Guía para educar a un protagonista masculino de apoyo [+15]

Capítulo 28. En la oscuridad

Lin Xin no se atrevió a seguir caminando; sus pies se quedaron congelados frente a la entrada.

El mundo nunca era blanco puro, lo sabía desde hacía mucho tiempo, pero tenía miedo de enfrentarse a la oscuridad.

De repente, una figura pasó corriendo junto a ella y entró primero en la habitación.

"Lin Xinyu, ¿por qué te has quitado la ropa? Lin Xinyu, ¿por qué estás en la cama del decano? Lin Xinyu, tú..."

La voz de Zhao Qiang se apagó hasta que, finalmente, sólo quedó un incómodo silencio en esta sofocante habitación.

Lin Xin dio un paso adelante hacia la oscuridad que temía.

En esta oscura habitación, Lin Xinyu era como un ciervo indefenso; sus ojos estaban húmedos por las lágrimas y sus pequeñas manos abrazaban con fuerza la colcha que le cubría. Tembló cuando Lin Xin entró en la habitación. Antes de que la chica entrara, ya había visto sus pies fuera de la puerta y sabía que era ella. Rezó mucho para que ella no entrara y viera su aspecto sucio. Estaba tan sucio que nadie más quería jugar con él.

Lin Xin era su única amiga. No quería perderla.

Lin Xin aún no se había acercado a su lado. En su lugar, le miró desde su lugar y le dijo con calma: "Deberías ponerte ropa o cogerás un resfriado".

Su calma dejó a Lin Xinyu sin saber qué hacer.

Fingió que no entendía nada y, en cambio, habló con una sonrisa: "Te hemos estado buscando durante mucho tiempo para poder jugar contigo. Resulta que te has echado una siesta aquí con el decano".

Lin Xinyu se frotó los ojos y dio un suspiro de alivio. '¿No lo ha visto, verdad? Sí, así es. Ella seguirá jugando conmigo más tarde'. Lin Xinyu continuó limpiando sus lágrimas y se puso la ropa con gusto. Le dijo: "Tendrás que jugar más conmigo en el futuro. Te daré toda la comida que tengo".

Lin Xin se dio la vuelta mientras Lin Xinyu se cambiaba; esperó en silencio, mientras su corazón se llenaba de inquietud y dolor. Se volvió para mirarle una vez que sintió que el chico había terminado de vestirse.

Zhao Qiang, que había permanecido aturdido junto a la pared, volvió lentamente a la realidad. En pleno día, Lin Xinyu había estado tumbada desnudo en la cama del decano; no hacía mucho, el propio decano estaba en esa misma cama.

Zhao Qiang no era tan tonto como para ignorar lo que había ocurrido. Era tan chocante que le costó creer por un momento que el hombre al que consideraba como un padre fuera en realidad una bestia vestida de hombre.

Zhao Qiang quería salir de esta asfixiante habitación y tomar una bocanada de aire fresco para reponerse. No se despidió de Lin Xin y se dirigió directamente a la salida. Justo cuando estaba a punto de tocar el pomo, la puerta se abrió de repente y se estrelló contra su pecho, haciendo que el chico cayera al suelo.

Lin Xin levantó la vista cuando de repente oyó un fuerte golpe. En ese momento, el decano estaba en la entrada y miraba fijamente a Zhao Qiang, que estaba tirado en el suelo.

Cuando se produjo el incendio, no tuvo más remedio que ocuparse primero de la emergencia. Ahora que se ha apagado, se apresuró a volver al lado de Lin Xinyu, pero nunca esperó encontrar a dos personas más en esta habitación.

"¿Cómo han acabado aquí ustedes dos?" Preguntó el decano.

Zhao Qiang era un chico que no sabía guardar secretos. Una vez que vio al decano, fácilmente entró en pánico.

"Nosotros..."

Temiendo que expusiera su estratagema, Lin Xin rápidamente intervino: "La puerta estaba abierta de par en par, así que entramos para ver si Lin Xinyu estaba jugando aquí. Nosotros también queríamos jugar aquí".

Zhao Qiang se apresuró a asentir: "S-sí, sí, así es".

El decano se volvió hacia Lin Xinyu y preguntó: "¿Es así?".

Lin Xinyu asintió y se movió ligeramente para esconderse detrás de Lin Xin. El decano arrugó el ceño con disgusto. Se acercó al lado del frágil muchacho y apartó a Lin Xinyu antes de exhalar amenazadoramente a la chica: "Aléjate de él".