Para: los bebés del futuro De: Sophia Pierce

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Para: Los bebés del futuro
De: Sophia Pierce

Son las tres de la mañana y no puedo dormirme. He pensado mucho como si una parte de mí supiera que si me duermo, no volveré a verla dormir. No volveré a tener cerca a su madre cuando me despierte de un mal sueño, o cuando tenga una noche de insomnio. No puedo explicarles la razón, pero no la culpen. En realidad su madre es increíble. Es un ser humano maravilloso y les dará una gran vida. La mejor de todas.

Cuando lean mis palabras estarán grandes, y tendrán la madurez para entender lo que les tengo que decir, así que léanme con su corazón y permítanme abrazarlos a través de estas letras:

En ocasiones las experiencias nos hacen replantearnos mucho, y faltan las ganas de vivir. Por mucho tiempo me faltaron, pero tuve a personas ayudándome. Su madre fue una de ellas. Ella estuvo a mi lado cuando mis sombras me perseguían hasta cubrir toda mi luz. Y aún, cuando estaba en blanco y negro, ella buscó pinceles y me motivó a pintar. Me fabricó lienzos, uno tras otros, y me dijo: borra las veces que sean necesarias hasta que un día logres pintar sobre tu luz.

Y yo, que solo hacía universos y estrellas, les hice un cuadro sobre la luz, sobre el sol, sobre el paraíso, un cuadro que habla de lo que no vemos. De la paz eterna de nuestro creador. Sí, eso es lo primero que quiero enseñarles. Amen a Dios. ÉL está en todos lados. Es ÉL quien más nos ama. ÉL tiene las respuestas a las preguntas más difíciles. Dios está allí, solo tenemos que observar en lo invisible. ÉL sería incapaz de hacer algo para lastimarnos. Es más fácil culpar a Dios, y no nos odia ni cuando nosotros lo odiamos, allí solo nos ama más. Búsquenlo, y nunca lo desprecien. Dios es la base de todos. Él, cuando sientes que te quiebras, te demostrará que puedes volverte a armar. Él, en tu último aliento antes de rendirte, te tenderá la mano y te dirá: "Después de la noche más oscura, saldrá el más radiante sol".

No den por sentada la vida, ni la existencia. Están respirando en un viaje corto, no se dejen engañar. Parece eterno, pero es breve. Así que amen, vivan, disfruten los pequeños detalles, y no vivan comparándose. Disfruten de lo que son, sin envidiar lo que otros tienen. Todo lo que pasen en su vida es una gran lección, es un gran aprendizaje y no quiero que se críen tratando de ser mejores que otros, me gustaría que buscaran brillar en su interior.

Hace pocas horas logré convertirme en campeona mundial en tenis, pero es un simple juego. Yo quiero que ustedes sean campeones de corazón. ¿Saben lo que eso significa? Poder tener empatía con otros. Querer ayudar a las personas desconocidas y no albergar odio en su corazón. Un verdadero campeón es el que sigue aún con su alma cansada. Es el que prefiere llorar en vez de convertir sus lágrimas en odio. Un campeón es ese que aprende a perdonar incluso a los que más le han fallado.

Un campeón es quien sigue el ejemplo de Dios, y no cree en las falacias de los incrédulos. Pero yo no seré su religión, no les impondré en qué creer. Solo les digo, que aunque muchas personas me apoyaron... logré levantarme cuando busqué a Dios.

Todo esto quisiera decírselos en la medida en que crecen, pero su madre va a irse, y desde hace un tiempo escribo como mecanismo para existir.

Sé que su madre quizás les diga que deben ser imparables, vencer, ganar y ser los mejores. No lo hace por mal, sino porque los quiere. Véanla bien cuando estén molestos, observen debajo de lo que ella quiere mostrar. Miren sus ojitos azules y se darán cuenta de que ella, aunque parece impenetrable, es una campeona por encima de sus medallas y trofeos. Ella es una campeona de corazón, que, como todos, todavía debe seguir evolucionando y sé que ustedes la ayudarán en eso. Pero nunca duden de su amor.

