CAPÍTULO 15: Había bajado la guardia

4.1K 203 22
                                    

"Si el mundo se estuviera acabando, tú vendrías, ¿cierto?" - JP Saxe y Julia Michaels .

Marco

Dejar el documento de la investigación privada sobre mi escritorio y sin haberme avisado con anticipación, había sido una gran metida de pata de parte de mi investigador privado o, mejor dicho, el investigador privado de mi familia. Por supuesto, también de parte mía al pedir que investigaran a una mujer que tenía derecho a la privacidad.

El enojo y la furia por parte de Céline fue entendida, yo habría hecho exactamente lo mismo. ¿Investigar a sus padres, a sus hermanos, incluso a su prometido? No la juzgaba por molestarse por ello, pero me jodía que por aquello no habíamos tenido la oportunidad de volver a disfrutar del delicioso sexo que ambos deseábamos.

Después de que ella se marchara, no tuve un gran lapso de tiempo hasta que tuve la última reunión del día. Era de noche, no tenía mucho tiempo para pensar en ella, en qué podría hacer para tenerla por unas horas más, solo para mí. Sabía que era una mujer prácticamente casada, de la familia enemiga, de carácter fuerte, que chocaba constantemente con el mío, pero cuando estábamos follando, nuestros cuerpos se convertían en uno solo, podíamos compaginarnos de una manera jamás sentida ni imaginada, lo que la hacía jodidamente adictiva.

Intentando quitar sus imágenes de mi cabeza, sus sonidos o sus movimientos, salí de la compañía luego de una jornada algo diferente, y me adentré en mi Dogde Challenger, sí, el mismo que ella tanto admiró cuando lo vio por primera vez.

La helada brisa neoyorkina movía mi cabello de un lado a otro, mientras que los edificios se alzaban justo en frente mío en lo que el auto avanzaba.

—Entonces, ¿me estás diciendo que sí? —inquirió Emma, mi hermana, a través del otro lado de la línea.

Sonaba emocionada.

—Em, no creo que tenga la noche libre justo ese día...

—No te preocupes por eso. Llamé a Luisa, tu secretaria, le pedí que despejará tu agenda para esa noche, así que no puedes usar esa excusa ahora.

Maldita sea, Luisa, eso podría considerarse traición.

—¡Vamos, no te he visto en casi un año! Marco, es un evento importante para mí, y quisiera que estés allí conmigo. Me gradué como psicóloga criminal de una de las universidades más retadoras en esta especialidad, nuestros padres lo celebrarán en una cena como lo hicieron contigo cuando te graduaste de arquitecto de Hannover, y yo estuve contigo, orgullosa de mi hermano mayor —me regañó, moldeándome a su modo —. Solo digo, quisiera que tú también estuvieras conmigo allí, celebrando mi triunfo.

Suspiré, mientras continuaba manejando entre las iluminadas calles de Manhattan.

—Emma, te amo, pero detesto cuando intentas manipularme.

—¡No es manipulación, es la verdad! Y también te amo...

—De acuerdo, de acuerdo, no hay necesidad de alterarse, pero una cosa, invitaste a James, ¿no es así?

Ella permaneció en silencio durante unos segundos, que me dieron la respuesta.

—Bueno, es un gran amigo de la familia, por supuesto que lo invité.

—Bien, "un amigo de la familia", entonces lo ubicaste a mi lado para la cena, ¿no es así?

—¡Déjame en paz!

Sonreí ante el infantil grito.

—Yo solo te llamaba para decirte eso. Oí sobre el acuerdo que cerraste con Harrison Morgan, del que no nos conversaste absolutamente nada al respecto, por cierto. De vez en cuando, deberías recordar que sí tienes familia y que somos nosotros.

Dulcemente Mortal y Letalmente Efímero [BORRADOR]Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon