Aimsir || Doctor Strange

Capítulo 12 || Parting of the Ways

- Levántate y pelea. Podemos terminar esto.

- ¿No es hermoso?- Kelyani ya no parecía tan sorprendida con las palabras de Kaecilius-. Un mundo más allá del tiempo. Más allá de la muerte.

La castaña se sorprendió al ver una figura aterrizar atrás de Kaecilius y sus seguidores, haciendo que una sonrisa se asomará en el rostro de la hechicera. Tal vez lo que había visto, solo era una visión enviada por Dormammu para hacer dudar de que salvaría su realidad. Así como también reafirmaría que siempre estuvo en lo correcto en su confianza depositada en el ex-neurocirujano.

Kaecilius y sus seguidores voltearan completamente asustados en ese momento. La castaña estaba más que satisfecha de lo que había visto era un completo error. Aunque eso no le quitará que tendría que investigar lo que había ocurrido y ya no podía preguntarle nada a Ancestral.

- ¿Qué hiciste?

- Hice un trato- respondió Strange observándolos.

Kelyani, Mordo y Wong empezaron a caminar lentamente, sin dejar de verlos. Kaecilius alzó su mano preocupado al ver como su cuerpo se empezaba agrietarse. La chica se encontraba contenta al ver que su realidad no iba ser absorbida por la dimensión oscura.

- ¿Qué es esto?- preguntó el líder de los fanáticos mientras la chica pasaba a un lado de él.

- Bueno, es todo lo que siempre quisiste. Vida eterna como parte del Elegido-Kelyani se detuvo al lado de Strange y al lado de ella, Mordo-. No te va a gustar.

La cara de Kaecilius demostraba dolor, al igual que sus tres seguidores. Los cuatro eran llevados directamente a la dimensión oscura mientras sus gritos era todo lo que podían escuchar. Kelyani se alegró de no estar en sus zapatos porque estaba segura de que sufrirían por la eternidad.

Sintió pena por él porque tenían una historia parecida. Los dos habían perdido a sus familias y habían encontrado el consuelo en las artes místicas. Los dos habían tomado caminos completamente diferentes. Kaecilius quería la vida eterna y regresar a su familia ya que Dormammu le había prometido hacerlo, o eso era lo que ella creía. Ella, por otro lado, había aceptado que sus padres no volverían y que lo mejor sería seguir adelante con su vida, porque sin su muerte, ella no hubiera terminado en el Kamar-Taj.

- Deberías de haber robado todo el libro - la voz de Strange hizo que saliera de sus pensamientos-, porque las advertencias... las advertencias están después de los hechizos.

Wong se empezó a reír, provocando que la castaña también lo hiciera. Era raro que su amigo se riera por un chiste tan tonto como ese. Aunque Kelyani debía de admitir que Strange había hecho un buen chiste sobre el libro de Cagliostro.

- Felicidades- la atención de Strange fue directamente hacia la chica-. Acabas de hacer dos cosas imposibles en un día. Tener una cita conmigo- luego volteó en dirección al bibliotecario, que no paraba de reírse-. Y hacer reír a Wong.

- Es gracioso- comentó el mencionado divertido.

Tanto Strange como Mordo se encontraban completamente sorprendidos por la reacción de Wong. El pelinegro negó con la cabeza y conjuró un hechizo para que regresaran en el tiempo y espacio de donde se encontraban congelados. En cuanto al santuario volvió a su normalidad, el pelinegro terminó con su conjuro.

Yani sonrió al ver que ver que la gente estaba disfrutando una noche normal, sin imaginar lo que los cuatro habían evitado. Vio a su alrededor emocionada al saber que todo continuaba sin un rastro de la dimensión oscura. Ella sintió como alguien le agarraba la mano para voltear en dirección donde se encontraba Stephen y regalarle una sonrisa.

- Lo hicimos- comentó Wong satisfecho mientras se dirigía al santuario.

Kelyani y Strange estaban dispuestos a seguirlos con sus manos entrelazadas. A decir verdad, los dos se sentían como unos adolescentes, haciendo que la chica se sonrojará y bajará la vista. Se sentía feliz de que Stephen fuera su primera cita por primera vez en mucho tiempo.

- Sí- escucharon la voz de Mordo a sus espaldas haciendo que los tres voltearan confundidos-. Si lo logramos, pero violando también... las leyes naturales.

- Mira a tu alrededor. Se terminó- respondió Strange.

- ¿Todavía piensas que no habrá consecuencias, Strange?¿No habrá que pagar un precio? Rompimos nuestras reglas como ella. La factura llega. ¡Siempre llega! Un ajuste de cuentas. No voy a seguir más por este camino- Mordo extendió su mano en dirección a la chica-. ¿Qué dices, Yani? Ven conmigo.

La chica sintió la mirada de los tres hombres que se encontraban encima de ella en cada movimiento que ella hacia. Se separó de Strange provocando la confusión del mencionado y de Wong. Mordo sonrió al ver que podría ser una señal de victoria para él.

- Lo siento, Mordo, pero no puedo ir contigo- la sonrisa de Mordo se desvaneció en el momento que escuchó las palabras de la castaña. Kelyani dio un suspiro antes continuar hablando-. Yo, al igual que Stephen, Kaecilius y tú, llegue rota al Kamar-Taj. Cuando empecé a estudiar las artes místicas, jure que protegería su realidad a toda costa. Y cuando me convertí en maestra, reafirme esa promesa. Se que rompimos varias leyes de la naturaleza, pero era necesario para evitar que esta realidad fuera devorada por Dormammu.

- Es por él, ¿no? Por Strange- Mordo arrastró el nombre mientras lo señalaba.

- No es solo es por él-respondió Kelyani decepcionada-. Es porque quiero honrar a la memoria Ancestral. Y no puedo estar con una persona que solo ve al mundo en blanco y negro cuando hay una vasta variedad de colores alrededor. Lo siento, Mordo. Me pienso quedar en el Kamar-Taj y pienso quedarme con ellos.

Mordo se encontraba completamente molesto mientras se alejaba de los tres. Kelyani estaba segura de lo que estaba haciendo y no se arrepentiría de nada. Ella no podía hacer cambiar de opinión a su amigo, y él tampoco lograría hacerlo con ella. Había sido la mejor decisión tomar caminos separados a partir de estos momentos. Sintió como alguien ponía su mano en su hombro haciendo que lo tocará inmediatamente para sentir ese consuelo que ella necesitaba.