¡No corras sin mí! (Street Art) [EDITANDO]

Capítulo 39: En las nubes

Dulce se removió en la cama al escuchar su despertador y lo apagó de inmediato con un manotazo ¿Por qué estaba tan cansada y le dolía todo el cuerpo?

Una sonrisa se empezó a plasmar en su cara al recordar lo sucedido el día anterior. El calor de ambos cuerpos juntos, los besos de Christopher propagándose por todo su cuerpo, el olor de su pelo, el sabor de su piel...

Había sido una tarde noche perfecta y todas las consecuencias de hoy valían totalmente la pena.

Sin mucho ánimo de levantarse se paró para prepararse para la universidad, solo tenía puesto el polerón de Christopher. Te queda mejor que a mí le había dicho antes de irse. La había dejado agotada y con ganas de dormir después de la última vez y antes de quedarse como tronco en su cama el la paró con delicadeza y le puso la prenda...

Se dio una ducha reponedora y pudo ver como varios chupones estaban a la vista mientras se secaba frente al espejo, se carcajeó sola. Seguro él tendría también algunos.

Cuando se sentó para maquillarse en su tocador vio la foto de Christopher puesta en la esquina del espejo.

¿Foto por dibujo? Pero sigo pensando que eres una psicópata estaba escrito en un post.

¡Ay! ¿Es que este día podía partir de mejor manera?

Al pasar por la cafetería en la que trabajaba Christopher vio como este estaba limpiando las mesas y paró el auto en intermitente.

Le tocó la bocina con furor mientras el se volteaba con el ceño fruncido, hasta reconocer el auto y levantar la mano con una media sonrisa.

-¡¿Cómo estás?!- le gritó Dulce con una sonrisa de oreja a oreja.

Christopher se acercó hasta la calle -He soñado toda la noche con unos gemidos que gritaban mi nombre-.

-Entonces supongo que bien- rió.

-No de hecho todo lo contrario, eran como de coyote o algo asi. Te juro que casi se me revienta el tímpano-.

Dulce lanzó una carcajada desde lo más profundo de su ser -Tonto- rió.

Christopher se acercó al auto y entró su cabeza en el -¿Te digo que estaba pensando?-.

-¿Qué?-.

-Que podríamos ocupar ese baño tan fresa que tienes para divertirnos-.

-¿Te refieres a mis lociones de rosas y vainilla?-.

-Mmmm prefiero ahogarme en bencina- bromeó Christopher.

-También podríamos intentarlo- le respondió coqueta.

-Ya veo que me estás respondiendo- contestó divertido.

-Tendrás que empezar a buscar nuevas armas con las que sorprenderme señor Toph- advirtió.

-Tengo una muy buena que la puede desarmar en cualquier momento, señora-.

Dulce sintió como sus mejillas se tornaban coloradas.

Alguien de atrás le tocó la bocina y se acordó que estaba estacionada en medio de la calle.

-Me tengo que ir -dijo despidiéndose- Nos vemos-.

-Hasta pronto, preciosa- dijo sacando su mano del auto mientras este empezaba a andar.

Dulce lo miró por el retrovisor hasta perderlo de vista. No veía la hora para poder salir de la universidad.