Caótico Deseo|| Terminada

Cincuenta y seis.

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YoonGi observó a Jimin pagar por las cosas y queriendo irse lo más rápido de allí, sintiéndose algo molesto de verlo así, como si estuviera asustado de aquel tipo que llegó hacia ellos. Cuando salieron del mercado, no pudo evitar pensar que sería tonto si se fueran de aquel lugar sin saber el por qué su amado le tenía miedo a aquella persona, así que se detuvo antes de que llegaran al coche de su madre, notando la preocupación del azabache cuando lo hizo y el como lo quiso jalar de él para irse.

— ¿Quién es ese tipo?

— YoonGi..

— Dime quién es, porque no me iré de aquí si no me lo dices. -fue directo, notando la mirada asustada de su chico y el como miraba hacia atrás de vez en cuando- No me gusta verte así de asustado.

— Te lo contaré todo, pero vámonos, por favor.

Su voz tembló, logrando que su amado se molestara más y decidiera el ir hacia el mercado otra vez, ignorándolo cuando le dijo que se detuviera. Decidió seguirlo, por más que sus nervios aumentaran por volver a ver al hombre que casi logró matarlo cuando se enteró de lo que tenían; no podía confiar de nuevo en el padre de YoonGi y estaba tan asustado de que el de cabellos rubios se sintiera mal si es que llegaba a recordarlo. Las puertas se abrieron automáticamente y YoonGi se detuvo a unos metros al ver a ese tipo salir con el otro, tomados de las manos como una pareja felíz y eso lo desconcertó un poco, pero no evitó que se acercara a ellos junto a Jimin que casi lo detuvo. Aquel hombre de cabellos negros y tez blanca lo observó de nuevo, mostrándose vulnerable, confundiéndolo aún más cuando a penas le sonrió.

— Cariño, hay que irnos. -le susurró aquel hombre de gafas al pelinegro que veía a su hijo como si fuera un ángel, queriendo jalar de él, pero siendo imposible- Yeongsu..

— YoonGi.. -el menor llegó a su lado, tomándolo de la mano también y del antebrazo, queriendo llevárselo, observando hacia el padre de éste, sintiéndose aún asustado por lo que llegara a pasar- Por favor, amor; vámonos.

— Quiero hablar con usted. -pronunció el rubio, ignorando a su novio y haciéndole sonreír al hombre mayor al escuchar su voz luego de tanto tiempo-

— Mi esposo no está bien en este momento; le pido que nos deje en paz. -expresó molesto aquel tipo, queriendo alejar a YoonGi de ellos, deteniéndose cuando su pareja alejó su mano de él, para acercarse hacia el de cabellos rubios, logrando que Jimin apretara sus labios y tuviera la intención de alejarlos, pero que aún así no lo hizo-

— Creí que... habías muerto. -susurró, notando la mirada asustada que Jimin aún tenía hacia él, recordando ese momento repentinamente, sintiéndose mal de verlo a la cara después de eso, de verlos a ambos después de todo- Jimin.. -el menor apretó inconscientemente el brazo de su amado- ¿Él es en verdad..?

Jimin quería negarlo, porque creía que era injusto darle la oportunidad a aquel tipo que les deseó lo peor a ambos, pero por otro lado, sentía que también necesitaba saber que su hijo estuvo con vida todo ese tiempo. Lo veía tan cambiado desde la última impresión que se llevó de él e incluso, estaba saliendo con un hombre y eso fue lo más desconcertante; realmente no podía creerlo, pero ahí estaba el tipo homofóbico que quiso matarlo cuando supo de su relación.