Treinta y seis.

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El de cabellos castaño oscuro observaba el papel de un nuevo contrato que le fue entregado en sus manos por la mujer de cabello largo que sonreía maravillada por verlo emocionado y, ¿cómo iba a no estarlo? Si un contrato nuevo y de lo que realmente quería trabajar estaba por ser firmado por él mismo.

— Conseguí un papel secundario para una nueva serie. ¿Qué opinas?

— Qué es genial. ¡Muchas gracias! -hasta quería abrazarla por haber cumplido con su promesa, aunque faltaba medio mes, pero estaba agradecido de que no fuera mucho tiempo-

— Habrá una sesión de fotos dentro de tres días; no ingieres alimentos que te engorden al día siguiente y usa una mascarilla antes de dormir.

— De acuerdo. ¿De qué será la sesión? -preguntó con entusiasmo, firmando el contrato y entregándoselo al ver que nada malo había en ello- ¿Debería cortar mi cabello?

— Como ya sabes, ya es verano y la sesión tendrá esa temática. -contestó mientras caminaba hacia un armario en donde guardó el contrato con él, alzando la mirada hacia arriba en donde el contrato con Lucy estaba y sonrió de lado, volviendo a ver al menor como si todo estuviera bien- Y sobre el cabello.. Mm, así está bien, pero sería mejor si fuera azabache.

— Me gustaría volver a ese color. -pronunció con alegría, levantándose para irse, no sin antes hacer una pequeña reverencia en agradecimiento- Prometo dar lo mejor de mi. -se acercó a la puerta, tomando el pomo luego abrirla y abandonar la oficina, para correr a contarle a todos, pero se detuvo al escucharla hablar nuevamente-

— Hoy es tu último trabajo como mánager de Lucy. -aquello lo tensó por completo, recordando que así iba a ser cuando volviera tener su carrera como actor y cerro con fuerza sus ojos al saber que ya no volvería a tener tanto acercamiento hacia ella una vez que volviera a retomar su antigua profesión- Seguramente debes tener en cuenta que se mantiene demasiado ocupada con su historia, porque ni siquiera vino cuando la cité con mi asistente.

— Es que está muy entusiasmada. -se volteó a verla, sosteniendo en sus manos la copia del contrato, viendo como la mujer mayor sonrió de lado, pensando vaya a saber qué cosa- Le diré que venga a verla.

— Solo es para decirle que la trasladaremos a ambas a un edificio del otro lado de éste; una editorial de verdad en la que mi padre se hará cargo. -aquello lo tomó demasiado por sorpresa; no podía creer que ahora estarían completamente lejanos el uno del otro y en su expresión deprimente, su jefa pudo notar que realmente le importaba la menor, cosa que no le gustó para nada- Sabes que no puedes tener ningún acercamiento amistoso u amoroso con ella, ¿verdad? Eres un actor importante que volverá a florecer profesionalmente, mientras que ella solo es una simple escritora que fracasará aquí en la República de Corea.

— ¿Por qué está diciendo eso? -frunció el ceño, sintiendo un fuerte nudo en su garganta que a penas y lo dejaba hablar, molesto con la mayor- Ella triunfará; tiene talento y pasión por lo que hace..

— Escribir historias donde dos maricas fingen estar enamorados, no es talento, es normalizar algo asqueroso. ¿Tienes idea de lo afectados que estaríamos si un libro como esos se pública en nuestra empresa? Es por eso que le pedí a mi padre que abriera una editorial muy lejos de aquí y se encargara de ello o colocará a alguien; de todos modos, ya no es problema mío.

— Creí que la idolatraba y hacía cosas buenas por ella.

— Soy jefa de la gran empresa músical que heredé de mi padre. ¿Crees que me importan los sentimientos de ésa mocosa? -bufó al sonreír, cruzando sus brazos y restándole importancia a sus crueles palabras- Lo único que importa aquí, es el dinero.

Caótico Deseo|| TerminadaWhere stories live. Discover now