Después de la muerte de sus padres, Kelyani Knowlton decide irse Asia para encontrarse con ella misma. En su viaje se encontrará con Ancestral, quien dará al inicio a sus enseñanzas por las Artes Místicas así como revelaciones de secretos familiares...
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Los seis llegaron a un búnker donde se encontraban varios objetos de la Segunda Guerra Mundial dispersos y acumulados en diferentes partes del lugar. Había muchas preguntas por hacer, pero no tenía tiempo de escuchar respuestas y tampoco era el momento para hacerlo. Vio una puerta en el fondo cerrado haciendo que se acercaran rápidamente.
— El libro está adentro – comentó Christine deteniéndose en frente de la puerta –. Pero solo Stephen lo pudo abrir.
— Lo bueno es que tenemos a un Stephen – Kelyani observó a su esposo.
El mencionado se acercó para poder invocar un hechizo con el Ojo de Agamotto, pero no obtuvo el resultado esperado haciendo que maldijera en voz baja. Kelly se acercó a su esposo para poder ayudarle. Sabían que estaban en contratiempo para poder abrirlo y la presión de que Wanda estaba cerca no ayudaba mucho.
—Encantamiento especial específico para mí – pensó en voz alta – que solo sabré yo.
— Debe ser algo complicado. Es muy tu estilo – replicó Kelyani.
— Stephen, Kelyani – la mencionado volteó para ver como Christine sacaba un celular –. Stephen.
— Un minuto, ese es mi BlackBerry – comentó Kelyani agarrándolo para ver que tenía su nombre grabado en la cubierta y las magulladuras que tenía por la cantidad de veces que se le había caído en su camino por Asia –. Pero, ¿por qué...? Oh, cierto. Morí primero en la Dimensión Espejo.
— Stephen se quedó con tu BlackBerry y tu iPod porque decía que era la única manera de que te recordara – explicó Zoe haciendo que obtuviera lógica.
Los tres vieron que podría coincidir haciendo que la hechicera se acercará rápidamente a la compuerta. En el momento que pusó el celular, se encendió para dar paso a la pantalla de bloque. El rostro de Christine palideció al ver que era la única manera de encender el objeto. Kelyani intercambio una mirada de emoción con su esposo.
— Genial. Necesita contraseña – comentó America malhumorada.
— Conociéndome debe ser una fecha importante para mí. Puede haber dos opciones. Strange nunca consiguió mi clave o Stange sabía mi contraseña y me voy por lo segundo. Si paso lo mismo que en mi universo, creo que se la respuesta.
La hechicera apretó las teclas para dar como resultado 2507 provocando que un chasquido sonara para abrir la puerta haciendo que Stephen murmura algo para darle un beso en la mejilla a Kelyani. En cuanto al acceso se abrió, hizo que deslumbrara la habitación. Del otro lado, salía una luz azulina para dejar ver varios pasillos incompletos que llegaban al centro del lugar. Habías varias columnas de estilo salomónicas que sostenían unos arcos con decorados barrocos. El acceso daba vueltas como si el centro tuviera una gravedad en el acceso.
— Eres un maldito genio, señor obtuve mi título y mi especialidad al mismo tiempo por memoria fotográfica – pensó en voz alta.
— Si que lo... Espera, ¿aún recuerdas eso? – su esposa solo se encogió los hombros.
Stephen se agarró de las orillas para dar un salto. La hechicera observó como caía como si las leyes de la física no existieran en el lugar. Kelyani fue la siguiente en brincar haciendo que su esposo se acercara a ella para asegurarse de que estuviera bien.
— Te tengo – murmuro agarrándola de la cintura.
— Lo sé – respondió Kelyani haciendo que asintiera con la cabeza y ambos voltearon en dirección a la puerta.
— Sígueme, niña. Tú puedes – le ordenó Strange.
A los pocos segundos, America había caído cerca de ellos causando que ambos se acercaran a la adolescente. Después brincó Christine y Zoe, quienes fueron ayudado por los dos hechiceros. Por último, el señor Knowlton fue el último en bajar para acercarse a Zoe y Kelyani.
— No tenemos mucho tiempo – comentó Kelyani alejándose del grupo.
— Esta es la Intersección, el espació entre los universos – explicó Christine.
— Es hermoso – comentó el señor Knowlton.
Todos se acercaron para observar el Libro de los Vishanti. La hechicera se sentía tan hipnotizada por el objeto. Una luz tan pura hacía que resplandecía sobre el atril. Stephen se adelanto para poder agarrarlo.
— Okey, libro. Dame lo que necesito.
Stephen agarró con delicadeza el objeto haciendo que el resplandor disminuyera. El pelinegro bajo del estrado donde se encontraba el atril sin dejar de observar el libro. Kelyani cayó al piso debilitada en lo que una bruma roja salía de sus brazaletes y al mismo tiempo, America era secuestrada por Wanda. Christine iba a ayudar a la adolescente, pero fue detenido por Zoe y Stephen. Alexander se acercó a su hija, quien había vuelto a perder todo su color con la presencia de la Bruja Escarlata. Stephen lanzó un hechizo para liberar el adolescente, pero fue contraatacado con su propio encantamiento haciendo que los tres terminaran cayendo, provocando que el Libro de los Vishanti fuera destruido. Wanda capturo a todos los adultos con un movimiento de mano.
— Te devolví tu magia en Westview. ¿Y así es como me lo pagas? ¿Separrándome de mis hijos? – Wanda se encontraba enojada con la hechicera.
— Aún si no me hubieras de vuelta mi magia, hubiera hecho todo lo posible por proteger a America.
Wanda canalizó el poder de America haciendo que se abriera el portal. Los cinco prisioneros vieron asustados las puertas a otros mundos, siendo aventados por la misma sokoviana. Los cinco volvieron a caer por el multiverso.
(Nota de la autora:
Aquí termina la aventura de Kelyani en el universo 838. Ahora veamos que pasa con ellos en el universo de Sinister Strange. A pesar de que no tendrá muchos capítulos como en el universo 838, tendrán muchas cosas que no se esperaran. ¿Alguien tiene alguna teoría de que es lo que ocurrirá? Solo puedo decir que ya había dejado algunas pistas.
Creo que sería todo de mi parte porque no hay mucho que comentar debido a que ayer subí capítulo.
