En los confines
del universo,
Allí donde
comienza el infinito.
Lo inabarcable
se extiende
hacia un imposible
que desafía la razón.
El origen de todas
las cosas,
es mi último destino,
en su génesis
todos mis principios.
Pertenezco al orbe
que miro y admiro,
mi patria
son las estrellas,
mi nación un cúmulo
de galaxias al final
de cualquier espacio
mi territorio
sin fronteras.
Ínfimo como
una partícula
meciendome
entre los vaivenes
de una marea estelar.
Náufrago entre
constelaciones
buscando siempre
la buena estrella
que me guie
hasta mi pertrecho
corazón,
En mi ser el universo
que mora en mis adentros.
Como un núcleo
donde se concentran
todos los puntos
de los infinitos caminos
mi esencia
siente los latidos
del corazón
del universo
acompasados
por mis pasos
por este
inmenso misterio
que no se acaba
de desvelar
y que es la vida.
Soy consciente
de todo lo que desconozco
cuando miro absorto
el firmamento.
Esa magnitud
que me hace pequeño
hasta que casi desaparezco
para fundirme
con su secreto.
Escucho la música
de las esferas
en mi alma,
receptiva
de una participación
sagrada
en tan hermosa
composición de notas,
una maravillosa
sinfonía,
si pasmado
miro la bóveda celeste.
Silencio
todo se ha callado
sólo se escucha
en mi alma vibrante
una hermosa melodía
un concierto
de estrellas
en mis adentros.
Alberto Real Borrueco
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Tiempo de Poesía
PoetryLa auténtica belleza que descubrimos cuando nos permitimos sentir. Es el verdadero alimento del alma, el que se nutre de una mirada o del fulgor de una estrella clavada en el firmamento. Dedicado a todos los que me animaron a escribir.