Caótico Deseo|| Terminada

Sesenta y ocho.

Jungkook caminó hacia la entrada de su casa cuando escuchó los insistentes golpes, sintiéndose molesto por la agresividad hacia su hogar, pero relajando la expresión al ver a sus amigos aunque uno de ellos lo veía con tanta seriedad que se sintió confundido y luego la menor que sonreía tan calmada como si el chico a su lado no estuviera echando chispas por doquier. Se hizo a un lado después de darle un beso en la mejilla a la única mujer que venía con los tres más altos, ofreciéndose a ayudarle con las maletas, recibiendo una queja por parte de Taehyung que se encargó de llevar la caja de su chica hacia dentro de la casa con la misma expresión desde que se enteró de todo.

— ¿Y ahora qué le pasa? -le preguntó a Jimin cuando este lo saludó con un abrazo mientras veían a los otros dos que mantenían una charla de susurros-

— Está celoso. ¿Qué más? -expresó como si fuera algo obvio, recibiendo un asentimiento de cabeza por parte del más alto, cerrando la puerta cuando YoonGi llegó luego de haber estacionado el vehículo de su chico- Está molesto porque dejaste que Lucy se quedara contigo.

— Lo supuse; seguramente ella está disfrutando los berrinches de Taehyung. -sonrió con diversión, viendo como la menor estaba fascinada por el silencio de su novio y la mirada sin nuestra de afecto que le ofrecía- Aunque él esté molesto por esto; la idea de que Lucy se quede conmigo es mejor a que viva en su departamento. Las cosas se pondrán cada vez peor ahora que muchos saben de su relación y el vivir juntos en tan poco tiempo sería un problema también.

— Supongo que tienes razón. -susurró el más bajo, viendo después la sonrisa egocéntrica de su amigo-

— Siempre la tengo.

Se dirigió hacia la reciente pareja que discutía sobre la estadía, dejando solo a Jimin con el pelirubio en la entrada, sintiendo el abrazo por detrás que le hizo sonreír tímidamente y sostener esos brazos que rodeaban su cintura, recibiendo un beso en su mejilla que logró derretir una vez más a su débil corazoncito. YoonGi se había puesto más cariñoso de lo normal y aunque era algo nuevo después de tanto tiempo lo adoraba, apreciaba demasiado esos gestos tan cautivadores que el mayor le obsequiaba, pero en ese momento se sentía muy nervioso de que sus amigos los observaran o que Lucy lo hiciera y llegara a sentirse incómoda debido a lo que pasó hace poco, sin embargo la menor les dió una sonrisa tan sincera cuando los pilló que eso le hizo sentirse mucho mejor y más libre de poder demostrarle a todos lo felíz que se sentía ahora. A veces creía que vivía un sueño por ser felíz de nuevo, pero con el tiempo descubrió que la vida le estaba dando de nuevo esa felicidad que le fue arrebatada hace años y le otorgó una nueva amistad sincera con una mujer que no juzgaba, no odiaba y comprendía. Ahora su objetivo más grande era poder realizar eso que YoonGi le había prometido una vez antes de irse, pero debía esperar a que el momento indicado llegue; quería ir lento y seguro para volver a conocerlo como si fuera la primera vez..

— Supongo que se quedarán a almorzar, ¿verdad? Hobi vendrá después de su ensayo.

— Ya era hora; tengo hambre. -confesó el pelicastaño mientras yacía sentado en uno de los cómodos sofás de su amigo, distrayéndose cuando vió a la menor bajar de las escaleras con su maceta en manos, siguiéndola con la mirada mientras se distraía un poco al verla de jeans ajustados-

— También nos quedaremos; te ayudaré con la comida, Kook. -avisó el rubio, levantándose de su lugar a un  lado de su novio para acercarse hacia el de cabellos cortos que sacaba carne de cerdo de su nevera junto a una gran sonrisa al querer comer ya mismo-

— ¡Mis chef's favoritos! -expresó Jimin mientras sonreía dulcemente hacia su hombre, recibiendo un beso de su parte-

— JungKookie, puedo hacer unas pizzas pequeñas. -ofreció la menor, dejando la maceta con su cactus sobre la isla de la cocina, acercándose al de buena musculatura que le sonrió con ternura mientras que YoonGi se sentía emocionado  al escuchar la propuesta de la menor; amaba sus pizzas pequeñas, pero las sonrisas de los cuatro hombres en la casa se borraron cuando escucharon lo siguiente..- Quiero hacer algo rico para Hobi; debe estar agotado y con hambre.