Cap.46 "Tú, maldito ser mágico".

3.6K 740 118
                                    

—Hay muchas cosas que explicarte —apenas pude oír la voz de Nathan pero entendí perfectamente lo que había dicho.

—Bueno, empiecen de una vez —ya me estaba impacientando y la intriga se extendía en mi estomago, transformándose en nerviosismo, provocando un sabor amargo en mi boca.

Renzo subió la cabeza a Irina y Nathan también la miró. Dirigí mis ojos a ella y carraspeó la garganta, moviéndose incomoda en su lugar.

—No todo es cierto a cerca de la historia de mis padres —parpadeé, sin entender como eso tenía que ver de alguna manera con mi hermano aquí—. Cuando nací, mi madre falleció luego del parto. Mi padre acumuló odio hacia mi por eso, no podía soportar la idea de que su hija había matado a su madre, porque así era como el lo veía. No quería tener que ver nada conmigo, el me hacia responsable de su muerte. Me odiaba tanto —negó con la cabeza con un poco de dolor—, me dejó con su hermano, me separó de mis dos hermanos, y de ahí en adelante, todo lo que te conté es real.

Yo... no. Soy hija única.

Sus palabras de aquella vez resonaron en mi cabeza. Ella si tenía hermanos, solo que no los conocía o no los veía hacia demasiado tiempo.

—Lo siento mucho —dije como reflejo, aunque no sabia porque me estaba contando esto ahora. Se movió incómoda otra vez y o tuve la posibilidad de hablar cuando ella continuó.

—Nunca supe más nada de mis hermanos. Mi tío se mantenía en contacto con la persona que cuidaba de ellos, pero no dejaban que nos viéramos. Busque a mi familia por años, Ali. Mi padre no quería verme, pero no me podía separar de mis hermanos. Luego de que Bernarda me encontró y me acogió, Cato me ayudó a empezar a buscarlos cuando fuimos un poco mas grandes. Fuimos hasta California y nos infiltramos en el lugar donde nací, robamos los expedientes y fuimos buscando mas pistas —miró a mi hermano y lo vi asentir con un muy leve movimiento de cabeza— entonces Cato dio con una de mis tías allí en California. Ella habló con el, porque no quiso recibirme a mi, ella me conocía, incluso estuvo en mi nacimiento. Mi tía dijo que no podía decirme nada de mis hermanos, ni si estaban bien, si estaban vivos, si tenían magia. También dijo que si seguía insistiendo en verlos haría que se fueran de allí. Y así lo hizo —una sonrisa terriblemente triste se formó en su rostro, terminando su historia allí.

Pero yo aun no entendía ni mierda lo que había querido decir. Llámenme estúpida, pero era mucha info que eliminar y agregar a la vez.

—Y así fue como tía Marcia sugirió que nos mudáramos —Renzo habló a mi lado. Parpadeé intentando procesar la información y dirigí mis ojos hacia el.

—¿Que? —pregunté en un hilo de voz que ni el pudo escuchar. Mi cabeza no podía procesar todo lo que estaba escuchando.

El tenía sus ojos clavados en mi con mucho dolor y tristeza. Podía jurar que pronto se pondría a llorar.

¿Irina era mi hermana? ¿Nuestra hermana?

—Tía Marcia sugirió que debíamos mudarnos, porque sabía que Irina intentaría buscarnos cuando supo donde vivíamos. Pero ellos fueron más listos, y dejaron una nota en el baño. Decía que si yo tenía una hermana desaparecida, que la buscara aquí en Hills Town. Y cuando la tía sugirió irnos, tuve la idea de sugerirle aquí. Era el plan perfecto, para calmar a la tía y también para buscar a Irina. Ella accedió. Y ese es el porque nos mudamos. Irina no conocía nuestros rostros, ni yo el de ella. Iba a ser muy difícil reencontrarnos —bajó la cabeza y volvió a hablar—. Irina habló con la tía una vez más, no se que hizo para convencerla —le dio una mirada y una sonrisa triste—, pero ella accedió a ayudarla.

Controversia (Trilogía completa)Where stories live. Discover now