Otro mundo [IE] ✔️

Capítulo Catorce

Sabrina se lo estaba pasando en grande. No se había reído más en toda su vida.

–Mal –le reprendió Jude de nuevo–, ya no eres portero. Deja de usar las manos.

–Al menos no es por qué no sepa que no debe hacerlo –trató de consolar Bobby.

La verdad era que no estaba muy convencida del plan de Jude y la entrenadora. Mark siempre fue portero y el equipo estaba acostumbrado a tenerlo detrás, cuidando la portería. No era que no confiara en que Darren fuese a ser defender bien la portería, pero lo cierto era que, simplemente por la costumbre, se sentía más segura con Mark de portero. Y temía que no fuese solo ella quien pensase así

"Lo último que necesitamos ahora es que empiecen a haber desconfianzas por todos lados"

Poner a Mark como líbero era una gran estrategia. Serviría para reforzar la defensa o el ataque. Pero también era muy arriesgada. Podría hundir el equipo. Sabrina recordaba el partido contra el Mary Times. Darren aún estaba desorientado y Tori estaba haciendo su parte y la del chico, provocando un gran hueco en la defensa. Sabrina temía que pasase lo mismo. Si el equipo no llegaba a sentirse totalmente seguro con Darren, sería fácilmente derrotado porque se esforzarían demasiado en defender y no en atacar. Y, por mucho que se defienda la portería, para ganar hay que marcar.

–¿Por qué no probamos con otro sistema de entrenamiento? –Le preguntó Bobby, exasperado, a Jude, llamando la atención de Sabrina.

–¿Qué? Con lo que me ha costado pensar este –se quejó Mark.

–Lo ha sacado de las notas de David Evans –respondió Jude–. A Mark se le ocurrió la idea de convertirlo en una nueva supertécnica y yo confío en las ideas de Mark –terminó decidido.

Sabrina asintió. Todos en el equipo confiaban en su capitán a muerte. Si el chico les decía que se tirasen por un puente, seguramente todos lo harían. Sonaba un poco idiota, pero eso era bonito porque demostraba la gran confianza y unión que había en el equipo.

Sin embargo, Jack tenía razón. Alguien que lleva haciendo de portero tanto tiempo le será muy difícil cambiar de posición tan de repente. Le costaría mucho adaptarse y ellos no tenían tanto tiempo.

Entonces, a Sabrina se le ocurrió una brillante idea.

–Mark –lo llamó, acercándose a los chicos–. Tengo una idea para que te adaptes más rápido a tu nueva posición.

–¿De verdad? –Preguntó emocionado el chico–. ¿Y en qué consiste?

–Vamos a utilizar tu cosa favorita del mundo –le dio una pista, llamando con un gesto al señor Veteran.

–¿Un balón?

–¿Unos guantes?

–¿Una cama?

–¿Comida? –Preguntó Jack, pensando en que tenía mucha hambre.

–Nop –respondió como una niña pequeña, causando que Axel muriese de ternura–.

»Ruedas.

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Por orden de Sabrina y Jude, quien entendió en seguida lo que planeaba la chica, Mark se puso dos ruedas, impidiendo así que sacara sus brazos para detener los tiros y utilizase así su cabeza.

–Es temporal, Mark –le explicó la chica cuando fue a beber agua, agotado del peso de las ruedas–. Las llevarás hasta que toda tu fuerza esté en tu cabeza.