Bajo Acuerdo|Michaentina

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Valentina.

Le creía, es solo que mi inseguridad no me dejaba tranquila, trate de no pensar tanto en eso, pedirle que celebrara algo que a el no le gusta salió sin previo aviso, después me di cuenta que lo incomodé, y lo último que quería era que el recordara su dolor, pero después el me llevo a comprar las cosas y fue cuándo tome la decisión de que lo ayudaría a que sobrellevará eso, el tenía que seguir con su vida, y yo lo apoyaría en todo momento, aún cuando sabía que el viaje a Italia iba a ser estresante.

***

El viernes llegó rápido, viernes 19 de diciembre, el domingo nos iríamos a Italia, y a decir verdad, Mike estaba más estresado que nunca, nuestra semana marcho bien, no peleas, no malos entendidos, adornamos la casa, a decir verdad, quedó muy linda, me sentía feliz a su lado, estábamos en la oficina, por fin nos olvidaríamos de papeles por firmar, documentos por archivar. Estaba sentada en la pequeña mesa que había en la oficina, viendo mis últimas cosas de la escuela.

—¡Por fin! Me ausente una semana y pareciera que fue un mes. ¿Tu como vas?—Iba a contestar pero la puerta fue abierta, entro un niño pelirrojo.

—¡Mike!—El niño corrió hacia Mike y lo abrazó, pude ver como se formaba una sonrisa en el rostro de ambos. —¿Que crees? Vengo de mi última consulta del año, me sacaron sangre, me metieron a la nave espacial, lo mismo de siempre.

—Bien campeón, por fin la última consulta del año ah llegado.

—¡Si! Estaba muy nervioso, no quería pasar navidad en el hospital otra vez.—El niño se volteo a mirarme. Se bajo de las piernas de Mike y se dirigió a mi.—Soy Franco Martinez, ¿tu?

—Valentina Zenere.

—Mucho gusto. —Me extendió su mano. —No le digan a mi hermana que no saludé, a ella no le gusta.

—¿Cuándo le eh dicho algo a tu hermana? Nunca, ella es mi esposa, y no es muy chismosa, así que te puedo asegurar que no le dira nada a tu hermana.—Me reí.

—Eres muy bonita.—Le agradecí. El se sentó a lado mío y empezamos a platicar, Karol tenía razón, era muy lindo. Era muy alegre.

—Franco, te habla tu hermana.—El niño salió de la oficina.

—Así que el es Franco. —Le sonreí. — Es un lindo niño.

—Eh terminado todos mis pendientes, ¿Que te parece si nos vamos a descansar a nuestra casa? —Sonreí y asentí. Tomé mis cosas y salimos de la oficina, ahí estaban Ana y Franco. —Adios Ana, Franco, nos vemos campeón, feliz navidad adelantada.

—No quiero que te vallas, ¿Prometes que cuándo regreses me llevaras por un helado y jugáremos todo el día?

—Lo prometo, llegando de Italia, tendremos un día de chicos.—Franco sonrió, vino hacía a mi y se despidió. —Avísame cualquier cosa que tenga que ver con Franco.—Ana asintió. El llegó a mi lado y tomó mi mano.

—Lo quieres mucho ¿cierto?

—Me imagino como habría sido si mi hermano menor hubiera nacido.—Sonreí.

—Hubieras sido un gran hermano.

***

Llegamos a casa, suspiré, había sido una semana muy cansada, dejé mi bolsa y mi chamarra en el perchero, fui a la cocina por una rebanada de pastel, Mike tomó otra y nos sentamos en el sillón.

—¿Por que estamos comiendo el postre antes que la comida? —Reí. —¿Acaso tienes flojera de cocinar? —Asentí, lo cuál hizo que el riera. —¿Quieres pedir hamburguesas?

—Si, ¿Podemos ver una película? —El asintió y yo puse la película, me acosté en sus piernas, sentí sus manos acariciar mi cabello, sonreí, estuvimos un rato viendo la película, llegó la comida y empezamos a comer. —¿Estás seguro que quieres ir?

—¿Te mudarías a Italia? —Me quedé perpleja. —No hablo de ahora, si lo nuestro funciona, ¿Te mudarías?

—Si lo nuestro funciona, lo cual espero que si, me mudaría a dónde tu vallas.

—Bien... pues a eso iré,no ire a celebrar algo y ser hipócrita, iré a recuperar lo que es mío, aquí la pregunta es para ti, ¿estás segura que quieres ir?

—¿Que yo valla contigo te ayudaría en algo?

—Demasiado, empezando por presumirle a ese imbecil que la chica que le gusta está conmigo.—Reí. Me levanté y lo tome de las mejillas.

—Estaré en todo momento, en todas tus decisiones.—El sonrió. Junte nuestros labios, sus labios tenían un gran sabor.

Pasamos el resto del día viendo películas, vimos la hora, el reloj marcaba la 1:45 AM, cada quien subió a su habitación, me puse mi pijama y me acosté en la cama, suspiré, había cambiado tanto mi vida en un mes. Me quedé profundamente dormida.

***

Desperté por el sonido de mi celular, contesté la llamada y era Karol.

—¡Prima! Estaba pensando en ir de compras ¿Que dices?

—Me parece bien prima. —Colgué y vi la hora 9:15 AM, realmente había dormido bien, me levanté de la cama y bajé las escaleras, vi a Mike comiendo un plato de cereal.—Buenos días Ronda. —Dije y le di un beso en los labios.

—Buenos días, tardes para ser tu.—Rodeé los ojos.— ¿Karol te despertó?  —Asentí. —Quería pasar el día contigo.  —Hizo un leve puchero.

—¿Desde cuándo haces puchero?

—Desde hoy.—Reímos, me acercó a su labios y me besó.—Me gustas.—Sonreí y lo volví a besar. Tocaron la puerta, fui a abrir y me encontré con Karol y Ruggero, ellos pasaron y saludaron a Mike. Hice de desayunar para todos, Karol me ayudó y nos sentamos todos. Karol se ofreció a lavar los platos mientras yo me bañaba. Me vestí casual y salí de la habitación, Karol y yo salimos de la casa y nos subimos a su coche.

—¿Como va todo?

—Muy bien, todo va de maravilla, lo cual me hace feliz.

—Me alegro, de verdad te lo digo, no había visto a Mike así, jamás pensé que quisiera ir a Italia, le haces bien.—Sonreí.

Puro amor para estos bebés, se lo merecen, pero también no haría mal un poco de celos.👀

(Nótese que  perdí la anterior página de facebook y me tuve que hacer otra.🥺)
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