[4.1] CCC_Sui géneris | TERMINADA | ©

Capítulo 57

Necesitaba saber lo que estaba pasando, así que les pedí a Flor y Colec que me lo dijeran todo y ya no me ocultaran nada de aquí en adelante.

Ellos necesitaban hablar y yo necesitaba escuchar.

Y ya todos sabían dónde estaba Jane, es decir, en los noticieros lo decían. Aunque por lo menos no tenían el descaro de suponer ni preguntar cuáles eran los problemas de Jane específicamente.

El 11 de marzo, por el constante seguimiento que ahora le daba a los noticieros, supe que Jane había salido del hospital y Colec me dijo que todo era por un trato con Alexey: si él la sacaba de ese lugar, ella le salvaba su empresa.

Ella lucía mucho mejor que bien. Se arreglaba diferente, hablaba diferente en las entrevistas y a los periodistas que la abordaban en la calle les respondía como toda una profesional.

Pero algo seguía sin estar bien en ella. Aún estaba ahí esa tristeza en sus ojos.

Además, todos estaban encima de Jane, por ahora ser parte de los accionistas de ILIA que buscaban su reapertura.

El cierre de esa empresa aquí afectó un par de familias de inversionistas, pero no se comparaba con el desastre en América. Antes de que a Jane la internaran, cerraron parcialmente la empresa y hubo incluso manifestaciones en la casa donde vive la familia De'Ath.

—¿Todo eso pasó por una empresa? —masculló Bianca, mirando el televisor.

Con Enzo, llevamos horas mirando noticieros del año pasado, reels, reportajes, hasta documentales sobre ILIA.

Y lo que estamos viendo es un en vivo de la reapertura de esa empresa y, de hecho, no solo a nosotros nos interesaba, los periódicos en las calles y la gente afuera hablaba de eso.

El titular era que hoy, 15 de junio, uno de los pilares de la economía volvía a sus actividades.

—Eso pasa cuando dejas que un país entero dependa de una sola cosa —contestó Enzo.

—Debió ser horrible para Jane —al decir eso, ambos chicos pusieron los ojos en blanco.

—Cuando parece que ya lo superaste, sales con eso.

—Oye, no puedo ignorar todo por lo que seguramente pasó —le repuse a Bianca.

No les he dicho nada de lo que Flor me contó, pero igual todo esto de ILIA es suficiente como para que me preocupe por ella.

—Shhh —Enzo nos calló a las dos, para poder escuchar lo que decían en la televisión.

"Me parece que no se tomó una correcta decisión con respecto a un elemento en específico del Consejo". Habló una mujer asiática.

—Apenas abrieron la tienda y ya quieren cambio de 500 —murmuró Bianca.

—¿Qué? —le preguntamos Enzo y yo al mismo tiempo, a lo que ella negó y señaló a la pantalla, para que le prestáramos atención el en vivo en lugar de a ella.

"Que sea parte dé, quien no ha actuado según las normas y políticas de la empresa, ni ciudadanas, a decir verdad". Seguía hablando la misma mujer.

"¿Puede ser más clara? ¿A quién se refiere?" Le pidió uno de los accionistas en la sala donde seguían luego de firmar el no sé qué para reabrir ILIA.

"Elijah White".

—No entiendo —habló Enzo.

—Todos son accionistas, pero a ese lo quiere sacar esa chica —explicó Bianca. En serio parece que estamos viendo una telenovela.