†Capitulo 12†

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Amaris†

Preguntas comenzaron a rondar por mi cabeza ¿Cómo entro? ¿Quién es? No tuve tiempo a preguntar nada porque el fue lo bastante veloz para adelantarse y darme un golpe seco en el estómago, mi cuerpo fue lanzado con fuerza hacia la pared, gemí unos instante por la falta del aire y por la intensidad del golpe.

Me levanté del suelo a pesar del dolor mis huesos crujieron acomodándose cómo estaba, pensé que aquello le iba a sorprender sin embargo solo ví una sonrisa en su rostro—Si eres tu princesa Amaris.

Su voz es incluso más grave que el de un licantropos, sus ojos tomaron un color rojo sangre, es ahí cuando comencé a oler el asqueroso olor de los vampiros que emana en el.—¿Quién te envío?

—No tengo tiempo para eso, responderé tus preguntas una vez estemos fueras de estás paredes—Levantó la mano hacia mi dirección con la intención de tomarme.

Sin embargo al momento que lo hizo comencé una pelea contra el, puño con puño, pierna contra su rostro incluyendo su nuca, el podría ser un vampiro pero yo tengo la fuerza de un licantropos más bien de un alpha, los golpes no cesaban ni los gemidos de dolor de ambos.

—¿Amaris?—la voz de Susan se escuchó del otro lado de la puerta, El vampiro quería ir directo hacia ya pero no sé lo permití.

Lo jale de los pies y un estruendoso golpe se escuchó antes de que ella abriera, grité con voz alpha sabiendo que me haría caso—¡Busca ayuda de inmediato!

Sus pasos se perdieron en el pasillo y El vampiro una vez más me empujó contra el suelo, las cosas comenzaron a caerse y la cajita que antes tenía en mis manos se perdió entre toda las cosas caídas por el suelo, mi sangre goteo y su olor llamo la atención del vampiro quien ahora con un frenesí se acercó más a mi con la intención no solo de llevarme si no de beber mi sangre.

Esta vez fui yo quién lo tomo del cuello y lo empujó con fuerza hacia la pared, gritos a los lejos se escucharon pero no había problema alguno solo eran las chicas asustadas por el ruido en mi habitación, gruñí con fuerza y lo empeze a ahorcar—¡Dime quién te envío!

—Te ves super sexy, llena de sangre Alpha—se burló, sin dejar de observarme sus ojos rojos adquirieron un tono más oscuro planeando hipnotizarme.

—¡Responde!—volví a preguntar, pero el se negó a hacerlo, movió su pierna contra mi abdomen volviendome a golpear, mi puño se estampó contra su rostro a la ver qué me inclinaba de dolor.

Sentí un movimiento rápido por el lugar y antes de ver quién era el vampiro ya estaba de rodillas, siendo sujetado por dos personas, regule mi respiración no había peleado así en años y menos con un vampiro con tanta fuerza, en la forma de mía lo hubiera acabado incluso usando mis dones de bruja pero no podía permitir que lo supiera, bastante tiene con saber que soy licántropa.

—Lady Amaris—se escucharon jadeos desde afuera, sin embargo ignore por completo a las chicas y me concentre en el vampiro frente a mí.

—¿Cansada princesa?—preguntó burlón, gruñi mirándolo fijamente.

—¡Que clan!—grité esperando una respuesta, los soldados del palacio lo  sostienen con fuerza.

Al igual que yo, el también está cansado, su cuerpo luce más pálido que lo habitual, tiene varios golpes en el cuerpo que se cura al mismo instante que el mío, tal vez su cuerpo sea el de un muerto pero ellos también experimentan el cansancio físico y mental.

—Sostengalo con fuerza—demande a los guardias que acataron las órdenes.

El vampiro a pesar de su expresión mostró una sutil sonrisa que me hizo enfurecer—¡Pregunte quien te envío!

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