EXTRA 3

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–¿Cómo era todo antes?

Ella sonrió y se sentó a su lado con tranquilidad.

–Tampoco te creas que ha cambiado mucho, Arion –él la miró fijamente–. E igualmente, me creo que Mark ya os lo ha contado todo, ¿no? Si hasta hizo un reportaje y todo –comentó con una ligera risa.

Devlin comenzó a jugar con Spoter mientras Sabrina no le quitaba el ojo de encima. Estaban en el jardín de los Blaze. Desde que empezaron eso de los viajes en el tiempo, Arion iba todos los días con Spoter a ver a los Blaze. Axel siempre le informaba de sus avances y Sabrina escuchaba atenta casi toda la información. 

Sabrina Blaze había sufrido la ira del Dorado y había estado delicada de salud. Ella era de por sí muy propensa a caer enferma. Debido a ello, Axel le había prohibido salir de casa mucho y conocer todos los detalles de esos viajes. Ella solo conocía que viajaban al pasado para poder salvar al fútbol y a Mark Evans. Y para ella era suficiente.

Hasta que la secuestraron los de Nu Gen y ahí lo descubrió todo. 

–No puedes apartarme de todo lo que creas que puede hacerme daño, Axel –le había recriminado cuando tuvieron un tiempo a solas–. Soy más fuerte de lo que crees.

Axel lo sabía, claro que sabía que su mujer era fuerte. Pero su instinto era protegerla de cualquier cosa.

–Lo sé. Pero al igual que un león, por muy fuerte que sea su compañera, él siempre estará protegiéndola. Y eso me pasa a mí.

Sky Blue veía la interacción de la pareja y suspiró junto con las demás gerentes y Goldie. Lo que tenían Sabrina y Axel era algo precioso.

–Vendrán muy pronto.

Arion la miró, saliendo de su mundo.

–¿Quiénes? –No entendía, ¿quiénes vendrían?

Habían vuelto de jugar un partido contra el equipo del Raimon que ganó al Zeus hace 10 años. Fei había vuelto a casa, al igual que todos. Ahora todo había vuelto a la normalidad.

Sabrina había llevado a parte a Arion y le había invitado a ir a casa esa misma noche. Arion ni siquiera dudó. Le encantaba ir a casa de los Blaze.

–Todos –respondió con una sonrisa.

De repente, tanto los integrantes del nuevo Raimon, como los del antiguo, aparecieron en la casa de los Blaze. 

–Hola –saludaron todos.

Sabrina, Arion y Devlin, junto a Spoter, entraron en la sala de estar. La anfitriona sonrió. 

–Sentaos, por favor –les invitó, señalando la enorme cantidad de sillas y los sillones que había en el salón–.

»Ven, Arion, te responderé a todas tus preguntas.


╭───────╯ °✧° ╰───────╮


Axel jugaba con un mechón del pelo de su esposa con aire distraído mientras su hijo jugaba con otro mechón. Estaban todos reunidos en su salón. ¡En su maldito salón! ¿Por qué tenían que estar ahí? ¿Por qué tuvo Sabrina que invitarlos? Con lo feliz que eran siendo los tres solos, en su casa.

Lo había planeado todo. Devlin se dormiría en dos horas y Sabrina y él tendrían toda la noche para ellos solos. Para...

–El sexo.

Axel miró a su esposa con los ojos abiertos. ¿Qué acababa de oír? Vio como Nelly asentía bebiendo de su té y lanzándole un guiño a Mark y como Silvia, aunque sonrojada, asentía también. Las demás féminas solo miraban sonrojadas y sorprendidas a su mujer, al igual que muchos otros de los allí presentes. Que, cabía destacar, eran más de tres. Eran como más de treinta personas. ¡¡TREINTA PERSONAS!!

Otro mundo [IE] ✔️Where stories live. Discover now