13.(CH) siempre

341 56 83
                                    

CEDRIC

LXV

—Gracias por confiar en mí.

Con todo el inesperado pánico que le había causado enterarse que Malcolm tenía un mal presentimiento sobre él, no le había hecho saber cuánto apreciaba el que hubiese decidido explicárselo. Algo que nunca le había contado a nadie, era claro, y ahora Cedric lo sabía.

Quería entender más sobre Malcolm.

—No es la gran cosa. O muy interesante —decía él cuando le hacía preguntas—. De verdad que no me ha servido para mucho, no como uno esperaría.

De acuerdo, entonces no podía predecir hechos puntuales.

—Diría que puedo decir cuando a alguien le gusta otra persona, pero creo que ese solo soy yo siendo metiche. O soñador.

Malcolm se reía, estirándose en su cama una tarde en su habitación.

¿Sabría sobre Harry...?

¿Estaba listo para contárselo...?

Quizás lo habría hecho en ese momento de no ser porque Zacharias entró.

LXVI

Todavía no podía hablar de ello con Malcolm porque no se encontraba preparado para lidiar con todas las emociones frente a los demás. Lo haría más real —más difícil si alguien podía notar su fugaz expresión cuando veía a Harry hablando con Cho en los pasillos entre clases.

Una que controlaba al instante.

Era mejor que eso, y de verdad le parecía genial que fuesen amigos.

Qué diferente al año pasado.

Antes no se habría acercado para no interrumpir sus posibilidades.

Ahora se preguntaba si este sería el año en que Harry y Cho comenzarían a salir y no se detenía a hablar con ellos. Los saludaba de lejos, si no podía evitarlo. Antes le habría preguntado a Cho sobre Harry, para tantear la situación. El viejo Cupido ya no podía hacerlo.

LXVII

No siempre podía evitarlo.

Harry y Cho le invitarían a participar de su conversación, y terminarían llevándola adelante ellos dos pese a que intentaban no dejarle de lado. Cedric no se quedaría mucho. Se sentía el peor amigo del mundo en ese momento, incapaz de continuar allí. ¿Cómo haría si...?

HARRY

LI

Aunque le había dado algo de ansiedad hablar con las amigas de Cedric en su cumpleaños solo, por su cuenta... en especial cuando Ron y Hermione, que también habían asistido, se fueron... Eran de lo más agradables y la había pasado bien. No conocía a Willow de antes y comprendía totalmente lo que Malcolm le había dicho en las gradas esa vez que jugaron Quidditch.

Eso explicaba por qué Tam y ella se habían pasado gran parte hablando entre ellas. Lo que de otro modo parecería de mala educación, se le hizo en parte adorable cómo se hacían comentarios en voz baja, riendo o sonriendo.

Cho había jugado un rol importante en ello también.

Por un lado, porque sí que se dedicó a conversar con él.

Por otro lado, porque era casi tan chismosa como Malcolm.

—¿Ves esas pulseras? Las hicieron juntas para todos nosotros. Ced, Malcolm, yo pero... Creo que las suyas son diferentes o las han hechizado, no lo sé. Sigo intentando descubrirlo.

El chico que amo -HEDRIC (2)Where stories live. Discover now