Recuerden ser detallistas con las personas que aman. Sorprendan a su madre con detalles y demuestren el amor, sin miedo a parecer intensos. Ella nunca les pedirá nada, pero allí es cuando más deben dárselo. Les contaré una anécdota: Cuando la conocí ella quiso pagarme por un cuadro de retrato. Esa noche pinté en la azotea de un edificio viéndola en una faceta algo íntima, pero cuando observaba detrás de lo que había o que quería demostrarme, me encontré con algo más. Era como si mi alma reconociera a la suya de una forma distinta. Esa noche me di cuenta de que un cuadro no alcanzaría para mostrar lo que Ksenya significaba.


Desde ese momento hasta ahora decidí seguir pintándola. Suspendí la apertura de mi galería porque se me ocurrió una idea. El día de su cumpleaños voy a sorprenderla. Justo ese día voy a presentar mi colección "Esperanza" y mi colección "Detrás de tus murallas", esta última está compuesta por 22 pinturas sobre su madre. Lo que me gusta más es que no se lo espera. Se molestó conmigo cuando le pedí que me dejara sola pintando, y se molestó más cuando le dije que no podía ver mis cuadros. No importa eso, porque cuando vea la colección, cuando en la pantalla de la galería salga mi video explicando lo que significa, ella va a estar feliz. Y eso es lo que me gustaría que hicieran siempre. Me gustaría que la sorprendan y que le demuestren su amor cuando no se lo espere. Se merece que le recuerden que es más bella por dentro de lo que es por fuera.

Hoy me siento vulnerable, pero sobre todo feliz. Me hace feliz que ustedes puedan ser parte de este mundo, porque estarán con ella. Estoy segura de que será la mejor madre. Los cuidará así como me cuidó a mí. Va a protegerlos y ustedes la cuidarán a ella.

Pequeña, ahora te escribo a ti, quiero que sepas que vas a ser mi princesa toda la vida. Que tus sueños importan. Que nadie te haga dudar de tu potencial ni desconfiar de tus lágrimas, porque la tristeza también enseña. Quiero recordarte que hay un cielo enorme esperándote, para que vueles y transites, para que ames y sanes. La vida se trata de un viaje de sanación y de propósito. No tengas miedo de buscar, pero disfruta cada paso.

Gracias por escoger a Key para que fuera tu madre, y gracias por permitirme escribirte esta carta para expresarte mi más profundo amor.

Estoy aquí contigo, estaré contigo para siempre.

Príncipe, recuerda que las mujeres nacieron para ser amadas y respetadas. Cuida a tu madre y a tu hermana, y no les creas a esos mentirosos que te dicen que los hombres no deben llorar. Ser sensible no es algo malo. Confía en tu corazón y déjalo que drene. Sé bueno y nunca dejes de mejorar, de aprender de tus errores y de tus caídas para volver a intentarlo. Estás aquí para ser feliz y para hacer feliz a los que te rodean. Rompe los patrones y conviértete en tu mejor versión. Es válido caer, es válido no tener ganas, es válido estar cansado, pero recuerda: la vida no es sobre quien llega primero, sino sobre disfrutar el recorrido y aprender del viaje.

Me pasaron tantas cosas en tan poco tiempo, y ahora lo sé. Mi viaje ha sido precioso, incluso con los malos momentos. Desde niña tuve a una madre ejemplar, y luego... conocí el amor. Pero lo más importante está pasando ahora que llegaron ustedes. Que están en el vientre de Ksenya, y hacen que mi pecho explote de felicidad. Sé que todavía no los conozco, pero ya los amo. Los amo con un amor nunca antes explorado. Es un amor diferente. Es un amor especial.
Les prometo que voy a protegerlos. Estaré allí cuando quieran hacerles daño, o cuando les rompan el corazón. Me convertiré en su escudo. Voy a cuidarlos como mi madre por tanto tiempo me cuidó a mí.


Ustedes son mi fortaleza y voy a amarlos en todas mis vidas.

P.D.: Pídanle deseos a las estrellas, bailen bajo la lluvia, y amen... todo va de prisa, no sean víctimas del tiempo, enamórenlo y disfruten del presente antes de que sea solo un recuerdo. No se dejen llevar por las apariencias. El físico es prestado. Lo que de verdad importa es lo que llevan dentro. Pueden arreglarse por horas frente a su espejo, pero no descuiden su belleza interior, es la única que es imperecedera. La que no marchita, la que se quedará con ustedes cuando el cuerpo se vaya.

Recuerden: todo se desvanece menos lo que siembran en los demás.

Siempre amándolos,

Sophia Pierce.








El capricho de amarteWhere stories live. Discover now