Mi niña (Especial 20k)

9.5K 657 87
                                    

Ahora me encontraba acompañando a Camille, Nathan y Baron a su escuela.

Claro que, los otros dos mocosos nombrados, están mal acostumbrados por Camille, antes solían venir caminando, pero a mi niña, se le ocurrió la grandísima idea de empezar a traerlos con nosotros, y ahora están más que acostumbrados a ello.

En estos momentos me encuentro cruzado de brazos tratando de calmar mis ganas de golpear a Nathan y a Baron.

Camille, siempre se sienta a mi lado, y hoy, se sentó en medio de ellos, y están hablando tan tranquilamente sin siquiera dirigirme la palabra. Como si yo fuera invisible.

- Hey Camille, tu padre nos mira molesto -escuché que Baron susurró en lo bajito- debe estar enojado con Nathan, ja -dijo mirando a Nathan.

Nathan se tensó y quedó pálido. Es una persona tímida y cobarde, cuando no está el nombrado Badra.

- Baron, no asustes a Nathan -dijo algo molesta Camille mientras le dió palmaditas en el hombro a Nathan- Tranquilo Nathan, mi padre no es mala persona, aunque lo parezca -dijo sonriéndole dulcemente a Nathan.

Basta. Deja de tocar su hombro y deja de sonreírle.

Apreté más fuerte de mis brazos para tratar de calmarme. Estaba celoso, y bastante. No lo negaré. Odio ver a mi niña tocando, sonriendo o hablando tan tranquilamente con alguien que no sea yo, su padre. Ni siquiera quiero pensar en lo magníficamente bella que será cuando sea una señorita. ¿Cuántos más de esos mocosos piensa tener revoloteando a su alrededor?.

Miré bien a Nathan, fulminantemente. El quedó casi petrificado en su lugar.

Si pudiera estar en la escuela, podría vigilar a Camille más de cerca y cuidarla. Pero, lastimosamente debo "confiar" en estos dos pedazos de escoria para vigilarla y cuidarla.

¡Además Camille atrae puro amigos varones!, de mujeres sólo tiene a Sasha y Químera. Bueno, y Karla. Espero que no crezca siendo hetero, me conviene que se vuelva homosexual. Así no se fijará en mi pequeña.

Llegamos a la escuela y colegio.

- Cuídate Camille -le dije tranquilo, o tratando de parecerlo.

- Si papito, tú también. ¡Nos vemos! -me sonrió dulcemente mientras agitaba su mano y se fue alejando con Baron y Nathan, desapareciendo tras los portones de ese instituto.

Entonces volví a casa.

Cuando llegué fui directamente a mi oficina.

- Agobio -dije observando los documentos que debía revisar hoy.

Estuve por horas leyendo y clasificando documentos, atendiendo algunas que otras llamadas para resolver ciertos problemas.

- Querido, te traigo aperitivos -dijo Marie sonriente mientras ponía una bandeja sobre la mesa.

Sándwiches y limonada, con algunos pedazos de frutas surtidas.

- Gracias -dije y continué con mi trabajo.

- ¿Puedo ayudarte? -me dijo sin dejar de mirarme.

No me vendría mal algo de ayuda. Pero ya casi termino.

- Ya estoy terminando -le dije sin mirarla.

- Ah, entiendo -dijo yéndose hacia la puerta.

- Ven, come conmigo -dije indicándole mi regazo.

Sus ojos brillaron emocionadamente como si fuera una niñita pequeña que observaba la muñeca más hermosa del universo.

Ella vino y se sentó en mi regazo.

Figlia Della MafiaWhere stories live. Discover now