La auténtica belleza que descubrimos cuando nos permitimos sentir. Es el verdadero alimento del alma, el que se nutre de una mirada o del fulgor de una estrella clavada en el firmamento.
Dedicado a todos los que me animaron a escribir.
Capturando en un instante la eternidad, en tu mirada todas las cosas. Qué no lo sabía que en tus ojos se detuviera el tiempo. Quizás, una reacción química de nuestros cerebros locamente enamorados. Quizás, los misterios del amor que llevamos dentro, que no fue efímera felicidad. Recuerdo ese instante como si fuera en este momento. Qué la vida son pedazos de todos los presentes que se fueron y vendrán, a las espaldas del viento no espera, ni siquiera el tiempo.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
