Harry Potter y las Historias Mágicas

Solo Podría Pasarle a Harry 3

*Lumus*

Harry Potter y las Historias Mágicas

-Solo Podría Pasarle a Harry 3-

"¿Quieres venir Harry?¡ Se va a estar muy bien!" dijo una exasperada Hermione, tirando de la túnica de Harry.

"Creo que voy a estar enfermo", murmuró, tratando de retrasar lo inevitable el mayor tiempo posible.

Era hora de que se encontrara a las chicas que había convocado a Hogwarts para ayudarlo a salvar su vida. Solo que ahora no estaba tan interesado en enfrentarlos. La alegría de la cita de anoche con Parvati y Hermione había sido reemplazada por la aprensión. Su estómago estaba hecho un nudo mientras le preocupaba si los demás consentirían tener sexo con él.

La reunión tendría lugar en el ala del hospital, como presidiría Madame Pomfrey. Harry y Hermione iban lentamente hacia allí, aunque el ritmo de Harry comenzaba a enfurecerla.

"Honestamente, Harry, ¿estás seguro de que mataste a Voldemort? ¿Dónde está tu coraje de Gryffindor?"

Él la fulminó con la mirada. "Esto no es lo mismo. No recuerdo que estuvieras tan entusiasmada cuando Parvati quería que nos desnudáramos".

"Lo siento", suspiró, "fuiste muy comprensivo. Es solo que hemos estado en este corredor durante casi cinco minutos".

"Bien. Vamos," gruñó Harry, y aceleró el paso.

Hermione lo siguió apresuradamente, resistiendo el impulso de regañarlo aún más. Ella sabía que los otros probablemente se inclinarían a darlo todo por él, pero él estaba caminando como un hombre condenado a la horca.

***

Cuando finalmente llegaron al ala del hospital, Hermione casi tuvo que empujar a Harry a través de las puertas abiertas. En el interior se reunieron Madame Pomfrey, Tonks, Fleur, Luna, Parvati, una vieja curandera india y, para horror de Harry, la profesora McGonagall.

"Me alegra que finalmente pueda unirse a nosotros, señor Potter", dijo Pomfrey con sequedad, mientras siete caras se volvían para mirarlo.

"Lo siento", murmuró Harry, y se dirigió hacia una de las camas abiertas.

Luna saltó de su percha y le dio un fuerte abrazo de oso, un hábito que había adquirido de Hermione, mientras Tonks y Fleur se acercaban a él a un ritmo más razonable.

"Saludoz, Harry", Tonks sonrió, y Fleur dio un paso adelante para darle un beso rápido en cada mejilla.

"Eh, hola Fleur, Tonks, Luna. Gracias por venir".

"¿No recibo un saludo?" Parvati se burló.

Harry logró resistirse a resoplar. "Hola Parvati. Creo que te saludé ayer, creo. ¿Ya les has dicho a todos lo que está pasando?"

"¡Oye! ¡Te dije que yo también puedo guardar secretos!"

"Lo siento", sonrió débilmente.

McGonagall se aclaró la garganta para llamar la atención de todos. "El Director ha sido llamado por motivos de trabajo para el Ministerio, pero me ha pedido que lo mantenga actualizado. Lo reemplazaré hoy. Señorita Granger, si amablemente cierra las puertas, podemos comenzar. ¿Poppy?"

Hermione cerró las puertas en silencio y luego regresó al lado de Harry. Pomfrey miró a las brujas reunidas.

"Antes de comenzar, gracias a todos por venir. Les aseguro que este es un asunto de gran importancia. Con nosotros hoy está Healer Chatterjee, quien ha consultado en St. Mungo's por más de cincuenta años. Explicaré por qué ella está aquí en breve ".