Adagio [EunHae]

15.

***Advertencia: si eres sensible con lecturas para adulto te recomiendo que evites este capítulo. Cabe aclarar que esto es mera ficción y entretenimiento. Fácilmente puedes decidir si continuar o no. Pero es bajo tu responsabilidad.***

JangHyun no se abstuvo de alargar la conversación cuanto más pudo a medida que transcurría la noche. Sentía en todo aquello una suerte de recuperación por los momentos perdidos durante su estancia dentro del barco.

Y es que a pesar de que era un viaje que disfrutarían juntos a veces parecían alejarse de repente debido a la diferencia de rumbos por lo que ambos encontraban 'divertido'.

Habló, sobre todo, de lo ansioso que estaba por volver a clases aun si eso significaba terminar con tremendas vacaciones que quedarían plasmadas en su memoria prácticamente por el resto de su vida.

La mudanza prometía grandes cosas.

Y es que se dieron cuenta de que era necesario buscar un sitio distinto cuando empezó a volverse más y más pesado el tener que despertar temprano para las primeras clases. Habría que comprobar qué tan efectivo era vivir a un par de minutos de la universidad. Las malas lenguas dicen que, mientras más cerca resides, más problemático se vuelve el asunto de la puntualidad.

Tal vez fuera una cuestión de mera personalidad y no de compromiso. Viviendo lejos o cerca Lee Hyukjae se caracterizaba por ser el más formal de ambos. Como uno de los mejores promedios de la generación no cabían en él preocupaciones extrañas sobre distancia o tiempo dado que, de la manera que sea, conseguía acoplarse a su entorno y a las necesidades convenientes.

Jannie lo pasaba peor. Despertar a buena hora se volvía el más grande reto que pudiese atravesar en cualquier sitio donde durmiera.

Aunque no era del todo su culpa.

El castaño solía contarle a Hyukjae sobre sus noches de insomnio cuando vivía con sus padres. Ciertamente no existía nada extraño en el entorno que lo mantuviera alerta o ansioso al punto de no querer ni poder conciliar el sueño. Por eso ver con mala cara el hecho de que JangHyun durmiera tanto por las noches era prácticamente imposible.

¿Cómo hacerlo? Si su amigo daba la impresión de estar recuperando poco a poco las noches que no durmió al vivir en su antiguo hogar.

Independizarse, de todas las ideas alocadas que tuvo aquella persona, fue esa la más acertada y efectiva para lo que necesitaba. Libertad. Menos presión. Menos desprecios. Menos inquietudes.

Jannie durmiendo sin obstáculos era una bendición. Aunque, claro, ese tipo de situaciones no funcionan como justificación para los retardos escolares o las advertencias de puntaje en la calificación total del periodo.

Visitaron el bar cuando la madrugada los recibía en un abrazador frío que volvía un tanto tétrica la estructura del barco.

Jang, por supuesto, bebió mucho más que Hyukjae.