta? ¡No necesito entrar, solo deja entrar a mi hijo, el niño es inocente, por favor!"  

Shi Shuisheng miró a los aldeanos detrás de él, y ninguno de ellos se estremeció en absoluto. Suspiró para sus adentros, sabía por qué lo había hecho hoy, si los aldeanos del nuevo pueblo no hubieran sido tan despiadados antes, la gente del antiguo pueblo no sería tan cruel. 

Shi Shuisheng pensó por un momento y dijo: "Todos, sé que no les gusta la gente en Xincun, pero después de todo, también somos del mismo antepasado, por lo que realmente no es bueno morir así". 

Las palabras cayeron, Shi Haitao dijo de inmediato: " Shi Shuisheng, ¿no quieres dejar entrar a la gente de Xincun? ¿Has olvidado quién te rompió la cabeza? " 

Huang Wenbin hizo lo mismo y dijo: "Hace un tiempo, cuando la gente de Xincun nos cortaron, no pensaron en eso. ¿Qué es el mismo antepasado?" 

"No quiero decir eso, ¡escúchame primero!" 

Shi Shuisheng suspiró y dijo: "Quiero acoger a las mujeres y los niños del nueva aldea para establecerse temporalmente. Si la aldea está ocupada, que la recuperen, deben recuperar sus hogares". 

Los aldeanos del antiguo pueblo se miraron entre sí y la tía Yinghua dijo: "¿Qué pasa si la gente del nuevo pueblo no quiere recuperar el pueblo? ¡No podemos aceptar a esas mujeres y niños para siempre!"

Aunque ella ella misma es una mujer y tiene hijos, pero debido a esto, solo entonces entendió los pensamientos de las mujeres y los niños con mayor claridad.

Una mujer con un hijo, que finalmente encuentra un lugar seguro para quedarse, definitivamente se quedará sin vergüenza.

Si se trajeran mujeres y niños, y los hombres de la nueva aldea se negaran a llevarlos de regreso a la nueva aldea, entonces estas mujeres y niños se quedarían en la antigua aldea, lo que sería un gran problema.

Si alguien se arrodilla y llora por comida en tu puerta con un niño, ¿le darás o no?

¿Qué puedes hacer con tus hijos si te dejan robar comida?

Una vez que una persona tiene mucha hambre, puede hacer cualquier cosa, por lo que incluso las mujeres y los niños no deben tomarlo a la ligera.

Shi Shuisheng frunció el ceño y pensó durante mucho tiempo: "¡Hagamos esto! Dejemos que los niños entren durante un máximo de tres días. Después de tres días, no importa si la gente de la nueva aldea ha recuperado la aldea, no nos importará estos niños nunca más". 

No hay adultos alrededor. Los niños pueden ser más fáciles de tratar.

Shi Haitao objetó: "No, tres días es demasiado tiempo. Hay al menos veinte o treinta niños en la nueva aldea. ¿Cómo podemos tener tanta comida para ellos? Un día como máximo"

No habrá comida extra para ayudar a otros.

Otros también se hicieron eco. Este año, solo han cosechado una temporada y media de grano. No saben si el grano sobrevivirá a la próxima temporada de cosecha. ¿Quién le daría el grano a los lobos de ojos blancos en la nueva aldea?

Shi Shuisheng también conocía las dificultades de los aldeanos, por lo que asintió después de pensar por un momento: "Entonces llévatelos por un día, eso es bueno, y obliga a la gente de la nueva aldea a actuar lo antes posible", dijo Shi Shuisheng. 

Los aldeanos del nuevo pueblo lo que acababan de discutir a través de la puerta.

Cuando Shi Dayong lo escuchó, ¡estaba claro que fueron enviados a morir! No traían armas cuando salían, solo unas varas y azadones como máximo, ¡cómo podían ser los oponentes de esos bandidos!

La mayoría de la gente de Xincun piensa que sí, están desarmados, ¿cómo pueden luchar contra los bandidos?

