No me abandones: El final se acerca

35 No huyas

Hashtags del capítulo anterior:

#CreoQueValióVerga

#CreoQueNoPiensasEnNuestrosSentimientos

#CreoQueNosVasAHacerSufrirDemasiado

#CreoQueEstáMuerto

#CreoQueMeQuieresMatarDeTristeza

#CreoQueNosQuieresVerArder

#CreoQueMeSuicidaréDespuésDeTerminarLaHistoria

#CreoQueEresAlguienBuenoPeroTeGustaHacerSufrirALasPersonasMatandoASusAmoresImposibles

#CreoQueSosDemasiadoCruelAlDejarnosEnSuspenso

#CreoQueSufriréMuchoPeroAúnAsíTeSeguiréQueriendo

#CreoQueVoyALlorarSiMuereCarl

Amaneció. Fue una noche llena de tortura y tristezas. Más de veinte muertos, y todos heridos durante el ataque de Hilltop hacia los Salvadores. Escuché por parte de algunos que se debía a las flechas que muchos de nuestros enemigos lanzaron la noche anterior. Lo más lógico era que hubieran sido infectadas con sangre de caminante. Rick lo dedujo luego de recordar la sangre que encontramos en el auto de Negan, justamente el día en el que lo perseguimos dentro de ese edificio que se caía a pedazos. Tara fue dañada con una de ellas, pero no presentaba síntomas. Talvez la flecha que lanzó Dwight no tenía absolutamente nada, aunque de igual forma tuvo la intención de herirla.

Recostada en una de las paredes de Hilltop, dejé que las lágrimas siguieran saliendo mientras veía cómo enterraban bajo tierra a nuestra gente caída de hace unas horas.

No pude dormir ni un poco. ¿Cómo iba poder hacerlo? Las manos me temblaban. El corazón me latía con demasiada intensidad, algo que no soportaba. Carl no estaba. Se había ido. Se fue, o mejor dicho... se lo llevaron. ¿Por qué?

-¿Por qué no simplemente los quemamos?

Oí que alguien preguntó. No pude saber quién, pero me atreví a responder.

-A la nuestros no los quemamos, los enterramos - me detuve por un momento -. Eso me lo dijo un buen amigo años atrás.

No escuché algún reclamo, así que dejé que mi vista se perdiera de nuevo.

Maggie dijo que no había suficientes recursos para resistir otro ataque. Eso sí que me preocupaba. Si los Salvadores regresaban a cobrar venganza seríamos los primeros en caer. Además de eso, no dejaba de pensar en Negan. No sé presentó en el ataque. Nadie lo vio por ningún lado dando órdenes o pasando a Lucille de una mano a otra. Me preguntaba qué le había sucedido.

De reojo alcancé a ver que Leila me miraba con una pala en sus manos. No le di importancia y sentí que unas lágrimas se deslizaban por mis mejillas. Sollocé.

-De acuerdo - la rubia arrojó la herramienta al suelo y se acercó a mí con grandes zancadas -. Arriba, Allyson. Es hora de levantarse, la tristeza ya terminó.

Tomó mis brazos, lista para hacer que me pusiera de pie. Me negué. Solté sus manos de mis extremidades y me quedé ahí tirada.

-Déjame.

Los brazos cayeron a mis costados, débiles e indefensos ante cualquier acción.

-Ya basta, Allyson. Te haces daño. Él estará bien. Lo vamos a encontrar - habló, colocándose a mi altura.

Una punzada me hirió el corazón. Me habían dicho eso tantas veces en toda la mañana. Me lo habían dicho con otros personas que terminaron muertas. ¿Qué podía esperar?