Epílogo

369 71 9
                                    

Hace un mes que Alison y yo volvimos a San Francisco para buscar nuestras pertenencias para instalarlas en el loft de Bastian, aquí en Hills Town. Comencé a trabajar en su comisión de inmobiliaria y Alison obtuvo el puesto de psicóloga y consejera de la escuela gracias a que Irina habló con el director. Le dije a Bastian que le pagaríamos el alquiler todos los meses, a lo cual se negó rotundamente. La única forma de llegar a un trato, fue que aceptaran que una vez al mes, saldríamos a comer los cuatro a un caro restaurante y nos dejaran pagar a nosotros. Y Alison agregó que todos los jueves, sería su día de descanso, así que nosotros cuidaríamos del pequeño Alex ese día de todas las semanas.

Justo hoy, es ese día. Así que en algunos minutos Alison saldrá de ducharse para que vayamos a buscar a nuestro sobrino. Yo estoy en la sala, en el escritorio que compramos hace un par de días para que ella pudiese estudiar. Estoy escribiendo en este cuaderno, este que abandoné en algún momento.

¿Por qué estoy escribiendo esto ahora? Esa pregunta tiene varias respuestas. La primera, fue que decidí terminar este cuaderno que comencé a escribir hace mucho. Porque me ayudaba a calmarme en muchos momentos de mi vida que sentía que nada tenía sentido. La segunda, fue que Alison me animó a terminarlo. Dijo que era algo terapéutico escribir sobre las vivencias en las memorias de cada uno, o algo así entendí. La tercera y última, fue que me gustaría que en algún momento, alguien llegara a este cuaderno. Tal vez un hijo o una hija, tal vez Thais cuando tuviese diecisiete años o incluso un nieto.

Pero la razón oculta para acceder a hacer esto, es porque siempre he sentido que mi historia es muy distinta a la de Alison. Ella tuvo sus experiencias y llegó a vivir una cierta normalidad, mucho tiempo de su vida sucedió antes de que supiese que tenía magia. Que tenía poderes. Que era sobrenatural.

A diferencia de mi, que tuve que irme de casa y abandonar a mi familia cuando era un niño. Nadie más que los Clarke saben lo que hemos vivido durante esos años, pero quién encuentre este cuaderno, lo podrá leer.

—Nate —me habló Alison, saliendo del cuarto.

Tenía el cabello un poco mojado, una camiseta y un jean. Tomó su bolso y lo colocó sobre su hombro para darme una mirada de emoción. Era el tercer jueves que íbamos por Alex y me encantaba ver su emoción por tenerlo aquí con nosotros. A pesar de que a veces se despertara por la madrugada y tuviésemos que darle un biberón de leche tibia.

—¿Qué haces? —me preguntó, observando que movía el bolígrafo sobre mi cuaderno.

—Escribiendo el principio —le respondí y la vi hacer una mueca de confusión mientras ladeaba la cabeza.

—¿El principio? Creí que ya tenías mucho escrito en ese cuaderno —inquirió y me levanté del sofá para acercarme y rodear su cintura con mis brazos.

—Dejé una hoja en blanco al principio antes de comenzar a escribirlo. Nunca supe si lo dedicaría a alguien, así que eso hago —respondí y me sonrió antes de probar sus labios.

—Me alegra que puedas terminarlo al fin. Pero si no nos vamos ahora, Irina comenzará a llamar para preguntar si nos sucedió algo en el camino —bromeó y me reí, sabiendo que en realidad era cierto.

—Eso te pasa por llegar siempre quince minutos antes de lo acordado —respondí y esta vez, me besó ella a mi.

—Oh, casi olvido mi celular —recordó y corrió hacia nuestro cuarto.

Me volví a sentar para escribir un poco más, porque sabía que estaría mínimo dos minutos buscándolo.

Así que, quién seas, querido lector. Si estás leyendo esto, probablemente no entiendas absolutamente nada. Es apenas la primera página y ya estoy hablándote de Alison, de Irina, de Bastian y de Alex. No te preocupes, en las próximas hojas podrás comenzar a descubrir quién es cada uno de ellos. Y todo el resto de las personas en mi vida que faltan mencionarte.

—Listo —dijo ella y me volteé para dejar el bolígrafo allí—, ¿vamos? —preguntó sonriendo y la seguí para salir del loft.

—Vamos —respondí besando sus labios.

Te prometo que luego de leer todo este cuaderno, estas personas tendrán sentido para ti. Entenderás porqué estoy viviendo con Alison y quién es ella para mi. Sabrás quienes son Irina y Bastian. También sabrás quién es Bernarda y quienes son los Clarke, así que no dejes de leer la próxima pagina, que es dónde todo comenzó hace mucho tiempo atrás.

...

Hola, mi nombre es Nathan Kane. Tengo nueve años y soy de San Francisco, California. Y esta, es mi historia...

Controversia (Trilogía completa)Where stories live. Discover now