Caótico Deseo|| Terminada

Treinta y cuatro.

Luego de vertir el agua caliente en ambas tazas y sentir el delicioso aroma a café, decidió colocarle al suyo dos cucharadas, y media de azúcar al suyo, revolviendo cuidadosamente antes de tomar las tazas en sus manos, dándose la vuelta para dirigirse hacia el sofá donde el chico al cual golpeó accidentalmente estaba esperándola, sonriéndole con entusiasmo, mostrando su gran atractivo que ella notó enseguida.

— Aquí tiene.

— Muchas gracias. -tomó la taza, rozando de manera conciente sus dedos con los de la pelicastaña, viendo como frunció sus labios y alejó sus manos rápidamente, sentándose a su lado, a una distancia correcta- Eh venido dos veces por semana a la empresa y nunca me he cruzado con usted.

— Estoy aquí hace casi dos meses. -aclaró, bebiendo de su taza, sin notar la sorpresa en el azabache- ¿Y usted por qué viene seguido? ¿Trabaja aquí?

— De hecho; mi amigo es bailarín de ésta empresa, para ser más específico: bailarín de atrás. -sonrió, acomodando un mechón de su cabello hacia atras, llamando la atención a la pelicastaña por el corte tan genial- ¿Usted es bailarina, parte del Staff o... Idol?

— Soy escritora y compositora. -sonrió con emoción, reposando su taza sobre su muslo izquierdo, notando después la sorpresa en los ojos ajenos- Oh, es un nuevo trabajo que la empresa decidió obtener y fui una afortunada al estar aquí.

— Eso es genial; me alegro por ti y espero que tengas mucho éxito.

— Gracias. -sonrió, quedándose callada por unos largos segundos en los que él se dedicó a observar su rostro, perdiéndose en sus ojos expresivos y grandes, poniéndola nerviosa por ser analizada de aquella manera- ¿Cuál es su nombre?

— Hwang Hyunjin. ¿Y usted?

— Solo dime "Lucy".

— De acuerdo. -volvió a sonreír, haciéndole saber a la castaña que era un tipo agradable, por lo que ella también le sonrió amistosamente, dándose una que otra mirada al tomar de sus cafés en silencio hasta que él decidió soltar la pregunta que rondó en su cabeza desde que llegaron a aquella sala de descanso- ¿Es su novio?

— ¿Eh? -volteó rápidamente hacia atrás al creer que YoonGi estaría allí viéndola, pero no había nadie que pasara por el pasillo y se viera por las ventanas-

— Él tipo de hace rato. ¿Es su novio? No se veía contento con que me hablaras.

— Es mi mánager; mi novio no trabaja aquí. -oír aquella respuesta no le hizo feliz del todo; saber que la chica más linda que había visto ya tenía a alguien fue un tanto decepcionante. Sin embargo, quería conocerla a fondo y saber cosas sobre ella, porque le parecía una persona agradable, sincera y divertida- Uh, debo irme ahora. -dejó la taza sobre la mesa frente al sofá, sonriendo apenada por dejarlo solo, viendo como él también sonrió, pero de manera comprensible, levantándose también de su asiento- Fue un gusto conocerlo, a pesar de en esta situación embarazosa; puede devolverme el suéter cuando regrese otro día.

— También me gustó conocerte. -dejó de hablar formalmente, haciendo sonreír a la menor cuando lo notó- Espero volver a verte.

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El de cabellos rubios observó una vez más aquél papel en su mano, en donde marcaba la dirección de la casa en la que había estado junto a Jimin la última vez, decidiendo entrar y pedir que le dejaran pasar hacia el departamento que según tenía entendido: era de ambos. Pero el bloqueo en la puerta solo pudo hacerlo bufar molesto, hasta que presenció como una mujer anciana introducía una tarjeta para pasar, por lo que se apresuró y sostuvo la puerta, sonriéndole educado una vez que la señora pasó, recibiendo una sonrisa también y una caricia en su mejilla que le hizo suspirar una vez que se fue.