No soy nadie [BL] (EDICIÓN)

~Shvartovka~

     -¿Te gusta?- preguntó en voz baja y con un tono lascivo, sentí el calor subir hasta mis mejillas, intenté hablar pero las palabras se quedaban atoradas en mi garganta, solo quería poder ver sus ojos, -¿y qué clase de modales son estos?, ¿no te enseñaron que debes responder cuando un mayor te habla?- me regañó en voz baja sin dejar de usar su tono lascivo.

-S...si...-dije como si fuera un suspiro, rio por lo bajo y comenzó a recorrer con besos mi piel desnuda, empezando detrás de mi oreja bajando por mi cuello hasta mi clavícula mordiéndome en el hueco que esta formaba- Ah...h- sentía sus dientes en mi piel y el dolor provocado por estos pero eso no evitó que un nuevo estremecimiento subiera por mi columna, me mordió con más fuerza y luego comenzó a lamer la zona herida con una lentitud que me era tortuosa, cada toque de su lengua me erizaba la piel, estaba luchando por contener los gemidos que brotaban de mi garganta con cada suave toque que él me daba.

Dejó de lamerme y se dispuso a jalarme para ponerme en pie, provocando que las sabanas cayeran al suelo, dejándome expuesto ante él, me mareé por el repentino cambio de posición pero con los ojos tapados no pude sujetarme de nada y casi caigo al piso, pero él me sujeto y me recargó contra el poste de la cama.

      -Quédate aquí- me indicó alejándose, segundos después escuche un sonido metálico en el piso.

-¿Ahora qué?- se acercó tomándome de la cintura y me sentó en una silla que supuse era lo que había provocado el sonido anterior- E...esta frío...-dije al sentir el metal contra mi piel, se acercó a mi oído y comenzó a susurrarme.

      -Muy a diferencia tuya- en ese momento sentí como jalaba mis manos hacia atrás y las ataba a la silla.

-No...te equivocas...- dije respondiendo a su comentario-¿qué...qué haces?... ¿por qué me amarras aquí?

      -Shhh- comenzó a mordisquear el lóbulo de mi oreja mientras dirigía su mano a mi miembro comenzando a acariciarlo lentamente.

Más estremecimientos me recorrieron y solté un pequeño gemido ahogado mientras él seguía acariciando, subiendo y bajando su mano por toda mi longitud, dejo mi lóbulo y bajó su lengua hasta uno de mis pezones lamiéndolo con suavidad, mi cuerpo temblaba y se contraía ante cada roce del rubio y una ola de sensaciones me inundó, me sentía demasiado bien, solo podía pensar en que era Aki quien me propinaba esas caricias por primera vez.

      -¿Cómo te sientes?- su voz sonó con un tono lujurioso y ronco siguiendo. Al intentar responder su pregunta las palabras se atrabancaron en mi garganta y de mi boca solo salió un grito de placer, me mordió con fuerza lastimándome un poco pero lo lamió y pasó al otro pezón sin detener los movimientos de su mano los cuales aumentaban su velocidad, no puedo negar que me encanta la forma en que Aki me toca, sin pudor, sentía miedo y dolor pero las descargas eléctricas me recorrían completo contrayendo mis músculos y haciéndome gemir.-Entonces, ¿cómo te sientes?- dejó un rastro de besos por mi cuello deteniendo el movimiento de su mano y al llegar a mi boca la invadió mezclando nuestras lenguas en un baile, correspondí el beso permitiendo que su lengua entrara hasta mi garganta, estaba ansioso por el contacto de su piel, mi erección era dolorosa y ese beso tan profundo solo estaba empeorando las cosas, se separó y volvió a bajar dando besos por mi cuello, besando mis pezones, pasando por mi vientre hasta llegar a mi miembro, el cual tras dejar un beso en la punta se dedicó a lamer lentamente.

Traté de no dejarme llevar por esa ola de sensaciones que me arrojaba a un abismo gritando y gimiendo con la lengua del otro, quería pedirle que se detuviera pero de mi boca simplemente no salían palabras, pasaba su lengua por toda la extensión de mi miembro, desde la base hasta el glande, donde se detuvo pasando su lengua en círculos alrededor, sentí su lengua envolviéndome y ese abismo me atrapó sin remedio y me entregué a él sin poner resistencia cuando sentí sus labios rodear mi miembro, subiendo y bajando, llegando muy adentro de su boca; los gritos y gemidos salían de mi garganta de forma descontrolada con cada movimiento de mi contrario y los estremecimientos incrementaban causándome espasmos por todo el cuerpo, acarició mi torso con su mano subiéndola hasta mi boca donde introdujo dos dedos, lamí sus dedos dejando que mi saliva escurriera en delgadas cadenas desde mi boca y se deslizara por sus dedos, los sacó y comenzó a juguetear con mis pezones con esos dedos húmedos provocando una violenta contracción en todo mi cuerpo llenando mi vientre de algún tipo de calor que bajó hasta mi miembro que dolió y se sintió estallar dentro de su boca.

Me besó con ese sabor ácido en su boca, al principio traté de alejarme al pensar en lo que había hecho pero el sabor en su boca solo me excitó más deseando tenerlo más cerca y que me quitara la venda para poder ver sus ojos y justo como si leyera mis pensamientos quitó la venda de mis ojos sin dejar de besarme para luego desatar mis muñecas también.

Al sentirme libre me arrojé en sus brazos haciendo que ambos cayéramos, yo encima de él pero sin dejar de besarlo, puso sus manos en mi cadera separándonos por la falta de aire, con un fuerte abrazo hizo que me recostara en su pecho.

      -Te extrañé mucho Alva.