SMILING PINK MILKSHAKE

ESPECIAL 2

Win frunció el ceño mientras aguardaba frente a la entrada del cine.

Lo cierto era que no estaba muy seguro siquiera de qué estaba haciendo allí. En un inicio no había pensado en aceptar la invitación de Off, sólo la película que iban a ver y las miradas suplicantes de su hermano y de Singto habían logrado finalmente que claudicara.

Y sin embargo...

"Llega tarde...", se dijo mientras volvía a mirar hacia las escaleras mecánicas que daban a la entrada de los cines.

Instantes después comprobó la pantalla que estaba en la entrada. Cinco minutos para el comienzo de la función y Off no aparecía...

Un gruñido asomó a sus labios y, con gesto decidido, se volvió hacia el lugar donde le esperaban Krist y Singto. Ambos hablaban en susurros pero Win, sin duda, pudo comprobar que no se habían percatado de que Off no llegaba y, mucho menos, de que ya no podían esperarle por más tiempo. 

"Seguro que a ellos no les importaría no ver la película.."

- "Pero yo no pienso perdérmela...no soy tan idiota..." - susurró mientras sacaba los tickets del bolsillo de su pantalón y se encaminaba hacia su hermano. Sin embargo una mano le agarró por el brazo justo cuando comenzaba a andar hacia ellos.

Win, sobresaltado, se volvió hacia el joven que, con una expresión culpable en su rostro, le saludaba con una mano mientras le tenía aún agarrado con la otra.

- "Siento el retraso" - dijo Off - "mi jefe no ha querido dejarme salir hasta que acabara de arreglar el albarán".

- "No pasa nada" - musitó el joven. Unos segundos más tarde sin embargo, y ante la atenta mirada de Krist y Singto, hizo que comenzara a andar hacia el pequeño establecimiento lleno de dulces y bebidas - "Pero, por llegar tarde vas a tener que comprarnos un par de cosillas..además de pagar la cena..."

Off rió mientras, sin oponer resistencia, seguía al joven hacia la tienda. Krist, justo detrás de ellos, intentó intervenir pero una breve mirada de Win hizo que se callara y que, con expresión preocupada, se volviera hacia Singto. Éste, sin embargo, se encogió de hombros y, acercándose a la tienda, comenzó a pedir varias bebidas y dulces junto a Win que, con una sonrisa, no paraba de repetir que quería lo mismo.

Unos minutos más tarde los cuatro chicos tenían las manos repletas de bolsas de palomitas, gominolas y bolitas de chocolate, y eso sin contar las bebidas.

- "Voy a pagar" - comentó Off mientras sacaba su billetera. 

Win sonrió y asintió.

- "Te esperamos dentro" 

Tras lo cual volteó hacia la puerta de la película, entrando en la sala sin mirar hacia atrás.

Off le observó marcharse y, con un suspiro, se dirigió hacia la dependienta.

- "Dígame cuánto es..." - dijo nada más llegar frente a la caja registradora.

Fue entonces cuando vio las gominolas con formas de osito que estaban al lado de la máquina.

"Eran sus favoritas..tal vez deba comprarle una bolsa...", se dijo mientras dejaba entrever una sonrisa de tristeza y añoranza, "aunque no se si le seguirán gustando".

El joven suspiró mientras recordaba aquella mañana en la que creyó haberlo perdido todo. La mañana del accidente...

HACÍA TRES AÑOS...

Off se despertó con un gran dolor de cabeza y el cuerpo entumecido a causa del aire frío que entraba por los amplios ventanales que daban al pequeño jardín del hotel.

- "Sin duda debo dejar de beber..." - musitó mientras se llevaba una mano a la cabeza. Sus ojos, algo doloridos a causa de la luz que entraba en el cuarto, se entrecerraron.

Con un suspiro volteó hacia el otro lado de la cama. 

Fue entonces cuando se dio cuenta de que no estaba solo. De que alguien más estaba con él y, por lo que observaba, completamente desnudo.

