Campamento, Amor y Pinos

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Al acercarse a la puerta del granero, las chicas consiguen ver una inscripción en el tapete de la entrada: Familia DeMayo.

—Rose no mencionó nada sobre estos... DeMayo... —masculla Peridot, con una mueca de incomodidad.

—Quizá este granero era para ellos, quizá algo les sucedió —responde Lapis, con una mirada algo siniestra. Aunque hayan tenido algo de suerte, no puede olvidar que siguen en medio de una guerra, y en las guerras siempre hay bajas.

Peridot nota el cambio de humor de su musa, así que se apresura para introducir la llave y abrir la puerta corrediza. Una vez dentro, guarda las llaves en su bolsillo y da dos aplausos en el aire, tras lo cual mira a su alrededor confundida, como si esperara que algo sucediese.

—¿Las luces están descompuestas? —pregunta en voz alta, aplaudiendo nuevamente.

Lapis ríe sutilmente, mientras tantea la pared con sus manos en la oscuridad, hasta que consigue encontrar el interruptor, y la sala del granero finalmente se ilumina.

—Peridot, parte de la magia de vivir en un sitio como este es... Ya sabes, desconectarnos un poco de la tecnología —menciona.

—¿Por qué querría alguien desconectarse de algo tan valioso?

—Creo que nos las arreglaremos sin luces automáticas —responde, con una sonrisa sarcástica.

Una breve exploración les permite ver que la casa está bastante bien equipada, la sala cuenta con un televisor anticuado y está conectada a una terraza con vista al lago, tienen una cocina espaciosa, e incluso un comunicador holográfico, siendo quizá la única tecnología moderna en todo el granero. Al lado del televisor, Peridot encuentra una caja de cartón, dentro de la que parece haber varias grabaciones de una serie. Antes de poder revisarlas, escucha la voz de Lapis desde el segundo piso.

—¡Hay dos habitaciones! ¿Puedo quedarme la que tiene el tragaluz?

—¡Claro! —responde, sacando una de las grabaciones.

«¿Campamento, Amor y Pinos? Parece el tipo de dramas cursis que detesto», piensa, arqueando la ceja. Pero, un vistazo al televisor le hace pensar que eso es todo lo que podrán ver.

—¿Encontraste algo? —pregunta Lapis, mientras baja por las escaleras.

—Entretenimiento barato... —responde desganada, devolviendo la grabación a la caja. Al voltear la mirada hacia su musa, sus ojos esmeraldas se iluminan de emoción.

Lapis ha cambiado su vestido por un pijama celeste con franjas azules, así como unas pantuflas blancas, también carga en sus manos otro pijama verde con estrellas amarillas.

—Nos dejaron esto, imagino que estás deseosa de cambiarte esos harapos —comenta la chica, entre risas.

Peridot baja la mirada por unos segundos, para comprobar que su uniforme imperial es un completo desastre, lo cual no es de extrañar, considerando los eventos recientes.

—Debí empacar otro uniforme... —responde, apenada.

—No... Dejemos al imperio atrás, mañana te buscaré algo nuevo en la ciudad.

—¿En serio? —pregunta, ligeramente sonrojada.

Lapis asiente con una sonrisa, y le hace entrega de su pijama. Seguidamente, la caja llama su atención, por lo que se agacha y toma una de las grabaciones.

—¿Este es el entretenimiento barato? —pregunta, leyendo el título de la serie.

—Dudo que este televisor prehistórico nos permita ver otra cosa.

—Supongo que tienes razón, aunque en este momento agradecería cualquier tipo de distracción, ¿quieres ver un capítulo conmigo?

—¡Sí! —exclama la rubia, sin pensarlo dos veces —. Iré a cambiarme, vuelvo en un minuto.

Lapis se divierte al ver lo emocionada que está por ver ese "entretenimiento barato", y se dirige a la cocina para preparar algún snack nocturno. Unos cuantos minutos después, ambas se encuentran sentadas en el sofá, disfrutando del sorpresivamente entretenido drama adolescente, y degustando unos emparedados con refresco. Tras haber maratoneado varios capítulos consecutivos, el televisor sigue encendido, pero ya nadie le presta atención, pues ambas se han quedado dormidas en el sofá. Lapis abraza a Peridot como si fuese un oso de peluche, y esta última parece dormir plácidamente entre los brazos de su musa.

Amantes en Guerra [Lapidot]Where stories live. Discover now