Harry Potter y las Historias Mágicas

Solo Podría Pasarle a Harry 7

*Lumus*

Harry Potter y las Historias Mágicas

-Sólo podría pasarle a Harry 7-

"Buenas tardes, dormilón".

Harry murmuró algo ininteligible ante la voz que lo estaba molestando y abrió un ojo. Su dormitorio parecía estar inundado de luz solar y podía distinguir la silueta de Hermione mientras se paraba sobre su cama.

"Uf", gimió, y se frotó un ojo con cansancio. "¿Que hora es?"

"Justo después del mediodía. Has dormido 15 horas. ¿Quieres ir a almorzar o dormir un poco más?"

Consideró la pregunta por un momento y luego bostezó ampliamente. "Comeré. Estoy absolutamente muerto de hambre. Solo dame un minuto para ducharme".

"Tómate tu tiempo", respondió Hermione y se sentó en el borde de su cama.

Harry se sentó en la cama e inmediatamente se agarró la cabeza. "Oh, dulce Merlín. ¿Por qué siento que tengo la peor resaca del mundo?"

Ella lo miró de cerca. Estaba pálido y su cabello sobresalía en todas las direcciones, incluso peor de lo habitual.

"Tampoco te ves tan bien. Madame Pomfrey piensa que tu fatiga es solo un efecto secundario de los rituales. Ella ya me dijo que quiere posponer nuestro ritual por al menos un día".

"Probablemente sea una buena idea", murmuró, bostezando de nuevo. "Podrías ponerme en coma".

Hermione se rió un poco. "Podría hacer eso de todos modos".

Harry levantó una ceja y la miró con cansancio. "Has pasado demasiado tiempo con Parvati".

Ella resopló pero parecía complacida consigo misma. "Es el nuevo y mejorado yo. Ahora ve a darte una ducha. Tengo hambre".

***

Veinte minutos después, un Harry recién duchado y una Hermione hambrienta se sentaron a la mesa de Gryffindor en el Gran Comedor. La sala cavernosa estaba casi vacía, salvo por algunos jóvenes estudiantes en la mesa de Hufflepuff, un par de Ravenclaws y los profesores McGonagall y Dumbledore en la mesa principal.

Dumbledore había estado ausente durante gran parte de la última semana, solo tuvo tiempo de asentir amablemente a Harry en los pasillos del castillo cuando se encontraron. Harry entendió que estaba recibiendo actualizaciones diarias sobre la situación ritual de Madame Pomfrey.

El Director le llamó la atención y saludó con la mano cuando él y Hermione se sentaron, luego regresó a lo que parecía una conversación muy seria con McGonagall.

"Me pregunto de qué se trata", susurró Hermione. "Parece una discusión intensa".

"No sé", respondió Harry, colocando una gran pila de papas fritas en su plato. "¿Dónde está Luna? ¿Se siente bien después de anoche?"

Hermione resopló. "Está bien. Ha estado bailando alrededor del castillo con una sonrisa tonta en su rostro toda la mañana. No estoy segura de si incluso se fue a dormir".

"Mmmm", reconoció, cavando en un montón de carne asada en rodajas vorazmente. "¿Ya viste comer a lunth?"

Ella hizo una mueca y entrecerró los ojos hacia él. "¿Estás diciendo  Luna? No hables con la boca llena, Harry".

"Dlo shinto", sonrió, a propósito repitiendo su grave paso en falso.

Hermione puso los ojos en blanco.