Cap.15 "Aquí las preguntas las hacemos nosotros".

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—¡Chicos! ¡Bajen ahora! —gritó Bernarda desde la sala. O tal vez la cocina. No podía descifrarlo desde el baño.

Escupí la pasta dental, me limpié con una toalla y abrí la puerta del baño para encontrarme a Irina y Noel parados allí. Ella bostezaba como un oso mientras Noel se rascaba la cabeza, despeinando aún más su cabello. Al igual que yo, estaban en pijamas como si se hubiesen despertado hacía solo cinco minutos. Me reí de sus aspectos, aunque seguro yo no me veía mejor.

—Buena suerte —les dije, porque sabía lo que harían cuando yo saliera.

Tal como mi mente imaginó, cuando salí del baño, ambos quisieron entrar al mismo tiempo, empujándose y forcejeando. Me reí al entrar en mi habitación y cerrar la puerta. Dos minutos después ya vestido y peinado para la escuela, salí para irme. Tomé mi mochila y bajé las primeras escaleras, cruzándome con Noel que también venía con su mochila al hombro.

Llegamos al primer piso y casi me choqué con Irina que salía de su cuarto, arreglándose la blusa ya puesta.

—Tienes una mancha aquí —dijo Ulises saliendo de su cuarto, señalando el cuello de Irina. Ella se miró y él pasó su dedo por su cara, riéndose—. Ups, caíste.

Ella afiló sus ojos en él y lo movió hasta el final del pasillo, dónde cayó sentado sobre su propio trasero. Noel y yo nos reímos, porque sabíamos a la perfección las consecuencias de meterse con Irina.

—Ups, caíste. Literalmente —respondió ella, afirmando su mochila a su hombro y caminando hacia las escaleras.

Cato salió del baño ya vestido y tomó la mochila que dejó en el pasillo para bajar las escaleras detrás de nosotros. Augusto llegó corriendo y casi se tropezó conmigo que venía última. Renata salió de la cocina y supuse que estaba allí hacía pocos segundos.

—¡Vamos, vamos! —llamó Bernarda otra vez, porque habíamos tardado más de lo que debíamos, pero todos sabíamos que aún era temprano para irnos a la escuela. No entendía por qué tanta prisa.

Pero lo entendí cuando todos entramos a la sala. Solíamos dejar las mochilas allí, luego ir a la cocina para desayunar y recogerlas antes de irnos. Sin embargo, esta vez nos detuvimos apenas entramos en la sala, porque había una niña parada cerca de las ventanas.

Poca estatura, quizá tres o cuatro años, no creía que más que eso. Sus cabello negro y su fleco recto perfectamente cortado. Sus ojos celestes hacían contraste con su piel blanca a la perfección. Esbozó una sonrisa sin dientes apenas nos vio, demostrando que no nos tenía miedo. Por el contrario, parecía estar en confianza. A pesar de qué no la conocíamos de nada.

Los siete nos miramos entre nosotros sin saber quién era o qué hacía en la casa, pero vamos, era la casa de Bernarda Clarke. ¿Qué podía hacer una niña aquí dentro? Pues huir, como todos nosotros.

—Amm, ¿quién es ella? —preguntó Augusto, señalándola descaradamente.

—Ella es Jade y es su nueva hermana.

—¿No se pronuncia Jade? —preguntó Renata en un inglés perfecto, mirando a su abuela y luego a la niña.

—Pues en inglés, si. Así es. Pero Jade tiene descendientes españoles, así que decidieron ponerle Jade por la piedra preciosa. Espero que la poca edad de la pequeña no sea un inconveniente para nadie. Eso va para ti, Noel —explicó Bernarda.

Noel abrió los ojos, como si no entendiese de qué era culpable mientras Cato y yo nos reíamos.

—¿Y yo qué hice? —preguntó él, levantando los brazos en defensa.

Controversia (Trilogía completa)Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang