†Capitulo 30†

92 21 5
                                    

†Amaris†

¿Vas a acostarte?—pregunte mirándolo fijamente.

Sus ojos me observaron y luego asintió—¿En la cama?

—Es mi cama Amaris, no dormiré en otro lado.—contestó acercándose mientras yo quería salirme de la habitación —Ni siquiera lo intentes, del otro lado de la puerta están reforzando el conjuro y si abres la puerta lo destruyes y te dañas en el proceso.

—Dormiré en el sofá.—conteste frotando mi cabeza.

—Vas a dormir conmigo.—contestó—Y no hay discusión. Acepta a menos que quieras que te lleva a rastras a la cama.

Suspiro gruñendo mientras veo su sonrisa vuelvo a subirme sobre la cama acomodandome en ella, me cubrí de pies a cuello dejando mi cabeza afuera.

Camina hasta llegar a mi lado se deshizo de la túnica para quedar en una camiseta sin botones, se subió a la cama llegando a mi lado sin cubrirse con su brazo detrás de su cabeza.

Su mirada vago por el techo en silencio, lo mire completamente callada, sentí su aroma varonil a unos metros de mi, sus ojos se desviaron hasta los míos.

—¿Necesitas algo?—pregunte al ver su mirada.

Una sonrisa salió de sus labios —Si, que me dejes tocarte está noche.

Lo hubiera tomado de relajo si no hubiese captado el sentido a sus palabras, le sonreí para luego empujarlo y tumbarlo de la cama, escuché su quejido pero lo ignore—¡Amaris!

—¡Estoy dormida!

—¡No es cierto!

—¡Si es cierto!

—¡No es cierto!

—¡Qué lo es!

—¡Me estás contestado estás despierta!

—¡Por supuesto que no!

—Eso ni tu te lo crees.—un segundo y ya lo tenía a mi lado, mirando hacia mi dirección mientras se cubría con la manta.—Es curioso ¿No?

Gruñó y lo miro mal—¿Qué?

—Esto.—nos señaló a ambos—En un momento nos besamos y ya quedamos de dormir juntos en una cama ¿Qué sigue? ¿Casarnos?

Una carcajada sale de sus labios, sonrío de boca cerrada.

—Estamos haciendo las cosas mal.—hable.

—No. Estás aquí porque te estoy cuidando.—dijo volteandose de espalda—No te tocare si eso quieres, solo no hagas cosas que me exciten no soy de piedra Amaris.

—eso lo sé.—murmure.

•••••••••••••••••†•••••••••••••••••••†••••••••••••

—¿Cómo te sientes?—la voz de la reina fue la que me despertó en el amanecer y ahora se encontraba a mi lado con un vestido oscuro y un rostro preocupado, sus manos tocaron mi mejilla.—¿Deseas comer algo?

—Reina.—sonreí levantándome para hacer una rápida reverencia que fue interrumpida por ella.

—No es necesario Princesa.—contestó con una expresión seria—¿Recuerdas algo de lo que te ocurrió ayer mientras estabas con mi hijo?

Asentí con la cabeza—Escuche una voz.

—¿una voz?

—Si, una voz fuerte y distorsionada, me hizo mucho daño bajo todas mis barreras mentales.—suspire apretando fuertemente la sábana—Me sentí débil e impotente. Sentí..

Pragma (1) Y (2) Where stories live. Discover now