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(Pedido por KarenBalaguera3 )

Era una idea terrible, una idea absolutamente descabellada que se me ocurrió seguramente cuando mi mente no estaba en sus mejores días.

¿A quien se le ocurre en pleno 2021 tener una cita a ciegas? Y estoy segura que la foto de perfil que tiene es falsa.

A decir verdad, una noche donde el vino y una película donde la mayoría consideraría comedia romántica termine aburrida hasta la medula y me descargue una app de citas. Recibí mensajes de todo tipo, pero este me llamaba la atención, y mas porque su primer mensaje fue un "Hola buenas noches" y no una foto de su... ¿Pene?

Comenzamos a charlar por medio de la aplicación y se lo veía un hombre completamente educado, a tal punto de que teclee varias veces ¿Disculpa que haces acá? Pero no me anime a mandárselo.

A los días el me pidió mi numero a lo que se lo di, hablamos bastante, el me conto que después de tanto tiempo trabajando y enfocado en eso una relación era algo que dejo a segundo plano a tal punto de que se encontraba soltero.

Su foto y sus ojos me llamaban la atención a decir verdad bastante, era algo casi imposible que ese hombre este soltero, pero decidí darle un voto de confianza y creer que la persona que recibía mis mensajes era quien decía ser.

Los mensajes pasaron de solo ser uno a la mañana a unos cuantos, a la noche a estar escribiéndonos durante todo el día, tanto que si veo algo gracioso se lo mando al instante y el hace lo mismo conmigo.

Un día el me escribió como siempre un sábado a la noche el cual como costumbre mía estaba con una copa de vino y mirando la televisión la cual solo estaba encendida ya que estaba mas enfocada en el teléfono cuando me llego un audio de el. Como primera reacción fui a abrilo al segundo que me había llegado, pero respire y espere unos minutos, tres para ser exacto. No quería parecer desesperada pero jamás nos habíamos mandados audios.

Entre al mensaje cuando pasaron los tres minutos y aprete para escuchar, ¡Carajo! Su voz. Por dios necesito que el día mi nombre para tatuarme su voz.

"Hola, que estas haciendo? Yo recién termino de cocinar algo y ahora prendí la televisión para encontrar algo para mirar"

Gracias a dios que las aplicaciones no avisan cuantas veces escuchas un audio sino estaría en problemas creo que escuche su audio unas dos o seis veces no recuerdo bien.

Nos quedamos hablando un tiempo mas hasta que por fin se animo a llamarme, nos estuvimos hablando casi de lo mismo que charlamos por mensaje.

- ¿Este fin de semana tienes algo que hacer? -Unos nervios me recorrieron todo el cuerpo.

-Mientras no sea el 14.-El rio y yo hice lo mismo.

- ¿O acaso no quieres ser mi san Valentín? -Con esa voz, soy hasta Batman.

-No en realidad mi plan es quedarme en la cama sin hacer nada, pero estas invitado si quieres.

- ¿A tu cama? -El comenzó a reír y yo me puse colorada.

-Ay no, sonó muy mal discúlpame. Estas invitado a pasar el domingo conmigo.

Entre algunas charlas y risas quedamos en vernos en un café el domingo, No diría que no estaba nerviosa, moría de nervios que llegue pronto el domingo, pero al mismo tiempo quería que llegara ese día.

Voy caminando con un poco de nervios a nuestro encuentro, opte por usar unas botas con algo de taco, por su foto me daba la impresión que era alto y no quería que queda tan en contraste la altura. Llegue al lugar indicado, preferí que sea al aire libre por si no era el, podía seguir caminando como si nada hubiese pasado.

El estaba vestido casual pero no entraba en lo clásico, bah a quien le voy a mentir estaba completamente perfecto tanto que mi cerebro se desconecto unos segundos y creo que mi boca se abrió.

-Hola, mucho gusto soy Henry. -El estiro su mano y yo hice lo mismo.

- ¿Cómo estas Henry? - El detrás de su espalda saco un ramo de flores era sencillo pero precioso. ¿Acaso es una propuesta de casamiento? ¿Dónde firmo?

-Lo lamento, no quería parecer muy cursi pero dado el día preferí llegar con algo. -Agarre el ramo y sonreí.

-Muchas gracias, están preciosas.

Comenzamos a caminar por el parque, el día estaba un tanto nublado, pero estaba especial para caminar.

-Me dijiste que eras neurólogo, ¿no? - El asintió.

-Si de hecho por suerte tuve mi día libre y quise aprovechar para conocerte. -Agache mi cabeza algo sonrojada por el comentario.

-Bueno, espero que no termines decepcionado al finalizar el día. -El me miro sonriendo e hizo una mueca un tanto chistosa.

-En lo referente a tu persona, no creo que haya algo decepcionante. -Y ahí estaba nuevamente el color rojo en mi cara.

Caminamos hasta que paramos para pedir un helado el cual se opuso cuando dije que yo lo pagaría. Ingleses. Hubo charlas, hubo risas y algún que otro rose de nuestras manos.

A final del día me acompaño caminando hasta mi casa, dude un poco, pero lo invite a pasar.

-Gracias, pero necesito volver a mi casa a acomodar las cosas para mañana. Pero fue un día bastante interesante. -Dijo mientras acomodaba un mechón rebelde de mi cabello que caía a mi cara.

-Lo mismo digo, ¿No decepcione tu domingo? -El rio negando con la cabeza.

-Al contrario, soy yo el que siente que necesito mejoras mis tácticas.

- ¿Tus tácticas? - Lo mire sin entender.

-Claro mis tácticas para cuando en estos días te llame para invitarte a cenar. -Sonreí y asentí.

-Estaré esperando tu llamada entonces doctor. -El rio un poco.

-Que tengas una buena noche linda. -Se acerco para dejar un beso en mi mejilla, pero gire unos centímetros mi cara haciendo que nuestros labios se rocen.

-Ahora si voy a tener una buena noche-dije guiñándole el ojo y girándome para entrar a mi casa.

Bendita sea las app de citas y gracias por presentarme a doctor Henry Cavill, lastima que sea neurólogo sino con gusto me hago la desmayada para que me haga respiración boca a boca. 

 

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Henry Cavill One ShotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora