¡No corras sin mí! (Street Art) [EDITANDO]

Capítulo 86: ¿Algo más?

El cerebro de Dulce maquinó a toda velocidad para entender lo que estaba frente a sus ojos.

-Dulce- sintió como la llamaban.

La chica levantó la cabeza con rapidez.

-¿Qué? ¿Ya? ¿Hoy? ¿Cuándo?- preguntó mitad despierta mitad dormida.

Lorenzo, el abogado más joven de todos rió.

-Te pregunté algo-.

—Ah... si-.

Miró el reloj mientras mascaba algo que no existía. Ya eran las dos de la mañana. Tendría que levantarse en cinco horas. Se imagino la sensación de sueño al despertarse y sintió dolor, verdadero dolor.

-Te preguntaba si conocías a una persona-.

Pero Dulce ya tenía nuevamente la cabeza sobre la mesa.

-¡Dulce!- la llamó mucho más fuerte.

La chica casi saltó de la mesa.

-¡Ya! si ¿A quién?-.

-A Pablo-.

-¿Pablo cómo?-.

-Aparece en varios trabajos de Christopher como colaborador, hace como un año...-.

-Si... es un estafyaduoor...-.

-¿Un qué?-.

Dulce cerró los ojos y los abrió con fuerza para despejarse. Pero era imposible.

-¿Qué?-.

Lorenzo cerró los ojos y respiró profundo.

-¿Sabes como puedo contactarlo? Queremos ver si puede servirnos en el juicio-.

-Mmm... las cashtas- dijo apoyándose en sus brazos.

-¿Las qué?-.

-Ca... ts- balbuceó.

-Carajo Dulce. Hernando ¿Sabes lo que quiere decir esta zombie?-.

-¿Qué cosa?- preguntó el de lentes.

-Dulce, ¿Me puedes decir donde puedo contactar a Pablo, el que aparece como colaborador en las obras de Christopher?-.

La chica parpadeó pesadamente -Cashtas-.

-¿Cartas quieres decir?- intuyó Hernando.

Dulce hizo un sonido que supusieron que era un si. Ya estaba con los ojos cerrados nuevamente.

-Ricardo ¿Hay cartas en la evidencia que sacaron de la casa de Christopher?- preguntó Lorenzo.

Y eso fue lo último que escuchó de aquella conversación...

-Corte -pidió José Manuel- ¿Dulce? ¿Dulce? ¿Estás ahí?-.