Shi Dayong puso los ojos en blanco y gritó en voz alta: "Shi Shuisheng, podemos estar de acuerdo con tu propuesta, ¡pero tienes que preparar algunas armas para nosotros!"

"No llevamos nada con nosotros cuando salimos, solo unos pocos postes. Nos pediste que lucháramos contra los bandidos así. ¿No nos dice eso claramente que muramos?"

Shi Shuisheng no esperaba que la gente en Xincun para estar de acuerdo tan rápido, estuvo de acuerdo: "Está bien, ¡podemos prestarte algunas azadas, hoces y hachas!" 

"Las azadas, hoces y hachas son demasiado letales e inútiles. ¿No tienes arcos y armas? ¡Nosotros algunos! Hay arcos, ballestas y pistolas, ¡definitivamente podremos recuperar a Xincun!"

Cuando las otras personas en Xincun escucharon las palabras de Shi Dayong, sus ojos se iluminaron, ¡sí! Mientras tengan pistolas y ballestas, no deben temer a esos bandidos.

"¡Sí! ¿De qué sirve una azada? Es mejor usar un arma. ¡Si nos prestas un arma, podemos ahuyentar a esos bandidos durante la noche sin usarnos!" 

"¿Tienes miedo de esos bandidos?"

...

Shi Shuisheng estaba realmente convencido, y los compañeros de equipo de cerdos no eran tan estúpidos.

Si realmente quería darles las armas a los aldeanos de Xincun, Shi Shuisheng sospechaba que estas personas no usarían las armas para golpear a los bandidos, sino que girarían sus armas para golpearlos a ellos.

Huang Wenbin suspiró y sacudió la cabeza, "¡Shuisheng! Te aconsejo que dejes a Xincun en paz".

Shi Haitao le dio unas palmaditas en el hombro a Shi Shuisheng: "Hay un montón de lobos de ojos blancos afuera, ¡así que cuidemos de nosotros mismos!"

Yang Mu se inclinó adormilado, mirando a Shi Lei, quería reírse al ver la expresión agraviada de Shi Shuisheng.

Se espera que la amabilidad de Shi Shuisheng sea muy popular antes del fin del mundo, pero en el fin del mundo, se evitará esta amabilidad.

Shi Shuisheng suspiró e ignoró a los aldeanos de la nueva aldea, les dijo a los patrulleros que prestaran atención a las puertas delantera y trasera de la aldea y dejaran que los aldeanos se dispersaran.

Shi Dayong y otros esperaron fuera de la aldea durante mucho tiempo, pero nadie respondió. Gritó algunas palabras, pero no hubo movimiento en la aldea.

Alguien preguntó preocupado: "¿La gente en el viejo pueblo nos ignora?"

"Debe ser. Todo es tu culpa. ¿Por qué quieres armas? Solo necesitas algunos arcos y ballestas. ¿Qué debes hacer ahora?" 

"¿Qué debo hacer? ¡Si esto continúa, me moriré de frío!"

...

La temperatura de hoy es de más de 30 grados bajo cero, aunque están usando ropa gruesa, todavía sienten frío.

Algunas personas no pudieron soportarlo más, e independientemente de si los bandidos los descubrirían, recogieron un poco de leña en la oscuridad y encendieron un fuego en la puerta trasera del antiguo pueblo para calentarse. 

Shi Dayong miró la leña ardiendo y dijo en voz baja: ¡ No nos jales si quieres morir!"

"¿Por qué no quemamos con fuego la puerta trasera de la vieja aldea?" 

Shi Dayong estaba avergonzado por él y susurró: "¡Asesoramiento!" 

"¡No aconsejas, ve y recupera a Xincun!" 

Shi Xin le dio a Shi Dayong mirada disgustada, si no hubiera estado discutiendo por un arma en este momento, su hijo se habría quedado a salvo en el viejo pueblo en este momento.