Capítulo 91.- Así trabajo yo.

2.7K 139 44
                                    

Señoras y señores, buenas tardes, buenas noches. Buenas tardes, buenas noches, señoritas y señores. Esta noche estar aquí es mi pasión, ¡Qué alegría! ... ya está bueno... dejo esa canción. Aunque mamá coco se marchó... y llamo a su barco libertad... en el cielo descubrió gaviotas... y pintó estelas en el mar... Y dale con las canciones, quien sabe por qué estoy cantante hoy.

Tal vez es porque estoy publicando capitulo.

Y les diré a todos ustedes, que perdón por pasar tanto tiempo sin publicar, pero de verdad tengo otras cosas que hacer ahora que estoy encerrado. Y es curioso pero bueno.

Sin más que decir, les dejo el nonagésimo primero juegos del ham.... Esperen... ese no lo escribí yo.

Como sea..., Lean, disfruten y comenten

Pasar desapercibido en Londres era un problema, más cuando llevas un vestuario que atrae las miradas y colgando una máscara rara en la cintura

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Pasar desapercibido en Londres era un problema, más cuando llevas un vestuario que atrae las miradas y colgando una máscara rara en la cintura. Su primera acción fue bajarse del Big Ben, subirse justo donde las manecillas se movían y toda la gente lo podría observar no fue muy inteligente, además de que entrar a la maquinaria y bajar era otro problema. Si los muggles no se preguntaban ¿Qué hacia adentro? Cuando era inaccesible para personal no autorizado, es que necesitaban cambiar su seguridad o comenzar a ser más observadores.

Una vez que llego a la calle estaba a la vista del público, encamino sus pasos por el London Coliseum, avanzando hacia el caldero chorreante. Su primera parada. Atraía miradas y el asombro de varios, escucho a un par de señoras preguntándose si era algún actor o si cambia a algún evento. Pero el no paro en ningún momento rumbo al caldero chorreante.

Lo recordaba como si fuera ayer, el caminar detrás de Hagrid con todos abriendo paso ante el semigigante, como sus ojos escudriñaban cada local buscando artículos mágicos o por lo menos un lugar raro, para luego terminar frente a la misma puerta en que estaba ahora. El caldero chorreante, un simple, viejo e ignorado lugar en la calle. La última vez que estuvo justo ahí, antes de su viaje, perdió la capa de su padre, sus cosas y, por romper la indicación de Dumbledore, la confianza de los demás.

Ahora esperaba que fuera diferente. Entro al local, tan vacío como nunca antes, ni siquiera veía a Tom en la barra y, por muy extraño que le pareciera, todo estaba limpio. Parecía que el tabernero hubiera hecho una remodelación, el suelo antes algo grasiento relucía de limpio y la barra parecía espejo ¿Cuánto tiempo se la paso limpiando? Fue la pregunta en la mente de Harry.

Avanzo mirando a los lados y buscando al tabernero por su magia, encontrándolo en la trastienda moviéndose raro, tal vez acomodando algo o limpiando la parte que los clientes no veían. No viendo motivo para sacarlo de su aseo a fondo, simplemente fua a la parte trasera y con el índice toco los ladrillos que abrían la entrada al callejón diagon. Después de todo el báculo de Merlín lo dejo en su cuarto, no creía necesario pasear por todo Londres y el ministerio con semejante arma cuando incluso tendría que estar ante público.

Harry Potter y el mayor poder del pasadoWhere stories live. Discover now