CAPITULO 102

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Habituarse al nuevo integrante de la familia tan solo costo unos días, Junior se integró a la perfección, aunque al principio era algo tímido, sobre todo con Oliver. Cuando él lo sacaba a pasear no quería que lo mirara y siempre se escondía detrás de los árboles para hacer sus necesidades. Woody tardo un poquito en aceptar a Junior en la familia, lo miraba con recelo y le gruñía cada vez que se acercaba a Scott, no dejaba que tocará su juguetes y se ponía ansioso si no le presentaban atención.

-Woody, no debes enfadarte con él. – Scott acariciaba su cabeza con cariño. – Junior tan solo quería jugar contigo.

Woody lo miró dolido, mientras resguardaba a su ranita entre las patas, había visto como Junior se la había llevado a su camita para esconderla y no le gusto para nada. Oliver tuvo que separarlos para que no siguieran gruñendo, Scott tenía la tarea de tranquilizar a Woody.

-Os queremos a los por igual, papá Scotty curará vuestros juguetes cuando los rompáis, no debes enfadarte por eso. – el can soltó un bufido de resignación. – Tienes que compartir un poco, a Junior también le gusta jugar con la ranita. – él sollozo. – No le hará nada malo, sois hermanos. Junior jugará contigo, no tienes que enfadarte así, precioso Woody.

Oliver salió de la habitación lleno de babas, Junior había entendido que era la hora de jugar, así que se abalanzo hacia el beta, Woody suspiro cansado cuando volvió a ver a Junior, con su hocico intento esconder a la ranita entre los pies de Scott.

-Muy bien, vamos a comprobar si podéis estar juntos durante unos minutos. – Woody no tardo en gruñir a Junior. – Emily vendrá dentro de poco, si os portáis mal, no os dejaré jugar con ella.

Junior se sentó en el sofá, aunque le habían enseñado que no podía hacerlo, Oliver ya no sabía cómo regañarlo, incluso ignoraba a Scott cuando le decía que no podía hacer eso. Woody siempre se quedaba en los pies de Scott para que Junior no se acerque demasiado a él.

-En la protectora me dijeron que ellos se llevaban muy bien. – le aseguro Scott, no parecía muy molesto por la situación. – No sé porque Woody se está comportando así.

-Antes, casi todo lo que había en casa era suyo. – sonrió. – Ahora debes compartirlo con Junior, es algo que no le gusta, puede que sienta que le hacemos más caso a él.

-Son como niños. – el beta se río. - ¿Tendremos que ir practicando con ellos, Scotty? Por suerte no tenemos que pasar por la fase de los pañales, no sabría cómo ponerles uno.

Habían hablado en algunos momentos sobre el tratamiento que les ayudaría a tener un bebé, Oliver le había explicado tanto los pros y los contras de aquel procedimiento. Scott no podía someterse a un tratamiento tan duro después de la operación, tenían miedo a que el beta sufriera demasiado debido a eso, por eso le dijeron que no iban a hacerlo con él. Oliver en cambió era un buen candidato para el tratamiento.

-La semana que viene me haré de nuevo los análisis. – Scott asintió. – Como me los hice hace unos meses, debo repetirlos por si acaso, quieren asegurarse de que este todo bien, tengo que ir cada seis meses, hasta que decidamos continuar.

-¿Estás seguro de que quieres ser tú? – el beta sonrió. - ¿Qué pasará con tu trabajo? Tus compañeros hablaran mal de ti si se enteran que vas hacerlo, creo que no está muy bien visto por los omega. – suspiro. – Escucho que querían prohibir la operación.

-Quieren prohibir la venta ilegal de la droga que se vende descontroladamente para cambiar el segundo género. – le explico con tranquilidad. – Hay personas que deciden someterse al tratamiento por vías no muy legales porque es más barato, sin saber los riesgos que conlleva someterse a una operación como esa.

Hasta el final del caminoWhere stories live. Discover now