Guía para educar a un protagonista masculino de apoyo [+15]

Capítulo 22. La advertencia del decano

Zhao Qiang continuó diciendo: "Es cierto. Si ella no estuviera allí esa noche, Lin Xinyu no te detendría e impediría que nos vieras".

"Zhao Qiang, no tienes que hablar para demostrar a todo el mundo que no eres mudo", Lin Xin no pudo evitar reñirle ansiosamente para que se diera prisa en cerrar la boca.

Al escuchar sus palabras, Zhao Qiang no tenía ni idea de qué había dicho mal. De hecho, sólo quería que el decano le prestara atención, pero ahora, parece que mencionó algo que no debía. ¿Qué debería hacer?

En ese momento, el decano sonrió con más ganas. Sus ojos se posaron en Zhao Qiang y dijo: "No esperaba que Lin Xinyu y Lin Xin tuvieran tan buena relación".

A Zhao Qiang todavía le faltaba cerebro; asintió dubitativo, luego miró secretamente a la más bajita Lin Xin, pero esta vez, no se atrevió a decir una palabra.

El decano empezó a escudriñar a esta niña poco atractiva, pensando que no era tan sencilla como parecía.

Se rió y dijo: "Ya que el terreno se ha aflojado, sus tareas han terminado. Pueden retirarse, pero Lin Xin debe quedarse ya que tengo algo más que decirle".

"Oh". Lin Xin respondió suavemente. Se quedó en silencio y esperó la reprimenda del decano.

Zhao Qiang sintió que algo iba mal en la situación. Se alejó unos metros, pero después de deliberar, volvió rápidamente a su lado y dijo: "Te espero en la puerta de atrás. Vamos a cenar juntos".

Lin Xin le sonrió tranquilizadoramente. Pensó que si ella podía sonreír así, no debería haber problemas. ¿Qué otra cosa podría salir mal? Zhao Qiang se dirigió alegremente hacia el orfanato.

Cuando el decano vio que el chico se había alejado lo suficiente, cogió sus gafas y se las limpió con la esquina de su camisa. Mientras se las frotaba lentamente, preguntó a Lin Xin significativamente: "¿Así que a Xinyu le gustas mucho?".

Los ojos del decano se entrecerraron con hostilidad mientras miraba fijamente a Lin Xin.

Ella respondió con calma: "Parece que es así".

"Oh, entonces deberías mantenerte alejada de él a partir de ahora". El hombre se puso las gafas y volvió a su habitual actitud amable. "Eres una chica inteligente. No hace falta que te diga las consecuencias".

Lin Xin continuó diciendo: "Decano, sé que debería alejarme de Lin Xinyu, pero siempre quiere seguirme. Ya le he ahuyentado antes, pero sigue negándose a alejarse".

"Entonces sigue ahuyentándolo cada vez".

Lin Xin mostró una expresión de pánico: "Pero, ¿de qué otra forma puedo deshacerme de él?".

El decano simplemente respondió: "Entonces deja el orfanato".

Lin Xin se estremeció ante sus frías palabras. Se negó a mirarle a los ojos mientras decía: "Lo sé".

"Siempre que lo sepas". Después, el decano no dijo nada más. Se dio la vuelta y se dirigió a la puerta trasera del orfanato.

La espalda de Lin Xin estaba empapada de sudor. Cayó al suelo y jadeó mientras intentaba estabilizarse. El decano era mucho más amenazante de lo que ella imaginaba. De hecho, parece que las cosas no eran tan sencillas como ella pensaba inicialmente. Habiendo visto la oscuridad que envolvía sus ojos, ¿quién sabía si haría algo descabellado? El pensamiento de un loco sólo podía ser terrible.

Lin Xin descansó un rato antes de recuperar fuerzas. Cogió su pala de hierro y la arrastró de vuelta al orfanato hasta llegar al patio trasero. Cuando abrió la puerta, vio a Zhao Qiang sentado en el suelo, esperándola.

El corazón de Lin Xin se llenó inmediatamente de calidez y dijo en tono amistoso: "Oye, es hora de cenar. ¿Por qué sigues sentado aquí?".

Cuando Zhao Qiang notó su buen humor, suspiró aliviado. "Oye, cuando el decano vino por aquí, su expresión era tan aterradora. Ni siquiera respondió cuando le llamé, así que pensé que habías dicho algo para enfadarle. Por eso no me atreví a volver a llamarle; pensé que perdería fácilmente los nervios".

Lin Xin sonrió y respondió: "Zhao Qiang, creo que el decano no recuerda tu aspecto, por lo que cada vez que estás allí, acaba por ignorarte".

Esta frase dio en el punto sensible de Zhao Qiang. ¿Qué niño no querría la atención de sus padres? En este caso, el papel de los padres fue naturalmente reemplazado por el Decano. Cada vez, Zhao Qiang quería llamar la atención del Decano, pero sólo tenía ojos para Lin Xinyu.