No me abandones: El final se acerca

3 No se trata de ti

Estacionamos los autos justamente frente a la entrada del refugio de los Salvadores. No había nadie que estuviera haciendo guardia afuera, solamente esos asquerosos caminantes rodeando la valla como protección.

Las láminas que les colocamos a los autos nos servían a la perfección como escudos, por si recibíamos disparos del enemigo.

Rick me había dicho en el camino muchas cosas acerca de Carl. Dijo que aunque no lo demostrara muy seguido, en realidad lo amaba mucho. Se sentía devastado por lo que le estaba pasando, lo del coma y todo eso. Digo, ¿quién podía no sentirse mal? Todos estábamos muy preocupados por él, y el hecho de que Enid hubiera huido de aquella forma me molestó demasiado.

Me coloqué a un lado de Rick con mi arma en manos. La brisa que me golpeaba en la cara hacia que se me congelara la piel y me estremeciera un poco por los escalofríos que sentía. Me había olvidado de llevar un abrigo con el montón de cosas que traía en mente. Entre pensar sobre lo que le sucedía a Carl, que Enid se fue, y además de que estábamos por desatar una guerra, me estaba volviendo algo distraída.

Me abracé a mi misma tratando de alguna manera entrar en calor, pero como era de esperarse, no funcionó.

-Toma.

Miré a Rick. Comenzó a quitarse su chaqueta apresurado.

-No - lo detuve antes de que pudiera quitársela por completo -Estoy bien.

-No, no lo estás. Sería muy ilógico que murieras de frío.

Ignoró mi petición y me ayudó a ponermela con cuidado. En cuanto la tuve cubriendo mi cuerpo me sentí mucho mejor. Ahora estaba más cómoda y comenzaba a entrar en calor rápidamente.

-Gracias - le respondí con amabilidad -Aunque no era necesario que lo hicieras.

-No es nada, Ally - se agachó para tomar su arma -Los hombres tenemos la piel más gruesa, por lo tanto no sentimos frío, al menos no como las mujeres.

Le sonreí y él me devolvió el gesto.

-A sus lugares - susurró Rick, obteniendo la atención de todos.

Maggie se posicionó a un lado mío y cada uno de los demás se fueron a sus puestos asignados con mucha cautela. Rick, con una simple mirada nos dió la indicación para que levantaramos nuestras armas en dirrección al cielo nublado. Esperamos a que Maggie nos hicieron la seña con su brazo, y cuando lo hizo disparamos una sola vez.

Rick miraba por uno de los espacios entre las inmensas láminas para así poder asegurarse de que Negan saliera de su escondite. Y entre el silencio que habitaba en el lugar, escuché una puerta abrirse.

-¿Qué demonios pasa aquí? - gritó Negan -Estaba en una reunión.

Reí sarcásticamente por lo bajo y agaché la cabeza.

-Veo que se han protegido bien. Así que no hay razón alguna para empezar un tiroteo.

La curiosidad logró apoderarse de mi y me ví obligada a mirar a través del pequeño espacio por el cual Rick veía a Negan perfectamente. Ahí estaba él, caminando de un lado a otro con una gran sonrisa maliciosa que siempre ponía en situaciones como esas. Lo acompañaban Dwight, Simon, Eugene, y un hombre y mujer que realmente desconocía.

-No quiero ponerlos en la línea de fue porque quiero jugar a "mi polla es más grande que la tuya"... Y lo es. Todos lo sabemos.

Rodé los ojos sin dejar de mirarle con atención. Rick aún no decía absolutamente nada. Un momento de silencio se hizo presente y luego Negan dijo:

-No pienso dejar que muera mi gente por esta gilipollez... Como vas a hacerlo tú - señaló a Rick con Lucille en manos y captó mi presencia -¿No es así, Allyson?