SMILING PINK MILKSHAKE

6 (SPANISH)

El sol de la mañana entraba por la ventanas entreabiertas iluminando el rostro del muchacho que, dormido en la mullida cama, comenzaba a gruñir mientras intentaba buscar una posición que no hiciera que la luz incidiera directamente sobre sus ojos...

Krist, finalmente, suspiró mientras se sentaba sobre el colchón alejando de su cuerpo desnudo las sábanas que lo cubrían.

- "Buenos días..." – murmuró para sí mismo - "hoy es un día muy especial...¡vas a ir a ver la Escuela de Madam Zuzu!"

Tras lo cual se dio un par de golpes en las mejillas para despertarse y, con una sonrisa feliz, se levantó en dirección al baño.

Media hora más tarde el joven salía de casa tras despedirse de sus abuelos y con la firme intención de coger el autobús y llegar temprano a la Escuela.

"Espero que no haya mucha gente...", pensó mientras buscaba la parada que su abuela le había indicado el otro día.

Y es que, sin duda, quería terminar la matriculación lo antes posible para, si era posible, poder ir a las clases extras que comenzaban tan sólo en un par de horas. A la doce de la mañana. 

Krist se mordió el labio y, viendo a lo lejos la señal del autobús, comenzó a caminar rápidamente hacia el lugar.

Mientras tanto, y sin que Krist se diera cuenta de nada, un joven vestido con un esmoquin destrozado le seguía a tan sólo unos metros de distancia....

Fiat sonreía pensando en lo feliz que se veía al muchacho pero, justo después, frunció el ceño al recordar que esa mañana era muy posible que volvieran a encontrarse con ese tal Off. El joven que Krist había conocido en aquella tienda del centro comercial y que había resultado ser un alumno de segundo año.

"Pero no importa...", se dijo Fiat mientras se colocaba al lado del muchacho que, tras llegar a la parada, hacía señas al autobús que se acercaba ahora por la calle, "si ese chico intenta algo... simplemente acabaré con él..."

VEINTE MINUTOS DESPUÉS...

Las puertas de la Escuela se abrieron para dar paso a un joven que, con un maletín recién estrenado en la mano, observaba con asombro y fascinación las numerosas carátulas de películas y obras musicales que cubrían las paredes blancas. Muchas de ellas eran bastante antiguas. De grandes clásicos, sin duda, pero la inmensa mayoría correspondían a obras en los que los alumnos de Madam habían actuado durante los últimos años. 

Especialmente los de un joven que era conocido como el actor número uno del país y que Krist había conocido recientemente.

"Singto...", se dijo el joven a la vez que recordaba al muchacho, sentado en el coche de la compañía, sonriendo y animándole a que luchara por él y por sus sueños.

Krist, sin darse cuenta, sonrió.

- " ¿ Nuevo alumno?" – dijo una joven mientras se acercaba por el pasillo.

- " Sí" – contestó el joven mientras saludaba con una sonrisa en el rostro.

- " Mi nombre es Pai. Soy alumna de primer año" – comentó la joven mientras que, con un leve gesto, echaba el cabello que tenía sobre su hombros hacia atrás – " Supongo que como tú..."

Krist asintió con la cabeza.

- " Yo soy Krist. Vengo a terminar de inscribirme"

- " Pues es la última puerta. La que está al lado de la ventana.." – comentó la joven mientras señalaba hacia el fondo del pasillo – " espero verte dentro de una semana entonces... ¡byee!"

Tras lo cual la joven se encaminó hacia las puertas principales y salió del edificio.

Krist, con las mejillas algo sonrojadas pero sintiéndose feliz por haber conocido a una compañera de clase, se volvió entonces hacia el largo pasillo y comenzó a caminar hasta alcanzar la ventana que le había señalado la joven.

Sin embargo, inmediatamente se dio cuenta de que Pai se había olvidado de decirle un pequeño detallito y es que .........  

¿ cuál de las dos puertas era la secretaría? ¿ la de la derecha o la de la izquierda?.

Ambas puertas eran iguales. Completamente idénticas.

- "Diantres..." - murmuró Krist mientras miraba ambas puertas sin saber muy bien qué hacer.

Krist aguardó unos instantes esperando, contra todo pronóstico, que alguna de ellas se abriera pero finalmente, se armó de valor y abrió con cuidado la puerta de la derecha..

El joven, en cuestión de segundos, se dio cuenta de que se había equivocado de puerta.. ¡ y de qué manera!

Veinte pares de ojos, todos con ropas victorianas, se volvieron hacia el joven que, en el umbral, miraba con ojos asombrados lo que, sin duda, era un ensayo previo a un estreno.

- " ¿ Puedo saber quién eres tú y qué es lo que quieres?" – atronó una voz desde el escenario que estaba al fondo de la gran sala.

- " lo... lo siento. Buscaba la secretaría.." – musitó el joven mientras sentía cómo enrojecía hasta la raíz del cabello.

Krist comenzó a oír unas risillas que estaban haciéndose cada vez más fuertes...

- " ¡La de la izquierda!" – exclamó el profesor mientras se daba media vuelta dando por concluida la conversación.

- "Gracias" – respondió el joven con un hilo de voz tras lo cual cerró la puerta con cuidado. Intentando no hacer ningún ruido.

- " Siempre pasa..." – dijo una voz de mujer a su espalda.

Krist se sobresaltó y, con el corazón latiendo a toda velocidad, se volvió hacia la mujer que, con una sonrisa en los labios, le observaba mientras apoyaba la espalda sobre la blanca pared del pasillo.

- " Madam Zuzu..." – murmuró el joven con la boca abierta.

- " Me sorprende que me reconozcas..." – dijo la mujer mientras se llevaba un dedo al mentón – "hace mucho que no subo a un escenario".

Krist negó con la cabeza mientras sonreía presa de la excitación.

- "Ví su actuación en " Lo que el viento se llevó ", fue maravillosa" – comentó el joven.

- " Wow..." – contestó Zuzu con el asombro pintado en el rostro – " eso fue hace mucho tiempo. No tendrías más de ocho o nueve años, ¿ no?"

- "Ocho para ser exactos" – comentó el joven con una amplia sonrisa.

- " Vaya..." – musitó - ¿ y aún te acuerdas de esa obra?"

- " Perfectamente" – respondió Krist mientras asentía con la cabeza – " tengo memoria fotográfica así que recuerdo todo lo que veo, aunque sólo sea una vez..."

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Y con ésto acaban las actualizaciones del día. Siento que sean unos capítulos un tanto aburridos pero son necesarios para entender lo que pasa a continuación...