Va a haber drama, gritos y mucho romanticismo.
Te invito a que te enamores un poco más con los relatos de Henry (si es posible)
Se aceptan pedidos y sugerencias.
Si hago una lista de mis festividades navidad ocupa el primer podio, la segunda podría ser Halloween, amaba los disfraces y las decoraciones.
A pesar de que el 2020 no fue el mejor año me negué rotundamente a que los desastres, el virus y todo lo que acarreó este año arruine esta fecha.
Así que desde que comenzó a nevar prepare mucho chocolate caliente y películas navideñas.
La noche de ayer fue una de las mejores navidades en mucho tiempo. Los Cavill fueron completamente amorosos y es mas dejaron varios regalos con mi nombre debajo del árbol.
Hubo música, algún que otro baile, aunque la mayoría los empecé yo, hubo anécdotas e historia de cuando ellos eran pequeños, aunque seguirles el paso a los hermanos Cavill era difícil nada se interpuso cuando comenzamos una pelea de bolas de nieve y quiero remarcar con orgullo que nuestro equipo fue el ganador. Fue una navidad especial que voy a guardar como uno de mis mejores recuerdos.
Hoy vendrían a cenar a nuestra casa, así que mientras bebía unos sorbos de café iba acomodando la mesa, los adornos, tuve que buscar algunas velas para darle un ambiente más acogedor quería que ellos se sintieran de la misma forma que me sentí yo anoche, como en casa.
Siempre tuve algunos problemas con el árbol, por alguna razón sentía que algo le faltaba, pero no tenía idea que, era un árbol precioso, cuando Henry se enteró de que amaba la navidad decidimos comprar un árbol lindo y decorarlo de la mejor manera.
Quería acomodar la estrella que se encontraba en la punta del árbol, pero dada mi estatura era algo imposible.
-Henry amor, ¿Podrías venir a ayudarme por favor?
Pasaron unos minutos y Henry no respondió ni siquiera vino a mi llamado. Intente pararme en puntas de pie y subirme a una silla, pero la posibilidad que tire el árbol era bastante así que decidí no hacerlo.
Estaba tan compenetrada intentando arreglar el árbol que ni siquiera sentí a Henry atrás mío.
-Heeeen, cielo ¿Podrías venir?
Me gire para ver si venía o si lo veía jugando, pero me lleve una sorpresa al verlo a mis espaldas.
Él estaba vistiendo un perfecto traje negro con una sonrisa que podría iluminar cualquier habitación sin la necesidad de las luces y el reflejo del árbol hacía brillar aún más sus lindos ojos celestes. Por un momento desee tener una cámara cerca para guardar esta imagen por siempre.
- ¿Qué haces?
-Cuando te vi, supe que iba a luchar contra todo por estar a tu lado. La primera vez que me aleje de vos sabia que era un tonto si no volvía de rodillas a pedirte perdón y moriría si te veo en los brazos de otra persona. Amo despertar a tu lado, amo ver como fuiste capas de a una casa transformarla en un hogar, en ese hogar que cuando estoy lejos anhelo regresar. Amo escuchar tu risa, juro que en realidad lo hago, me convertiría en un payaso con tal de hacerte reír. Fuiste capaz de aceptarme con mis aciertos y errores y apoyarme cuando caigo y ayudarme a seguir creciendo y no quiero hacerlo sin vos.
Limpie algunas lágrimas que se iban cayendo a mis mejillas y el hizo lo mismo con las suyas para seguir hablando.
-Y te amo, pero te amo porque te miro y no se hacer otra cosa, porque me hablas y quedó como un tonto embobado, porque me besas y paralizas mi mundo. Porque quiero compartir mi vida a tu lado, quiero hijos o perros o los dos, quiero que cuando sea un viejo rezongón mire a mi costado y ahí estes vos, con esa sonrisa que alegra mis días. ¡Kal!
El se arrodillo al frente mío, y nuestro pequeño perro vino corriendo con un moño parecido al de Henry y traía una cajita en su lomo atada a su collar. Henry la saco y le acaricio la cabeza. Ya mis lagrimas salían sin parar.
-Alexa, podría hablar de como me haces feliz por horas, porque coincidir en esta vida con una persona como vos pasa solo una sola vez en la vida y agradezco que hayas llegado en el momento justo, pero -suspiro antes de seguir hablando y abrió la caja que había traído Kal mostrando un bonito anillo con algunas piedras sutiles incrustadas- ¿Me concederías el honor de ser mi esposa?
Empecé a asentir cuando me agaché para abrazarlo. El respondió a mi abrazo, pero me soltó para colocarme el anillo en mi dedo.
-Nada me haría más feliz que ser tu esposa Hen.
El me beso y Kal empezó a ladrar así que Henry lo llamó para que se acerque a nosotros.
Antes de que Henry pudiera reaccionar salí corriendo a nuestra habitación para buscar mi cámara.
Baje corriendo las escaleras y él se había parado del suelo, se encontraba con una mirada confusa, pero la quito cuando le mostré lo que hacía traído, Henry la agarro y nos sentamos nuevamente llamando a Kal para que quede entre nosotros, Henry con su sonrisa, Kal con la lengua afuera y yo mostrando mi anillo con los ojos llenos de lágrimas.
Cuando la polaroid salió la tome para mirarla, era una foto preciosa que merecía que todo el mundo la vea. Henry la agarro y la colocó en medio del árbol.
-Ahora cuando todos la vean, van a ver la preciosa familia que formamos.
Sonreí ahora el árbol estaba perfecto, le faltaba eso, él me limpió algunas lágrimas y besó mis labios.
- ¿Qué hice para merecerte?
-Cada día que me levanto te miro y me hago la misma pregunta.
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