"No puede ser", se dijo mientras levantaba levemente la sábana que cubría su cintura y piernas. Un gruñido asomó a sus labios cuando comprobó lo que tanto temía. El también estaba desnudo.

- "Buenos días" - musitó, con voz cansada, Porsche mientras le observaba desde el otro lado de la cama.

- "¿Qué ha pasado?" - preguntó Off con un hilo de voz - "no entiendo..."

Porsche se encogió de hombros mientras le obsequiaba con una sonrisa.

- "Pues supongo que bebimos más de la cuenta y ... bueno... decidimos festejar la entrada de Gun en el grupo como muchas otras veces hemos hecho.. con un buen revolcón entre las sábanas...".

Off gruñó y, levantándose bruscamente, buscó por el suelo del cuarto su ropa interior. Cuando finalmente la encontró, sobre uno de los brazos del sillón más cercano, se la colocó y se volvió con expresión decidida hacia el joven que le observaba, sin moverse, desde la cama.

- "Pero ya no es lo mismo que antes, Porsche... ahora yo tengo novio. Amo a Gun y ésto.."- dijo mientras se señalaba a sí mismo y a Porsche - " ésto jamás debió pasar".

- "Vamos Off... que yo sepa ya has tenido otros novios antes y siempre hemos acabado igual..no eres de los que se contentan con una única persona.."

Off gruñó pero, sabiendo que Porsche no estaba diciendo nada que no fuera verdad, no dijo nada, simplemente cogió sus pantalones, se los puso y salió al pasillo del hotel.

Sin embargo, justo antes de marcharse, se volvió hacia Porsche para mirarle fijamente.

- "Lo digo en serio, ésto se acabó..." - dijo para después comenzar a caminar por el pasillo sin hacer caso de los gritos que, en ese momento, podían oírse en el interior de la habitación.

Tan ofuscado estaba con lo que acababa de ocurrir, que no vio la sombra que estaba al fondo del pasillo y que lo había visto y oído todo.

- "Así que estabas con Porsche...me has mentido y..y engañado..." 

EN LA ACTUALIDAD...

Win sonrió irónicamente mientras observaba a Off entrar en la sala con una bolsa de ositos de goma en la mano.

"Te va a costar mucho más que un par de gominolas el hacer que vuelva a confiar en ti Off..", pensó mientras se llevaba una mano al colgante que tenía oculto bajo sus ropas. Un colgante cuyo pendiente a juego estaba ahora a buen recaudo en uno de sus cajones.

Win aún no sabía cómo había aparecido en su habitación pero no tenía dudas de quién lo había puesto allí.. 

Fiat...

Sin duda le debía mucho al joven, especialmente tras recordar cómo había saltado sobre Porsche cuando éste, al llegar a la canoa, había comenzado a golpearle mientras le exigía que se alejara de su novio.

Al final el bote había volcado y ambos habían acabado en el agua. Después...después sólo recordaba a Porsche golpeando su cabeza con una piedra y poco más..

Se había salvado gracias a Fiat y, sin duda, jamás podría pagarle todo lo que había hecho por él..o por su hermano. Con una sonrisa se volvió hacia Krist que, al lado de Singto, compartían una bolsa de palomitas mientras hablaban entre ellos con las cabezas muy juntas. 

- "Bro..pásame una de las bolsas..." - susurró sin hacer caso del joven que acababa de sentarse a su lado y que, con una sonrisa, le intentaba mostrar lo que le había comprado.

No bien empezaron a oírse los primeros sonidos de la película, Win sonrió y, abriendo uno de los paquetes de palomitas, se llevó un puñado a la boca.

A su lado Off suspiró, tras lo cual cogió su bebida y empezó a beber de ella. Sin embargo, cuando una mano tomó la bolsa de ositos de goma para abrirla instantes después, el joven no pudo sino sonreír y, claramente de mejor ánimo, se volvió también hacia la pantalla..