Cap.20 "Que comiencen los juegos del hambre".

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Oh Dios, dime que esto no está pasando.

—Si, Ali. Esto esta sucediendo. —Al parecer la oración había salido de mi boca sin quererlo.

Bastian estaba apoyado sobre la pared de ladrillo, mirando fijamente donde yo. Se veía tan despreocupado por lo que tenía en frente, pero yo temblaba del miedo.

—¿Que se supone que hacen aquí? —preguntó el y me encogí de hombros, sin saber que contestar.

El timbre había sonado hacía cinco o diez minutos, por lo que aún había muchos alumnos en la entrada. Algunos tenían clases extra curriculares luego de la salida y otros, simplemente se quedaban allí charlando hasta que llegara el autobús que los llevaría por todo el pueblo o hasta que los padres los buscarán en sus autos. Claro que la única razón por la que yo seguía allí, era porque no podía entender que estaba pasando.

Noel y Nathan estaban parados junto a la motocicleta. Danali estaba sentada sobre la moto de Nathan disfrutando sentirse especial por ello. Mis puños se apretaron con fuerza cuando la vieron. Ella me vio y solo guiñó un ojo. Irina estaba hablando con alguien por celular mientras Tessa buscaba algo con la mirada. Pero aun no sabia que hacían Augusto y Ulises allí. Ellos no venían a esta escuela. Los chicos estudiaban en casa con Bernarda, sus padres habían estado de acuerdo en eso.

—No lo sé —admití, tan confundida como el. Los ojos de Tessa se encontraron con los míos y dejó de fruncir el ceño para sonreír.

"La encontré." lei de sus labios. Irina quitó el celular de su oreja y me miró como una madre regañando a su hijo. Ambas caminaron hacia mi y noté como Bastian se peinaba el cabello, como si una celebridad viniera hacia nosotros.

—¿Pero que haces? —Me reí de él.

—Sh, no quiero verme mal. —¿Que diablos hacía?

—Allí estabas. Te dejé como tres llamadas perdidas —me reclamó mi hermana, guardando su celular en el bolsillo trasero de sus jeans.

—Lo siento, me quedé sin batería en la última clase. —Me quité el cabello de la cara y recordé como había estado leyendo a escondidas en una de mis clases.

—Hola Irina. —Sonrió Bastian con toda la confianza del mundo y no pude evitar fruncir el ceño. El no solía tener esa postura. ¿Acaso...

—Hola Bastian.— Le sonrió ella moviendo su cabello hacia atras. No se veía nerviosa, pero hacia los mismos gestos que yo.

Oh, mierda. Pero que obvio que era esto.

—Tenemos que irnos —Tessa habló y mi hermana me tomó del brazo.

—Adios Ali. —Se rió Bastian, negando con la cabeza.

—¿A donde vamos? —pregunté algo nerviosa, viendo cómo toda la escuela nos observaba. Y aún más, porque me arrastraba hacia los Clarke.

—Vamos a un día de entrenamiento divertido. —Ella sonrió y continuó empujándome, ahora con más fuerza, ya que yo había decidido clavar mis pies al suelo al no saber a donde me querían llevar.

—¿Si sabes que la palabra "entrenamiento" y "divertido" nunca suelen usarse en la misma oración? —pregunté girándome a ella.

—Dios, que terca eres. —Movió sus manos, abanicándose aire como si arrastrarme cinco pasos la hubiese agotado.

—No es divertido que Cato me golpee cuando me descuido, o que Nathan me humille con sus tácticas ninjas. —Me crucé de brazos y la vi sonreír.

Controversia (Trilogía completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora