No soy nadie [BL] (EDICIÓN)

~Tainstvennoye veshchestvo~

Me puse pálido al escuchar sus palabras pero aún más al ver que se acercaba a mí con el objeto que acababa de levantar del piso.

-¿Qué es lo que traes ahí?- dije nervioso mientras lo veía acercarse- enserio...respóndeme...- repetí al no obtener respuesta y tragué saliva, se sentó junto a mí volviendo a acorralarme, pero esta vez de una forma protectora.

      -Calla y cierra los ojos- ordeno con un semblante frío a pesar de su sonrisa, lo dudé un momento pero al ver como se acercaba más cerré los ojos rápidamente y apreté los labios evitando emitir sonido alguno, escuche como sacaba algunas cosas e instantes después me puso algo en los ojos asegurándose de que yo no viera nada -¿Estás bien?

-S...si...- dije sin poder ocultar mi nerviosismo en la voz- pero...me estas asustando un poco...

      -Jugaremos un juego- dijo con una sonrisa.

-¿Qué tipo de juego?

      -Tu solo confía en mí- me aseguró sonriente.

-O...ok- respondí guardando silencio mientras sentía como mis manos empezaban a temblar por los nervios y las cerré en puños para que no fuese tan evidente el temblor.

      -¿Es que acaso no confías en mí?- me pregunto con esa voz seductora ante la cual mi piel se erizaba y perdía el control.

-No es...yo...es solo...eh...es...- comencé a tartamudear, este chico me ponía muy nervioso- si...confío en ti...-lo sentí moverse en la cama y el sonido de un frasco abriéndose me sorprendió, estaba a punto de decir algo pero él solo metió sus dedos en mi boca con una sustancia viscosa, -¿qué es esto?...sabe dulce...

      -Adivínalo- dijo mientras jugueteaba con sus dedos en mi boca, yo saboreé la sustancia que los cubría, me parecía conocer el sabor pero no estaba seguro de lo que era, sabía cómo a fruta pero era extraño

-¿...jalea...?- dije recordando una escena de mi infancia; mis padres aplastaban diversas frutas en algunos platos y luego las ponían a hervir con azúcar haciendo así muchas jaleas de diferentes sabores.

      -Pues si- hablo galante- sigamos- dijo y saco los dedos de mi boca, pasaron unos minutos y volvió a introducir sus dedos con un nuevo sabor en ellos- ¿Y bien?

-Es... ¿azúcar derretida?- dije ante el nuevo sabor en mi boca, era más dulce que el anterior y tenía una textura extraña.

      -No

-Mmm...es... ¿gelatina?

      -No

-¿Enserio?- estaba sorprendido,- es acaso...-no supe que más decir- Vamos...no sé qué es esto...dime...por favor...

      -Pues no, tienes que adivinarlo.

-Pero es que no sé lo que es...- dije mientras trataba de no morderlo ya que no sacaba sus dedos de mi boca- sabe dulce...y tiene una consistencia cremosa...pero elástica...y si no es algún tipo de gelatina no tengo idea de lo que pueda ser...-comenzaba a sentirme frustrado, no había probado nada como esto antes; sacó sus dedos de mi boca y poco después estaba dándome un beso con el mismo sabor que antes tenían sus dedos.- b...bueno...eh...gracias por el beso...pero...sigo sin saber que es...

      -Pues nada...te quedaras con la duda...

-Eh...pero...yo...-fui interrumpido por sus dedos que volvían a introducirse en mi boca con un nuevo sabor.

      -Adivina- habló casi cantando.

-Ah...que asco- me queje sacando sus dedos de mi boca- esto sabe a medicina...

      -Venga, que por fin has acertado una...-se estaba divirtiendo y se notaba en su voz.

-¿Qué?... ¿Por qué has hecho eso?...sabe horrible...

      -Pues sí, pero mira...esas marcas no se quitaran solas

-Pero no era necesario que me la dieras así...no soy tonto...pude haberla tomado solo ¿sabes?...- hice un puchero por la acción de él, no me gusta nada sentirme pequeño y parece que además de pequeño me toma por retrasado.

      -Estábamos jugando ¿no?- sentí sus dedos recorrer mi mandíbula pero estaban húmedos con mi saliva, lo que hizo que me estremeciera e inconscientemente levanté la cabeza siguiendo el movimiento de sus dedos.- dime, ¿acaso no jugábamos? –su aliento estaba más cerca de mi haciéndome cosquillas en la piel.

-P...pues si...pero no esperaba que hicieras...es...-no pude terminar víctima de un nuevo estremecimiento que me recorrió todo el cuerpo, sentí la presión de sus labios sobre los míos, me estaba devorando con su boca y exploraba incesante con su lengua mi cavidad bucal, explorando cada rincón y esparciendo por mi boca la mezcla de sabores que había quedado con su juego anterior, las descargas eléctricas me recorrían haciendo que un pequeño gemido saliera de mi boca que seguía unida a la suya; nos separamos buscando aire.