Another Hale | Stiles S.

63. Eres como el Ave Fénix.

Había cogido prestado el coche de Derek para ir al hospital. Stiles me ha confirmado que Caroline, Peter y Jake estaban allí.

Aparqué el coche para segundos después abrir la puerta del hospital asustada. No sabía qué le había pasado a Jake, pero espero que no sea nada grave. Pregunté a Melissa sobre Jake Moore, ya que era la única que estaba por allí y me llevó hacia la habitación número 213.

Recuerdo lo que Jake me dijo algo acerca de esa habitación en el Motel. También recuerdo que llegó nuevo a Beacon Hills junto con la manada de Alfas e intentaba evitarle hasta que nos tocó juntos en la misma habitación. Pensaba que iba a ser la peor noche de mi vida, de que me iba a tocar pelear con él por algún comentario inapropiado que hiciera, pero no fue así. Vi como su rostro cambió al parar en el Motel, le pregunté por ello al llegar a la habitación, me dijo que su padre había muerto en este mismo Motel, su padre había muerto en la habitación numero 213. Y estaba segura de que si él ahora mismo estaba en esta habitación no era simple casualidad.

Abrí la puerta de la habitación con miedo, por lo que podría encontrarme. Caroline estaba de pie delante de la cama y no me dejaba ver lo que había detrás. Peter estaba sentado con los codos apoyados en sus piernas. Me acerqué lentamente hacia la cama, viéndola totalmente vacía mas con las sabanas todavía puestas.

El corazón se me paró por algunos segundos mientras veía borrosa la habitación. Caroline y Peter me habían dejado sola aquí y eso lo hacía todavía más difícil. Las lagrimas empezaron a salir por mis ojos pensando en que Jake estaba muerto. Giraba sobre mí observándolo todo, y parecía que pasaba a cámara lenta.

Sentí una mano apoyarse sobre mi hombro.- Hey, ¿Estás bien?

Giré lentamente al escuchar esa voz, y al reconocer su rostro entre mis lagrimas, golpeé su cara fuertemente.- ¿Cómo puedes hacerme esto?-Pregunté mientras lentamente me acercaba a él. Me envolvió en sus brazos mientras yo dejaba mi cara en el hueco de su cuello y sonreía.- Estás vivo.-Murmuré.

Me alejé de él para dejarle que volviera a tumbarse en su cama.- Fue uno de los hombres con huesos.-Comentó mientras se sentaba y me daba una señal para que yo hiciera lo mismo.- Tenías miedo.-Murmuró.

-¿Qué?-Pregunté secando mis lagrimas y sentándome a su lado derecho.

-Tenías miedo de perderme.- Dijo mientras con una de sus manos agarró mi barbilla y su rostro cada vez estaba más cerca del mío. Tal vez no debería, o tal vez esto sea lo mejor para olvidarme de Stiles.

La puerta se abrió rápidamente antes de que pudiera juntar mis labios con los de Jake. Vi como Derek se acercaba rápidamente a nosotros mientras Jake gruñía. Era el mismo de siempre, parecía ser que el Derek insoportable de quince años solo era temporal. Parpadeé un par de veces intentando comprender lo que estaba pasando, no recordaba haber visto a Derek al entrar aquí.

- ¿Recordáis el triple asesinato de la familia Walcott?- Preguntó Derek parándose delante de nosotros, parecía realmente asustado. Asentí mientras Jake me miraba confundido. Unas horas antes, cuando estaba conduciendo de camino al hospital en la radio hablaban sobre que una de las familias más ricas de Beacon había sido asesinada y que el menor de sus hijos había logrado escapar.- Sean está aquí.-Hizo una pausa para escuchar un fuerte golpe en el pasillo del hospital.- Y se ha comido a un medico.

Me levanté de la cama y le di una orden a Jake para que se quedara aquí, no me gustaría que el corte de su pierna empeorara aunque casi estaba curado. Salí de la habitación preparada para encontrarme a Sean de cualquier manera. Pero lo que vi hizo que me quedara parada por unos segundos y que mi corazón se parara. Sean estaba lleno de sangre mientras sus manos agarraban las piernas de Stiles y lo atraía hasta él.

-¡Oye!- Le grité mientras corría hacia él. Él pareció mirarme, pero luego volvió a poner su vista hacia Stiles, el cual gritaba y pataleaba para evitar ser ingerido.

Rugí haciendo que Sean dejara a Stiles y me enseñó sus dientes, tenía demasiados más dientes que yo, parece ser que eso le facilita su trabajo. Agarré su camiseta y lo empujé fuertemente contra la pared pero cuando este cayó al suelo me empujó con su pierna hacia el otro lado del pasillo para después irse corriendo. Scott apareció pocos segundos después y se dispuso a seguirle mientras yo me quedaba sentada en el suelo del pasillo junto con Stiles.

-Gracias.-Murmuró haciendo que mi mirada fuera directamente a sus ojos, los cuales todavía me daban las gracias por ser salvado. Estaba temblando y agarró con sus brazos sus piernas flexionadas. Evitaba mirarme y se limitaba a mirar al suelo.

-Hey.-Le dije mientras le abrazaba con uno de mis brazos y con una de mis manos giré su cara para que me mirara.- ¿Qué demonios era eso?

-Era un Wendigo.-Soltó libremente mientras se limitaba a mirarme. Todavía estaba asustado, y no le culpo por ello, yo también estaría de esta forma si casi hubiera sido triturada en la boca de una cosa como esas.

-¿Cómo sabes eso?-Pregunté frunciendo el ceño, ¿Por qué se suponía que Stiles sabía lo que era?

-¿Recuerdas cuando viste tu nombre en mi pizarra?-Preguntó mientras yo asentía, recuerdo ese día, estaba justo en la esquina derecha de arriba de su pizarra, fue el día en el que William Barrow se escapó del hospital.- Estuve investigando que tipo de criatura eras, vi wendigos, Banshees, Hombres lobo, Berserkers....- Dijo mientras yo le miraba con los ojos abiertos.- Pero nunca encontré lo que eras.- Dijo acariciando mi mejilla.- Aún sigo buscando.

-¿Ni siquiera una pequeña pista?-Pregunté intrigada por las palabras de Stiles. Este debería ser mi trabajo, yo debería estar averiguando todo esto, pero... ¿Y sí saber lo que soy hace daño a las personas que quiero.

-Llevo meses pensando que eres como el Ave Fénix.-Comentó Stiles mientras volvía a mirar mis ojos.

-¿Por qué?-Pregunté confundida por lo que acababa de oír.

-Porque juraría que aquella noche, moriste en mis brazos.