Capítulo 4.

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LUCAS

No pude dormir nada. Durante toda la noche estuve dando vueltas en la cama.
Hoy era mi primer día de trabajo en el nuevo colegio y fantásticamente tendría que llegar tarde.
Hoy también era el dia en que me cambiaría de casa. Y gracias a que ya había empacando todas mis cosas y el camión de la mudanza se las había llevado no tenía que ponerme para ir a trabajar.

-¡mierda! -gruñi una vez que salí de la ducha.
Busque en todas partes algo cómodo para vestir y no encontraba nada. - ¡como fui tan idiota!- pase ambas manos por mi cabello mojado.
Seguí buscando desesperado mientras le echaba un vistazo al reloj de mano que llevaba puesto. Cerré con fuerza los ojos al ver que llegaría mas tarde de lo esperado.
Definitivamente tendria que llamar al colegio.

-¿Alo? Buenos dias- escuché saludar a la secretaria desde el otro lado de la línea.
-hola, buenos dias- dije sentandome en la cama. - me podría comunicar con la directora, por favor .
-de inmediato, ¿me podría decir con quien hablo? .
- ¡oh, claro!- sonreí para mi- soy el nuevo profesor de matemáticas, Lucas Miller.
-¡profesor! De inmediato lo comunico con la directora - podía sentir la sonrisa de la secretaria.
-gracias.
-¿Aló? ¿Profesor Miller ?- llamó la voz aguda de la directora.
-buenos días directora Rojas.
-dígame en que puedo ayudarlo.
-pues verá, por temas personales no podré llegar a tiempo a la primera clase.
-¡¿como así profesor?! - chillo histérica la mujer. apreté los ojos al escuchar su grito.
-es que me ocurrió un percance y eso me impedirá llegar a la hora.
-¿y qué le ocurrió? ¿usted está bien? -cada vez sonaba más alterada.
-si, si estoy bien no se preocupe - trate de calmarla - es solo que hoy me mudo de casa, y pues ocurrió un pequeño problema con lo de mi ropa - decidí confesar.
-ya veo -dijo más calmada -¿y qué tan tarde cree que llegará?.
-supongo que unos veinte minutos más tarde -rasque mi cuello.
-bien, me encargaré de avisar a sus alumnos.
-muchas gracias directora -dije agradecidamente.
-no se preocupe profesor, pero espero que no vuelva a ocurrir - me advirtió.
-¡no claro que no! -respondí rápidamente - y de nuevo muchas gracias.
-de nada, hasta luego profesor Miller.
-hasta luego directora.

Ya podía estar más tranquilo. Le había avisado a la directora Rojas que llegaria tarde. Ahora sólo debía concentrarme en encontrar algo que ponerme. Busque por todos lados y lo único que pillé fue una chaqueta gris, unos pantalones blancos , camisa , corbata, y unos zapatos que en lo personal no me gustaban.

-me veré tan ridiculo - suspire vencido. Me vestí rápidamente. Peine mi cabello. Me perfume. Y ¡mierda! Ya no tenía tiempo de afeitarme.
Baje a toda prisa las escaleras. Sin tiempo de desayunar tomé mi bolso y salí de la casa.

Después de unos diez minutos tomé un taxi.
- ¿no podría ir más rapido?-le pregunté al chófer mientras miraba por milésima vez mi reloj de muñeca.
-lo siento señor, pero eso me será imposible- dijo lentamente el conductor con voz pastosa. - hay mucho tráfico y pues mire - me hizo un gesto con la cabeza para que mirara por la ventana- estamos en medio de un taco.
Pase las manos por mi cara maldiciendo para mis adentros. Esto no podía empeorar más.
Si no tomaba una desicion rápido estaría todo el día en medio de ese taco.
-sabe que...- le dije al chófer al tiempo que sacaba el dimero de mi bolsillo. -caminare- le entregue el dinero y me baje del taxi.
Tenía dos opciones en ese momento. Una, caminar hasta el colegio (que no me quedaba nada cerca ) y dosm volver a la casa que sólo estaba a unas cuántas cuadras a buscar mi motocicleta.
Me fui por la siguiente opción. A toda prisa camine hasta la casa. Al llegar de inmediato abrí la cochera, verifique si la moto tenía bencina. Al comprovar que si le quedaba me monté en esta y salí echo una bala.

Llegué a los diez minutos después. Aparque la moto en el estacionamiento, me baje y camine a paso ligero hasta la recepción que estaba a la entrada del colegio.
-hola- dije al llegar. La inspectora encargada me miro con el ceño fruncido. - ¿me podría decir donde esta el aula 30? Soy el nuevo profesor de matemáticas, Lucas Miller. - le sonreí. De inmediato el rostro de la mujer se relajó.
- disculpe que no lo haya conocido profesor Miller -dijo sonrojandose.- si quiere puedo llevarlo hasta allá .
-por favor.
Subimos las escaleras hablando. La mujer estaba empeñada en saber más sobre mi. Yo sólo le sonreía y le respondía amablemente.
-bien, llegamos- dijo casi sin aliento. El aula 30 estaba en el tercer piso, al final del pasillo.
-muchas gracias- pose mi mano sobre su hombro.
-si quiere puedo anunciarlo.
-no muchas gracias, ya hizo lo suficiente - la mujer asintió con la cabeza y se despidió con una sonrisa.

¿Qué Oculta Profesor Miller? (Borrador)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora