Mermaid (Taekook)

El Águila vs La serpiente

Tomé el té mientras mi mano temblaba a más no poder, trataba de controlarme pero era imposible ya que mi cuerpo estaba ahí pero mi mente estaba concentrada en lo que ocurría en esa habitación. Pasaron 4 horas exactas y mimas que jamás olvidaría.
Estaba sentado en el comedor que había en la cocina con Jin quien no paraba de hablar, oía su voz pero no las palabras que salían de el, ahora no podía prestar atención a eso. De repente escuché pasos tras de mi acompañados con risas, era Jimin y Tae.
—¿Y que los trae tan contentos? Preguntó Jin sin saber lo que estaba pasando entre nosotros. Ninguno dijo nada, podía sentir la mirada de ambos como flechas a mi cuerpo. —Bueno, ya que llegaron iré con Nam. Jin salió del sitio con un tazón de botanas en mano.
Tae se acercó y tocó mi hombro, presioné fuertemente mi quijada conteniendo así todas las emociones que sentía dentro. Volteé a verlo, me levanté y quede cara a cara pero no pude decir nada, sólo me fui dejándolos solos una vez más.
Los días pasaron Tae y yo apenas hablábamos yo pasaba con mi hija y el entrenando a los demás y por la noches una almohada dividía nuestra cama o simplemente el se levantaba y salía del dormitorio, quien sabe a donde aunque mi intuición lo presentía...
Una mañana salí al patio todos entrenaban, me senté en el césped a metros de distancia y los miraba con mi mirada perdida hasta que alguien se sentó justo a lado mío. No volteé sabía quien era. Jimin...
—¡Jungkook!
—¿Disfrutas cogerte a mi esposo? Pregunté con gran rabia y por primera vez en días lo miré a los ojos. No dijo nada. —Ayúdame a comprender lo qué pasa.
—¡Mira! Lo lamento ok, pero tú dejaste que el se acercara a mi,
—Pues ahora no lo quiero. Jimin se levantó y me dijo que ya ahora no lo haría, cuando lo escuché me puse de pie rápidamente y lo tomé del brazo fuertemente y le cuestione que quería decir.
—Un día viví enamorado de ti, tenía celos de ese hombre pero en realidad tenía celos de ti, porque Tae es sumamente bello, quien diga que no puede sentirse atraído hacia el es mentira, pero jamás tendría oportunidad, tu eres una serpiente, descendiente de gorgonas, tú veneno lo sedujo, te proclamaron un Dios un héroe pues yo también lo soy ahora, te amo como amigo pero también lo amo a él y no puedo renunciar y si me vez como competencia, me alegra serlo. En ese intenta mis ojos se tornaron como los de una serpiente, naranjas incandescentes como el fuego y di un golpe en su mejilla, este me miró y sus ojos se habían vuelto amarillos como los del águila. Los demás vieron lo que ocurrió y corrieron hacia nosotros, Tae se puso en medio y nos miró a ambos.
—¿¡Que carajos!? ¿Ustedes son como hermanos? Dijo Jin sin entender lo que había visto.
Jimin se puso frente a mi seriamente, sus ojos amarillos vieron mis ojos que permanecían como el fuego. Estaba a centímetros de mi y luego escupió un poco de sangre que estaba dentro de su boca por el golpe.
—Recuerda que el Águila come serpientes, "hermano" . Dio la vuelta y se apartó de mi. Tenía mi corazón latiendo velozmente. Tae tomó mis manos pero las quité y me fui del sitio en silencio...