Capitulo XX

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AMARIS

Abro los ojos mirando el techo de mi cuarto, la belleza y los pequeños detalles bien cuidado en el diseño de este, pero mi vision nublada no me permite ver su maxima belleza y mi pecho aprieta en tristeza acumulada, los recuerdos de un sueño triste bañan mi cabeza y me reincorporo antes de abrazarme en posicion fetal soltando a llorar.

Hace tiempo que no lo hacia, que no me dejaba llevar por mis emociones, intento detenerme pero mis lagrimas caen uno tras otro y no puedo pararlo. me reprimo tanto como Mia mezclando nuestros sentimientos combinados en una tristeza finita. tenia una amiga, tenia un novio, tenia una familia llena de amor y felicidad. Pero alguien lleno de maldad se interpuso en nuestro camino.

A quien yo considere debia proteger y cuidar se volvio como una serpiente y lentamente enveneno mi mundo alrededor, arrebatandome uno a uno lo que mas amo.

¿Soy debil por llorar?

La puerta se abre y siento el aroma de mi madre esparcirse por mi cuarto no pregunta se sienta a un lado de mi cama y palmea lentamente su regazo, me acerco a ella recostando mi cabeza en su regazo. su caricia hace efecto en mi y nuevamente la tristeza me embarga pero esta vez no estoy sola.

—¿Estas bien?

Pregunta despues de unos minutos, niego con la cabeza su caricia no cesa en mi cabeza.

—Madre, me gustaria ser fuerte como tu—Dije sin mirarla, mi voz se quebro a medida que bajo la voz—Para proteger a los que mas amo.

—Ya eres fuerte.

—No lo suficiente—Le cuento todo lo que paso, limpiando las lagrimas que bañan su vestido fino.

—No tenemos el control de las cosas Amaris, aveces parecemos fuerte pero en realidad no lo somos—conto mi madre con voz suave—Los humanos no tienen poderes y no pueden controlar su destino o lo que pasa a su alrededor, nosotros que tenemos poderes estamos igual de indefenso que ellos, lo que si podemos controlar es como reaccionamos a ello despues.

—Susan se ha escapado, Sahra esta en algun lugar lejos de mi y su hermano, aun falta decirle a el—Digo en voz alta—Si tan solo hubiera...

Mamá me interrumpe—No existe el "hubiera" ahora estamos en el presente hija mia, no podemos regresar el tiempo atras y aun si tuvieramos la capacidad. Tarde o temprano la linea del destino actuaria.

—Me siento rara cuestionandome madre—me levanto de su regazo me siento a su lado—Un Alpha siempre debe mostrar temple y actitud, si flaquea el reino entero se asustara y afligira ¿no es asi madre?

—Hmmm—asintio con la cabeza, solte una risita mi madre limpio mis lagrimas, la mire a los ojos—Pero la manada no es ignorante a los problemas que pasan los gobernantes, antes de reina o alpha, eres una de ellos. Porque conviviste con ellos y le diste la oportunidad de conocerte.

Me froto contra su mano su calido aroma mas la calor de su mano calman mi corazon afligido escucho sus sabias palabras que me permiten ver las cosas con claridad, minutos despues me levanto con ella y regreso a aquellos tiempos donde se dedicaba a vestirme, me baño y ella elige el vestido, combino las joyas con su ayuda. Me siento nuevamente una niña.

cuando camino hacia la sala del trono sus palabras nuevamente me hacen tener un sentimiento calido y duradero—Ahora no estas sola, lo tienes a el.

Pragma (1) Y (2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora