Mermaid (Taekook)

Heridas

Todo se inundó en un gran silencio, Tae no podía hablar estaba tan sorprendido por lo que sus ojos habían presenciado. Trate de acercarme pero este me empujo lejos de él, nunca antes lo había visto tan molesto, pero más que molesto decepcionado. Sus ojos se miraban tan confusos, sus manos sujetaban su cabeza y trataba de respirar profundamente para no perder la razón de sí.
—¿Que te está sucediendo? Dijo entre dientes, le respondí nerviosamente. Expliqué que mi mente estaba en una gran encrucijada tratando de descifrar este nuevo ser que ahora vive dentro de mi, esto es nuevo y no se cómo debo manejarlo. Tae salió del lugar sin tan siquiera hablar más. Tuve que seguirlo, mientras tanto RM y Jin esperaron en el interior sin intervenir.
Lo seguía a paso apresurado ya que caminaba muy rápido, llamaba a su nombre para que se detuviera, no lo hizo, tuve que tomarlo de su brazo y hacerlo que volteara hacia mi. Lo miré a sus ojos.
—Tae, escúchame.
—Jungkook no te reconozco, las acciones que has cometido no tienen reparo.
—Lo sé, pero no se que debo hacer, por eso vine, encontré personas iguales a mi. Tae ríe y muerde su labio inferior en ironía.
—Pues que buena influencia, te traen a un sitio donde te prostituyen, donde le bailas a hombres por dinero y aparte de eso, terminan asesinando a todos. Le expliqué que mi errores no los podía remediar, sin embargo ahora estaba descontrolado, las emociones, mis impulsos me llevan a hacer lo que hago. Este nuevamente trato de alejarse y nuevamente lo tome de su brazo pero esta vez me recibió una abofeteada. Puse mi mano en la mejilla que me había golpeado con gran sorpresa. Al verle sus ojos estaban tornados en su color azul tal como el cristal, sin pupila solo ese color tan estremecedor. Pero por alguna razón mi cuerpo reaccionó parecido. Mis ojos se tornaron dorados y similares a los de una serpiente y al mismo tiempo mi boca hacía sonidos similares a las mismas. Ambos nos vimos amenazantemente y nos percatamos de lo sucedido.
—Perdóname Kook. Dijo con su voz entre cortada. Tae huyó del sitio apenado por lo que había hecho. Fue la primera vez que algo así nos ocurría, una discusión que llevó a un golpe. Pero no estaba tan conmocionado por su abofeteada sino más bien por nuestras reacciones, ambos ahora éramos seres distintos y con dones a nuestro favor.
Nubarrones comenzaron a invadir los cielos por la noche y un gran aguacero cayó sobre mi, señal de que Tae estaba perdiendo el control de sus emociones., pero por ahora no podía intervenir, el debía pensar sobre tantas cosas y tranquilizarme antes de poder hablar conmigo.
Sentí una presencia tras de mi y dos manos ser puestas sobre mis hombros, escuché la voz de RM y Jin quienes me pidieron entrar nuevamente. Caminamos hacia el interior de aquel caótico sitio donde todo se complicó.
—Déjame ver. Dijo Jin frente a mi, observando mi mejilla. —Tremendo golpe. Limpio un poco la sangre que había en ella. —Deberías controlar un poco más a tu novio. Respondí que todo fue mi culpa, por a ver cometido actos tan asquerosos que nunca antes creí hacerlos. RM se disculpó, dijo que yo no tenía la culpa de nada, fueron ellos los culpables al meterme a un mundo que no era el correcto, para ellos así a sido su vida siempre, pero para mi no lo era.
—Si quieres podemos hablar con el, cuando las aguas se calmen. Les respondí que no era necesario.
—Kook nosotros ahora somos tus hermanos, tal como lo fueron nuestras ancestrales madres, el vínculo que nos une no lo debe romper nada. Dijo RM, el líder del clan al perecer.
—No quiero sonar grosero, yo apenas los conozco, tal vez sí haya un vínculo entre nosotros, pero jamás se comparará al vínculo y la conexión que tengo con Tae, jamás.
—Entonces no rompas ese vínculo, ven con el, mientras tanto nosotros limpiaremos este desastre antes de levantar sospechas. Respondió Jin, asentí, tenía mucha razón debía buscarlo, no lo podía dejar solo en estos momentos. Me despedí y salí del sitio...