36 Recuerdo...

708 51 22
                                    

Hashtags del capítulo anterior:
(Que rencorosas me salieron)

#BrookeEsUNAMALDITAHIJADEPERRA

#BrookeEsUNABASURADEPERSONA

#BrookeEsUNAPUTAZORRASINSENTIMIENTOSHIJADEUNAMADREDESAFORTUNADA

#BrookeEsQuieroQueLaMates
(Te vigilo Sandy xd)

#BrookeEsUnaPsicópataDeMierda

#BrookeEsUnaPutaZorra

#BrookeEsUnaMalditaSinSentimientos

#BrookeEsUnaHijaDeLasRemilPutasZorrasSinSentimientosPerraAsquerosaHijaDeLaPutaMadreQueLaParióHijaDeUmbridge

#BrookeEsUnaMalditaPsicópataYZorra

#BrookeEsUnaTraidoraDeMierdaLocaZorraYPsicópataPorqueQuiereMatarALaRayis

#BrookeEsTodosLosInsultosQueHayEnElMundo

#BrookeEsUnaPuta






Otros dos días ya han pasado. Agonía, desesperación, tristeza. Todo los sentimientos negativos me han llevado a un gran abismo de horror. Había estado reflexionando, pensando, planeando. Carl no quería matar a Brooke. Fue su error, un grave error. Él creía que era posible tratar con personas como ella, hacerla meditar sobre lo que hizo. Pero olvidó un detalle... Gente como Brooke no son capaces de cambiar, yo sabía que no.

No había logrado dormir ni un poco. Porque cada vez que cerraba los ojos, veía a Carl, rogándome por algo de ayuda. Y luego la veía a ella, cortando sus dedos uno por uno para después meterle una bala en la cabeza y así terminar con su vida. Mientras yo no podía dejar de pensar en él, Rick no podía dejar de salir al exterior a buscarlo. Huía cada mañana temprano, y no regresaba hasta antes del anochecer. Hablaba con él cada que podía. Intentaba hacer que leyera la carta, pues es lo que Carl quería desde un inicio. Y ahora que había muerto, era el momento más indicado para leer todas esas palabras que iban dirigidas a él por parte de su hijo. Pero se negaba, porque sentía que no estaba listo, y nunca lo estaría si no se atrevía ni a tomarla.

Por si fuera poco, aún seguía llorando. Me encontraba tirada en pasillo del segundo piso de la casa principal, derramando lágrimas sin el control de mi propio cuerpo. Debían de ser quizás la cinco de la tarde. Rick se fue al amanecer; lo ví salir. Sabía que se trataba de su hijo... pero talvez era hora de aceptar la realidad.

-Ya me cansé de verte así.

Giré la cabeza un poco. Era Erik. Me miraba a centímetros de distancia con un pequeño trapo entre manos, completamente limpio.

-No creo que pueda soportarlo más, Erik - comencé a sollozar -. ¿Qué se supone que haga para olvidarlo?

Se acercó a mí, colocándose a mi altura. Con una mano tomó mi mejilla y con la otra limpió todas y cada una de mis lágrimas.

-No. No sé trata de olvidarlo, se trata de que los recuerdos no sean dolorosos. Siempre que te acuerdes de Carl piensa en lo felices que fueron juntos, todos esos lindos momentos que pasaron - me aconsejó -. Alégrate cada vez que pienses en él. Y muy dentro de tu corazón di: ese chico me hizo muy feliz... Poco a poco el dolor irá disminuyendo y sonreirás al recordarlo.

Agaché la cabeza. No creí que Erik llegaría a decirme ese tipo de cosas. De alguna forma me hizo sentir mucho mejor, porque me decía que no alvidara a Carl, sino que al recordarlo me alegrara por haber conocido a una persona como él. Y yo sentía que, aunque hubo unas cuantas fallas entre nosotros, siempre supimos que nos hacíamos muy felices. En verdad disfrutaba estar a su lado. Ahora que ya se había ido estaba vacía. Pero necesitaba seguir con mi vida. Intentaría.

No me abandones: El final se acercaWhere stories live. Discover now